El deceso sociológico de la Pava ocurrió hace años. Todo indica que, si no ocurren variaciones drásticas que reviertan las tendencias electorales, en una semana se consumará un suceso histórico: la muerte política del Partido Popular. Tres razones principales lo explican:
• Es un partido retrogrado. Sin ideales de cambio hacia el progreso. Se opone a todo intento de innovación sociopolítica. Si hubiera existido cuando se inventó el avión, habría tratado de detenerlo. Mientras el Partido Nuevo Progresista (PNP) enfrenta el estancado e ineficaz régimen colonial del Estado Libre Asociado territorial y construye una ilusión de igualdad y avance con la Estadidad; el Partido Popular se aferra a él y su pasado, manteniendo deshonestamente en su agenda la República Asociada (ELA Soberano).
La obsolescencia del Partido de la vetusta Pava lo ha consolidado como una mogolla oportunista que junta, sin vectores éticos, a separatistas antiamericanos (la mayoría del liderato) como Charlie Hernández, Carmen Yulín, Cox Alomar y García Padilla con el pitiyanquismo servil de los Hernández Mayoral.
• Presenta los peores candidatos de su historia. Como consecuencia de su anacronismo no pudo reclutar a un buen aspirante a gobernador (Chicky Star entró tarde a la contienda) para enfrentar a un Fortuño con obra y carisma. Alejandro es una caricatura de la mediocridad. Sin experiencia, capacidad y honestidad intelectual. Y para acompañarlo; gente como Carmen Yulín y Cox Alomar, prepotentes, incapaces de trabajar en equipo, narcisistas… independentistas… de clóset.
El ELA es un rotundo fracaso, 68% de pobreza, 50 anos de atraso, …
• Ha realizado una campaña patética. Con cantinflescas contradicciones entre lo que alega, y la forma en que ha votado Alejandro en el Senado. Exageradamente demagógica. Fortalecieron la ya sólida imagen de Fortuño culpabilizándolo de todo. Solo faltó que le achacaran el ataque terrorista a las Torres Gemelas y el asesinato de Kennedy. Demasiadas falsedades. Todavía Alejandro y sus ‘analistos’ siguen mintiendo y niegan, entre otros logros, que terminó la recesión y que en relación al pasado comparable bajaron los asesinatos, la luz, el desempleo y el déficit estatal; mejoraron la competitividad de Puerto Rico, el crédito gubernamental, las carreteras y el sistema educativo público, y aumentaron los beneficiarios de Mi Salud. No es inteligente dibujar un apocalíptico fin del mundo y presentar como héroe salvador al Chapulín Colorado… y su ‘teleprompter’.
La ciencia y la lógica anuncian que en siete días los puertorriqueños reelegiremos a Luis Fortuño. Además, un acontecimiento revolucionario: en el plebiscito mayoritariamente votaremos ‘NO’ al ELA territorial/colonial y por la igualdad de la Estadidad. A la Pava, no la salva ni el médico chino.
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