NR – Este es el primer escrito razonable de Roberto L. Pratts, el que hasta ahora se había estado presentando como un tirapiedras politiquero. Habra sentido que la mentira de los votos en blanco fue tan grande al presentarla a los que se inventaron la Democracia Constitucional que ahora decidio comenzar a ser responsable y serio? Recuerda que Sila/AAV/PPD/Izquierdozos en 8 años multiplicaron la deuda publica Sin Obras, mas deuda publica PR que en 500 Milenio de $27 a $67 Billones
El agua fiscal nos llegó al cuello. Las décadas de endeudamiento público, la insolvencia del Sistema de Retiro y la falta de liquidez quebrantó la confianza del mercado donde el gobierno de Puerto Rico vende sus bonos. Las casas que acreditan los bonos de Puerto Rico funcionan como las agencias que analizan el crédito de los ciudadanos cuando uno va a tomar un préstamo, comprar un carro o una casa. En el mundo de las finanzas públicas esas agencias se llaman Moody’s y Standard and Poor, entre otras.
Si usted tiene un crédito malo, no le venden el carro. Si el crédito del gobierno es malo, no hay quien compre los bonos del país. Si no se pueden vender los bonos del país en el mercado de capital, no hay dinero para mantener al gobierno de Puerto Rico como lo conocemos. Eso es lo que nos ha pasado; nuestros bonos están un grado por encima de ser declarados bonos chatarras y dejar las cosas como están no resolverá el problema. Ignorar lo que dicen las agencias acreditadoras no es una alternativa plausible.
Ahora que podemos ver el panorama fiscal de la manera más amplia, indudablemente ganar las elecciones fue la parte más fácil para el gobernador electo, Alejandro García Padilla. Lo difícil ya comenzó. Iniciar una gesta de gobierno con una degradación crediticia en las costillas es un asunto serio; la amenaza velada de que otra degradación es inminente y podría ser un golpe como el de Márquez a Pacquiao. De hecho, la degradación que hoy recae sobre el Gobierno de Puerto Rico es una degradación de todos porque estamos en el mismo bote populares, penepés, independentistas y no afiliados. Evitar la caída libre por el barranco fiscal nos toca a todos y son momentos de decisiones difíciles. No son momentos de repartir culpas ni de protestarlo todo. Son momentos de acción y de ajuste de pantalones. Si los ciudadanos hacemos ajustes domésticos cuando la cosa se aprieta, el gobierno es la casa de todos y hay que actuar de igual manera: recortar gastos e incrementar ingresos con mayor actividad económica.
Alternativas de aumentar los años para retirarse a los 65 años en una era en la que la expectativa de vida ha aumentado no es una alternativa irreal, como es el incremento a las aportaciones al Sistema de Retiro. No deben descartarse ligeramente la privatización de un sinnúmero de funciones que hoy realiza el gobierno de forma ineficiente. Las ya conocidas P3 deben incrementarse así como la municipalizaciones de otros servicios, particularmente en el área de infraestructura. Congelación absoluta al crecimiento del gasto público y establecer mediciones estatutarias de reducción medible año a año. La AEE no puede mantenerse como un monopolio energético y la diversificación de las fuentes energéticas debe ser una alta prioridad. Un aumento contributivo no debe ir dirigido a los ciudadanos de la clase trabajadora. Esos son los que hay que fortalecer. Una clase media fuerte ampliaría los cimientos de nuestra economía y propendería a una mejor distribución de las riquezas. Estos problemas no se resolverán solos y mientras más se pospongan las decisiones difíciles que exige la crisis fiscal, peor será para las futuras generaciones de puertorriqueños. Manos y mentes a la obra.
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- Published on Thursday, 20 December 2012 11:21
A juzgar por las expresiones hechas el miércoles por el gobernador electo Alejandro García Padilla, la administración entrante aun no tiene un plan de acciones específicas para enfrentar la situación fiscal que atraviesa el país y que ha generado, entre otras cosas, que la casa acreditadora Moody´s devaluara el crédito de la Isla.
Más allá de asegurar que implementará un plan de reducción del gasto público que incluirá recortes en los salarios de los asesores gubernamentales y en las bonificaciones de los miembros de las juntas de agencias y corporaciones, García Padilla no pudo esbozar un plan de acción, lo que justificó con la poca afluencia de datos que se ha dado en el proceso de transición.
“Parte del problema que ha enfrentado la ingeniero Ingrid Vila como copresidenta del Comité de Transición es que la información no fluye…para establecer las ideas específicas, yo tengo que conocer los datos específicos y el gobierno no los quiere proveer”, señaló el mandatario electo en conferencia de prensa tras anunciar nuevos nombramientos en su gabinete.
A insistencia de los periodistas para que indicara qué acciones piensa poner en marcha para mitigar la acción de Moody´s, el aun senador del Partido Popular Democrático indicó que una vez concluyó el evento electoral en el que salió favorecido, le remitió sendas cartas a la casa acreditadora en las que plasmaba el compromiso del nuevo gobierno de emprender una cruzada de austeridad y en las que pedían una oportunidad para presentar sus propuestas.
“Tan pronto gané las elecciones yo le envié una carta a Moody´s indicándole nuestro compromiso para atender los problemas financieros de Puerto Rico con la austeridad que las circunstancias reclaman del gobierno y con la disposición a hacer crecer nuestra economía como reclaman las circunstancias del presente”, destacó García Padilla.
“Posteriormente a eso le envié otra carta, previo a la degradación, indicándole que conocíamos de las circunstancias, que estábamos trabajando con ellas, que le pedíamos una oportunidad que no fuera irrazonable en tiempo para ellos para presentarle nuestras propuestas”, añadió.
Sin embargo, Moody´s hizo caso omiso de las misivas y anunció la degradación de los bonos impulsados, según el funcionario electo, por los múltiples incumplimientos de la administración saliente.
“Conociendo nosotros lo que ellos le han dicho a ustedes, que el problema era que el actual gobierno les había prometido en más de una ocasión actuar y no avanzaban a actuar, que le quedaron mal al país y a Moody´s, conociendo yo esa realidad, pensando como político me hubiese podido quedar callado, esperar la degradación y echar culpas. Pero decidí tomar el riesgo y decirles: dennos el tiempo que corresponda a partir de enero y nosotros le presentaremos a ustedes nuestras opciones y si no estuvieran ustedes de acuerdo entonces actúen. Aun así, ellos decidieron actuar. Esos son los hechos”, sentenció.
Por último, García Padilla que en un intento de enviar señales positivas fue que decidió anunciar en primer término a los integrantes del gabinete económico, estrategia que tampoco causó efecto. “Llegará el momento donde yo les presentaré a ellos las propuestas que implantaré para atender la crisis financiera y la crisis económica del país”, concluyó.
21 de diciembre de 2012
Degradados tres bancos en la Isla
Moody’s: la economía y las finanzas públicas les afectan
Juan Carlos Batlle, presidente del Banco Gubernamental de Fomento. (Archivo )
Por Joanisabel González /joanisabel.gonzalez@elnuevodia.com
Moody’s Investors Service degradó ayer la fortaleza financiera de Banco Popular, Banco Bilbao Vizcaya Argentaria y Banco Santander señalando como razones la situación económica de la Isla y el pobre estado de las finanzas públicas.
En el caso de Popular, la degradación también aplicó a las acciones preferidas de la matriz bancaria, así como a las preferidas de los fideicomisos Popular Capital I, II, BanPonce y Popular Norteamérica Capital I.
La degradación de los tres bancos concluye el proceso de revisión para degradación que Moody’s comenzó en el mes de abril y se produce una semana después de que la casa acreditadora empujara el crédito del Gobierno central al borde del grado especulativo y concediera ese nivel a siete corporaciones públicas y la Universidad de Puerto Rico.
En una institución bancaria, una degradación implica pagar más por los fondos que necesita, ya sea para sus planes de negocio o fortalecer su base de capital en un ciclo adverso.
“Los prospectos para una recuperación sostenida están restringidos por las pobres finanzas del Gobierno, caracterizadas por un severamente insolvente plan de pensiones y una creciente y pesada deuda”, se agregó.
Por otro lado, Moody’s excluyó parte de la deuda de la Corporación para el Financiamiento Público (PFC) del rango “chatarra” que le asignó hace una semana. Moody’s explicó que, por error administrativo, asignó la clasificación Ba1 a la serie 1998A, cuando lo correcto es Aaa, considerada la mejor calidad. La PFC es una subsidiaria del Banco Gubernamental de Fomento (BGF).
Las degradaciones de Moody’s
“Parte del problema señalado es la incertidumbre sobre cómo se van a atender los problemas que faltan por resolver”
AP / Archivo
El pasado 13 de diciembre, Moody’s Investors Service le redujo la clasificación a un número significativo de bonos emitidos por el Gobierno de Puerto Rico y varias de sus instrumentalidades. El valor total agregado de los bonos afectados por esa decisión asciende a $38 mil millones. Veamos, en específico, las acciones tomadas por Moody’s y las razones para estas.
Por encima de ‘chatarra’
Redujo de Baa1 a Baa3 (este último, el nivel de clasificación más bajo antes de caer en los niveles comúnmente considerados como ‘chatarra’), la clasificación de los Bonos de Obligación General del Gobierno de Puerto Rico, Bonos de Pensiones emitidos por el Sistema de Retiro (‘Pension funding bonds’), ciertos bonos de la Autoridad para el Financiamiento de la Infraestructura, ciertos bonos de la Autoridad del Distrito del Centro de Convenciones, las notas ‘senior’ emitidas por el Banco Gubernamental de Fomento para Puerto Rico, bonos de la Autoridad para el Financiamiento Municipal, ciertos bonos de la Autoridad de Carreteras y Transportación (‘Transportation Revenue Bonds’) y ciertos bonos de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados que están garantizados por el Gobierno de Puerto Rico.
Redujo, de A3 a Baa2 (este último, dos niveles de clasificación por encima de los niveles comúnmente considerados como ‘chatarra’), la clasificación de ciertos bonos emitidos por la Autoridad de Carreteras y Transportación (‘Highway Revenue Bonds’).
Por debajo de ‘chatarra’
Redujo, de Baa2 a Ba1 (este último, el nivel de clasificación más alto dentro de los niveles comúnmente considerados como ‘chatarra’), la clasificación de los bonos de la Corporación para el Financiamiento Público, ciertos bonos de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados y ciertos bonos de la Autoridad de Carreteras y Transportación (‘Subordinate Transportation Revenue Bonds’). Varios días después, añadieron a esta lista los bonos de la Universidad de Puerto Rico.
Además, a todas esas clasificaciones reducidas les asignó una perspectiva negativa. Esto significa que es probable que las clasificaciones vuelvan a bajar en los próximos meses.
Para esas degradaciones, Moody’s ofreció cinco razones principales.
• La economía de Puerto Rico continúa débil. De acuerdo a Moody’s, la recesión que comenzó en el año 2006 todavía no ha terminado. Aunque reconocen que algunos indicadores económicos han comenzado a mejorar, ellos entienden que la economía todavía está demasiado frágil para poder absorber los impactos inherentes a continuar con el control del gasto público y resolver el déficit actuarial de los Sistemas de Retiro de los empleados públicos.
• Los niveles de deuda pública están altos y continúan aumentando. Moody’s sustenta esa conclusión comparando la deuda pública per cápita de Puerto Rico con los estados de Estados Unidos y con varios países independientes.
• Los ingresos del fisco aumentaron debido a un impuesto temporero. Moody’s reconoce que los ingresos del Fondo General del Gobierno de Puerto Rico aumentaron por alrededor de $500 millones en el año fiscal 2012. Esto se debió, principalmente, al impuesto que se le impuso a las empresas de afuera de Puerto Rico. Ese impuesto, sin embargo, es temporero. Por otro lado, en el año fiscal corriente, los ingresos del fisco han mermado, particularmente de fuentes que dependen de la situación de la economía de Puerto Rico.
• El déficit presupuestario no se ha eliminado totalmente. Moody’s confirma el hecho de que el déficit presupuestario del Gobierno de Puerto Rico se ha reducido de $3,100 millones a $1,600 millones. Aun así, entiende que este problema todavía no se ha resuelto de forma definitiva y que se siguen utilizando préstamos para cuadrar el presupuesto de gastos públicos.
• No ha habido progreso en implantar las reformas necesarias para resolver el problema del déficit actuarial de los Sistemas de Retiro de los empleados públicos. Aunque en el año 2011 se implantaron unas medidas que contribuyeron a reducir ese déficit actuarial, Moody’s entiende que las mismas fueron muy modestas y no hay certeza de cuándo se van a implantar el resto de las medidas necesarias para atender este problema adecuadamente.
Como se puede apreciar, Moody’s considera que la saliente administración tuvo logros importantes lidiando con la crisis fiscal del Gobierno de Puerto Rico, pero estos no fueron suficientes. Al presente, parte del problema que ha señalado Moody’s es la incertidumbre sobre cómo se van a atender los problemas que faltan por resolver. Esa parte le toca ahora a la administración entrante. Para eso, la administración de Alejandro García Padilla no puede esperar a tomar posesión para desarrollar las estrategias dirigidas a resolver los problemas restantes, sino que deben tenerlas listas ya.
Moody’s llevó a cabo esas degradaciones ‘motu proprio’, sin haber ninguna nueva emisión de bonos que se estuviera trabajando en estos momentos. Independientemente de eso, los problemas señalados por esa importante casa acreditadora son reales y se tienen que resolver de forma prioritaria.
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