“No estancó nuestras aspiraciones democráticas. Ese fue su legado. El liderato de sus herederos es diferente.”

Por: Lcdo. Gregorio Igartua
Abogado

Después de 114 años, los 3.8 millones de ciudadanos americanos de 4ta., 5ta. y 6ta. generación residentes de Puerto Rico no podemos votar por el presidente de nuestra Nación, ni por cinco representantes ni dos senadores al Congreso. O sea, no tenemos Gobierno federal con nuestro consentimiento. La falta democrática federal tiene graves consecuencias políticas, legales, sociales y económicas para los ciudadanos americanos de Puerto Rico.

El propio Estados Unidos así lo ha reconocido en un tratado internacional; que esas mismas consecuencias de la privación de derechos democráticos afectan a los ciudadanos de los países signatarios (Carta Democrática de la OEA).

Consideren que Puerto Rico tiene un ingreso per cápita de un 50% menos que el más pobre de los estados. Procede entonces preguntarse, ¿dónde radica la causa del problema y/o quién la provoca? Los estadistas y los populares queremos la ciudadanía americana (97% de la población). Por consiguiente, lo lógico y práctico es que el 97% de la población en Puerto Rico aspire a una ciudadanía de igualdad con todos sus derechos democráticos de la Nación que nos hace ser parte de ella –de Estados Unidos. Esa es la norma a nivel mundial. Si eres ciudadano de una nación quieres disfrutar en igualdad de todos los derechos que los demás, y si te los niegan luchas por conseguirlos. En su lucha por la igualdad, los afroamericanos consiguieron la aprobación de las leyes de derechos civiles. Esa no es la norma del liderato del Partido Popular en Puerto Rico, que nos aplican las leyes federales sin nuestro consentimiento. ¿Cómo justifica el liderato Popular respaldar tal política? No la justifican, la practican, y así han ganado elecciones sin responder a esa pregunta.

Para ser justos es pertinente distinguir entre el liderato actual Popular, en el que todavía se destacan como máximos exponentes ideológicos los herederos de don Luis Muñoz Marín, especialmente el exgobernador Rafael Hernández Colón (Mitin-Testamento de Muñoz-Plaza Las Américas-1972). Durante la Gobernación de Muñoz (1948-64) se adoptaron las políticas más importantes de incorporación de Puerto Rico a ser como un estado. Veamos: (1) voto directo del Pueblo para gobernador en 1948; (2) ley de ciudadanía americana por nacimiento en 1951; 3) Constitución de Puerto Rico en 1952); (4) Participación en Partido Demócrata Nacional; y (5) solicitud voto presidencial en el Congreso en 1962. Don Luis gobernó en vías de transición estadista, en ocasiones en esfuerzo unido a don Miguel A. García Méndez y a don Luis A. Ferré. No estancó nuestras aspiraciones democráticas. Ese fue su legado. El liderato de sus herederos es diferente.
A pesar de 40 años de un ejercicio fútil en el Congreso y en Casa Blanca para que se reconozca el ELA y de simultáneamente defender la ciudadanía americana y participar activamente en la política nacional, el exgobernador Hernández Colón confiesa como su legado que habrá ELA para rato, o sea ausencia total de derechos democráticos por muchos años por venir y que nunca veremos la Estadidad (Caribbean Business, pág. 25, May 17, 2012).

Podemos concluir que el heredero principal de Muñoz no es como su testador, ni en términos prácticos ni ideológicos. ¿Por qué insiste todavía Hernández Colón en un estado político que favorece una ciudadanía americana sin derechos plenos del gobierno de la Nación de la cual quiere ser parte; algo que no cuadra en el marco constitucional americano?

Evaluemos la base racional de su posición:

(1) “… Con el ELA tenemos todos los medios y poderes para confrontar nuestros problemas y si no, recurrimos al Congreso…”. Totalmente incorrecto. Todos nuestros medios y poderes políticos a nuestro alcance están subordinados al Congreso. (Constitución PR Art. VII-3). Nuestras gestiones en el Congreso se tienen que hacer por medio del cabilderos por no tener legisladores en el Congreso como los tienen los estados; (2) “… Reconoce a don Luis Muñoz Marín por haber tenido la integridad de abandonar el ideal de la Independencia…”, pero él no decide abandonar la lucha fútil de un status ELA inexistente provocando por resultado la continuación de una condición política antidemocrática en Puerto Rico; (3) “… Exalta el poder contributivo de Puerto Rico…” sin considerar que Puerto Rico contribuye más de $3 billones anuales al Tesoro federal. Igualmente, defiende la creación de empleos con incentivos sin la acción federal, ignorando que es la que aplica y rige en toda la actividad laboral en Puerto Rico, incluyendo la del salario mínimo federal; y (4) Alega haber conseguido la implementación de la política contributiva 936 en el 1975 y salvarla en 1985. Entiendo y respeto sus buenas gestiones como gobernador para mejorar la economía de la Isla. No obstante, la sección 936 existía desde mucho antes del 1976 como sección 931. La sección 936 solo permitió la repatriación anual de ganancias de las corporaciones que cualificaban para la exención contributiva. En el 1985, a petición del propio Hernández Colón, don Luis Ferré le acompañó a reunirse ante el entonces Secretario del Tesoro de Estados Unidos para que respaldara la permanencia de la sección 936. El suscribiente participó en un grupo asesor de don Luis y se le explicó que el Congreso no aceptaba el costo en billones de dólares que implicaba la sección 936 para el Tesoro federal. Posteriormente fue eliminada.

El ELA es Peor de lo Peor

Como vemos, el exgobernador Hernández Colón no tiene base racional alguna para continuar promoviendo el ELA. Su ideología es diferente a la de don Luis Muñoz Marín, un líder pro americano. Tan es así que en 1978, don Luis le llamó la atención a Hernández Colón por reunirse con Ricardo Alarcón, embajador de Cuba ante la ONU, e igual hubiera hecho con Sila Calderón por invitar al presidente Hugo Chávez a su inauguración como gobernadora.

En conclusión ¿por qué los populares insisten en mantener a los ciudadanos americanos en Puerto Rico sin poder votar en elecciones federales? Están obsesionados con una ideología ELA que no es viable legalmente y que es antidemocrática; o defienden la ciudadanía americana como caballo de Troya en eterna espera de que surja un consenso ideológico que nos lleve a la Independencia. Esta contradicción es la esencia de la ambivalencia prevaleciente en las mentes de los líderes populares. Que le expliquen al Pueblo: ¿Porqué continuar dilatándole a este pueblo el goce de la plenitud de sus derechos como ciudadanos americanos? Que conste, los herederos de Muñoz, no sueltan el ELA inexistente como sí dejó Muñoz la Independencia. Promueven la ciudadanía americana y la participación en la política nacional pero no se toman la iniciativa de promoverla con sus derechos democráticos. Como resultado de esa falta de iniciativa, el Partido Popular ha dejado de existir como uno democrático.

Comentarios a: bufeteigartua@yahoo.com

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Aquí recordando lo que Luis Muñoz Marín decía…

“Soy puertorriqueño. Ciudadano de los Estados Unidos. Inmensamente orgulloso de ambas cosas.”

MUÑOZ MARIN PIDE QUE LA ISLA VOTE POR PRESIDENTE

Propone plan a subcomité del Congreso
WASHINGTON, 6 de abril de 1960. (Especial para El Mundo).

Hablando hoy ante el subcomité de lo judicial de la Cámara, el Gobernador Luis Muñoz Marín propuso que el Congreso dé, a todos los ciudadanos americanos residentes en comunidades americanas fuera de los límites continentales, la oportunidad de votar por el Presidente y Vicepresidente de Estados Unidos.
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O sea que como ALEJANDRO GARCIA PADILLA no quiere que votemos por el Presidente de los E.U. <– va en contra de su Líder Mayor LMM … HAY QUE SANCIONARLO Y SACARLO DE LOS PUESTOS QUE TIENE EN EL PARTIDO??