Los abonados de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) tendrían que esperar a fin de mes para conocer si los problemas generatrices –que causaron suspensiones en el servicio– pudieran traducirse en otra alza en el costo de la electricidad.

Una combinación de averías, mantenimiento preventivo programado y obras de construcción en las termoeléctricas y las cogeneratrices privadas llevaron a la AEE a generar electricidad con sus unidades más pequeñas e ineficientes. Algunas de estas unidades queman diesel o destilado #2, un combustible más caro que el búnker C. Este combustible es más caro y su costo se les pasa a los clientes. Si lo anterior ocurre se sumaría a los cerca de $15 que se espera que incremente la factura durante los próximos tres meses, producto de un ajuste que la AEE dejó de cobrar antes de las pasadas elecciones.

Anteayer, en su peor momento desde el domingo, la AEE operó con un déficit aproximado de 2,204 megavatios, indicó Juan Rosario, representante del interés público en la Junta de Gobierno de la corporación pública.

Específicamente, informó Rosario, estuvieron fuera de servicio las unidades 5 y 6 de Costa Sur en Guayanilla (820 megavatios); la unidad 2 de Aguirre, en Salinas (450 megavatios); la unidad 4 de Palo Seco en Toa Baja (200 megavatios); una de las dos unidades de la cogeneratriz AES en Salinas (227 megavatios); y la cogeneratriz EcoEléctrica en Peñuelas (507 megavatios).

“El resultado de todo esto es que el sistema corrió casi sin reserva; corrió en el filo de la navaja. Si demasiados changos se posaban en una línea eléctrica primaria, perdíamos el sistema. Todo esto es producto de un montón de años recortando en mantenimiento preventivo”, denunció Rosario. “Correr el sistema eléctrico con las unidades más costosas implica que la AEE les va a pasar esa cuenta a sus clientes”, agregó.

Con él coincidió el presidente de la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (Utier), Ángel Figueroa Jaramillo, quien explicó que la AEE recobrará su inversión de generar electricidad más cara a través de la fórmula de ajuste por combustible.

Ante esta situación, Figueroa Jaramillo puso en duda que la reserva energética de la AEE esté en sus niveles óptimos. La reserva energética es la capacidad –en megavatios– que tiene la AEE para responder en caso de que se interrumpa el servicio eléctrico, por ejemplo, si ocurren averías o aumenta demasiado la demanda. Por lo regular, la reserva energética es igual o mayor que la capacidad de la termoeléctrica más productiva.

“Hay que esperar”

Aunque no hay duda de que la AEE recobra todo lo que invierte y/o pierde, el director ejecutivo de la corporación pública, Juan F. Alicea, sostuvo que “hay que esperar” a finales de mes para saber a ciencia cierta si habrá otro aumento tarifario.

Todo dependerá –según dijo– del tiempo que demoren los trabajos de mantenimiento preventivo y la reparación de las averías.

Esa también fue la advertencia del ingeniero electricista Agustín Irizarry, quien, al igual que Rosario, representa a los consumidores en la Junta de Gobierno de la AEE.

“Veremos el efecto en la factura dependiendo de cuánto tiempo estén operando las plantas caras”, dijo Irizarry, quien explicó que la AEE cuenta con 22 “unidades de combustión de destilado” –como se les conoce a estas plantas– alrededor de la Isla. Esas 22 unidades, que en su mayoría datan de los años 70, suman alrededor de 450 megavatios.

Alicea, entretanto, se expresó sorprendido ante el revuelo causado por esta situación, ya que –a su juicio– todo es parte de la rutina. “Me sorprende la relevancia que ha tomado todo esto. Es operación rutinaria en un sistema tan complejo como este, donde hay averías y fallas operacionales que se atienden. Ahora mismo no hay ningún cliente sin luz por falta de generación”, declaró, horas antes de que anoche mismo se informara de una avería en la línea 6500 que sirve a la subestación de Orocovis, quedando a oscuras sectores de esta población y de otros pueblos de la región.

“El sistema eléctrico está estable”, agregó. “Lo único es que estamos operando con unidades más pequeñas y el costo es más alto”.

Sobre si va a subir la factura o no, expresó: “No puedo decir ni una cosa ni la otra. Si no hay fallas como estas, no debe haber ningún impacto, pero es muy prematuro. No puedo decir que sí, pero tampoco que no”, añadió.

Normalidad poco a poco

Según dijo Alicea, la unidad 2 de Aguirre entraría anoche en servicio tras verse afectada el domingo pasado por la explosión de un transformador, mientras que la unidad averiada en AES debe entrar hoy, jueves.

Asimismo, la unidad 5 de Costa Sur entrará al sistema este fin de semana, una vez se le repare una “falla asociada a seguridad”. La unidad 6 de Costa Sur entrará en marzo, luego que se completen los trabajos para que pueda operar al 100% con gas natural. Los trabajos de mantenimiento preventivo en EcoEléctrica deben concluir la próxima semana, previó.

Ayer, más temprano, Alicea indicó a este medio que la generación eléctrica en estos días era “uno o dos centavos más costosa” de lo que cuesta el kilovatio-hora en circunstancias normales. Dijo que, de concretarse un alza, se reflejaría en la factura de abril.