“Votar ‘SÍ’ no es votar para asegurar nuestra ciudadanía americana y sus beneficios”. Parte 28 de ‘La Nueva Escuelita Estadista’

Nadie tiene duda que el electorado puertorriqueño favorece, por mucho, la opción ESTADIDAD sobre cualquier otra en la segunda parte de la papeleta del plebiscito. Las razones son obvias. Como he detallado en esta serie de ‘La Nueva Escuelita Estadista’, los electores ven claramente que votar por el ELA soberano, es decir, por la república asociada, es lanzarse al vacío en un espacio desconocido sin saber dónde al final vamos a caer, y que la independencia sería imponer la violencia contra nuestras instituciones, bienestar y aspiraciones. Cuando los electores evalúan esas opciones llenas de incertidumbres y problemas con la estadidad y sus ventajas y beneficios, el saldo es definitivamente a favor de esta última.

En suma, para que la ESTADIDAD saque más votos que la INDEPENDENCIA y el ELA SOBERANO en el plebiscito solo hace falta que los encargados de la movilización electoral por la estadidad se aseguren que esta vez, contrario al referéndum de hace unos meses, los estadistas salgan a votar y se les cuenten sus votos. Ya vamos ganando en todas las encuestas públicas y privadas, pero la victoria definitiva solo se concretará con la movilización y los votos. Por este lado, andamos bien.

Pero hay un problema. Todavía ¡la estadidad pudiera ser derrotada por el absurdo! “¿Cómo?”, me dirá. Sí, el absurdo consejo de unos comunicadores que, a coro con comentaristas Populares, han utilizado tácticas de confusión y miedo para mover a un grupo de favorecedores de la Estadidad a votar ‘SÍ’ o dejar en blanco la primera parte de la papeleta (lo que equivale, en efecto, a medio voto por el ‘SÍ’). Es absurdo, por supuesto, que ningún favorecedor de la estadidad les haga caso a los comentaristas o líderes Populares sobre la manera correcta de votar. Inhibirse de votar ‘NO’ como proponen los comunicadores confundidos es igualmente absurdo porque contribuye a derrotar la estadidad en el sentido de que los líderes Populares presentarían una victoria del ‘SÍ’ sobre ESTADIDAD como una repetición de los resultados de los plebiscitos de 1967, 1993 y 1998.

Aunque una victoria del ‘SÍ’, según lo expresado por el Task Force del Presidente en la recomendación #7, no debería ser el fin del proceso de definición de desmontar el ELA que existe, ese resultado dejaría la decisión de nuestro status sujeta a procesos posteriores, ya sea un plebiscito con aval congresional; o, ¡imagínese esto!, una asamblea constitucional de status localmente legislada y dirigida por Agapito o Acevedo Vilá en la que pondríamos en sus manos decidir nuestro bienestar y nuestro destino. ¡Dios nos proteja!

Para evitar eso hay que hacer que los electores estadistas víctimas de los mensajes de confusión comprendan que votar ‘SÍ’ no es votar para asegurar nuestra ciudadanía americana y sus beneficios, como alegan equívocamente los comunicadores confundidos sino, por el contrario, mantenerlos en peligro. Votar ‘SÍ’, además, es favorecer la continuación de esta situación que deja abierta la posibilidad de la independencia y que nos conviertan en una narcorepública (como ya parece estar pasando en Caguas). Es imprescindible que en los pocos días que quedan antes del plebiscito este mensaje llegue a todos los electores, en especial a los estadistas.

Por eso, con esta columna sueno una voz de alarma y un clarín de guerra. Para la victoria del ‘NO’ la claridad del mensaje y la unidad es esencial. Respetuosamente conmino al gobernador Luis Fortuño como líder máximo del PNP y del movimiento estadista a reorientar el resto de la campaña institucional sobre el status a asegurar la victoria del ‘NO’. Con todo mi aprecio invito al exgobernador Pedro Rosselló a salir enérgicamente a apoyar el ‘NO’ en este momento crucial, sumándose a la campaña de su hijo, el doctor Ricardo Rosselló con Boricua, ¡ahora es! y a la institucional del PNP.

Los estadistas queremos ver juntos en la misma tribuna a Fortuño, a Rosselló y a Romero pidiendo el voto por el ‘NO’ y la ESTADIDAD. Queremos oír a diario a Pierluisi, a Rivera Schatz, a Jenniffer y a todos nuestros candidatos a senadores y representantes; a Santini, a Ramón Luis, ‘Mayita’ y todos nuestros candidatos a alcaldes; y, todos los líderes y comunicadores PNP, a TODOS, reclamando el voto por el ‘NO’ para ponerle fin a la colonia y lograr la estadidad. Y, explicándole a todos los estadistas, a todos los PNP y a todos los que atesoran la ciudadanía americana y sus beneficios, que una victoria del ‘SÍ’ sería la victoria de los que hasta ahora nos mantienen separados y, por eso, sería la derrota de la Estadidad.

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