PONCE – Frustración, incomodidad de tener que dar un paso para el que no estaban preparados, malestar, dolor.

Esos son algunos de los sentimientos que en estos momentos aturden a un grupo de oficiales del orden público que realizan los trámites para retirarse de la Policía antes de que entren en vigor las enmiendas al Sistema de Retiro y con ello pierdan un porcentaje de la que sería su pensión como jubilados.

“Me voy con dolor en mi alma. A mí me gusta ser policía”, expresó el sargento José Marín Martínez, quien lleva 27 años en la Uniformada. “No planificaba irme, pero si me quedo pierdo”, dijo el hombre de 51 años de edad.

El malestar por las enmiendas al Sistema de Retiro es una de las razones a las que los policías atribuyen el alto ausentismo por enfermedad de los pasados días y la llamada manifestación de brazos caídos. Al menos desde el viernes, cerca de 2,000 agentes se han ausentado diariamente a sus funciones.

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Ayer, el superintendente Héctor Pesquera les pidió, en un tono conciliador, que regresen a sus puestos. Sin embargo, el gobernador Alejandro García Padilla y el presidente del Senado, Eduardo Bhatia, insistieron en su advertencia de que los agentes que se ausentaron serán investigados.

“Lo que no podemos seguir haciendo es tolerando que haya unos que simplemente se sienten que pueden hacer lo que les da la gana, que pueden decidir cuándo ellos van y cuando no van (al trabajo)… yo quiero saber dónde está el liderato de la Policía y qué consecuencias va a haber sobre las personas que faltan a su trabajo”, subrayó Bhatia.

Marín Martínez justificó la molestia de sus compañeros policías y su actitud de ausentarse. Dijo que son muchos los que –como él– tenían planes de esperar a cumplir 55 años de edad y 30 de servicio para que al retirarse su pensión fuera un 75% del salario actual.

Sin embargo, con las enmiendas a la Ley de Retiro, en su caso, si se retira cuando cumpla 55 años la pensión sería aproximadamente un 40% del salario actual. Pero si se retira antes de julio próximo, acogido a la Ley 70, la pensión le representa un 50% de su sueldo actual.

“Para no perderlo todo, me voy ahora con 10% más que cuando cumpla los 55 años aunque esto me afecte económicamente”, destacó.

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Marín Martínez se propone buscar un empleo que le compense los $1,000 mensuales que dejará de recibir al jubilarse.

Otro que también se jubila molesto con las enmiendas al Sistema de Retiro es el agente Julio Quiroz, del Cuerpo de Investigaciones Criminales en Ponce. “Pensaba quedarme un poquito más, pero con eso del retiro no se puede”, dijo.

Explicó que puede servir a la agencia varios años más, pero la dejará antes de lo planificado debido a la pérdida de dinero que le representaría atrasar su jubilación. “Ahora mismo yo me puedo retirar con alrededor de un 75% de mi sueldo y, si me quedo, a partir de julio lo que voy a recibir en un 48%”, precisó el agente de 55 años de edad y 30 de servicio.

“Entiendo que no hicieron un verdadero análisis de cómo esas enmiendas afectan a los empleados del Gobierno… esto ha creado un gran caos en la Policía”, aseguró.

Mientras, el agente Arnaldo Cortés Pérez explicó que lleva 30 años en la Policía, pero un año lo cumplió en servicio militar por lo que esperaba jubilarse cuando cumpliera los 55 años. “Al cambiar no lo puedo hacer. Tengo que irme ahora sin la edad, sin los años, porque pierdo beneficios. Ahora me puedo ir con una pensión de un 50% (del salario actual). Después me tengo que ir con un 43%”, destacó.

¿Qué va a hacer cuando se jubile?

“Soy militar, pero también soy mecánico y sé hacer otras cosas”, dijo Cortés Pérez, de 53 años de edad, 29 de los cuales los trabajó en la División Drogas en Ponce. “Lamentablemente, tenemos que irnos”, comentó.