“La sonrisa media ‘pasmá’ del Gobernador me lo decía todo: a él mismo le costaba creer lo que decía”

Comienzo indicando que cada gobernador, sea popular o penepé, desea y busca lo mejor para Puerto Rico. Ninguno desea pasar a la historia como el peor gobernante. Gobernar no es fácil y una vez pasadas las elecciones, la prioridad cambia: sobrevivir lo mejor que pueda.

Por esa razón, sabiendo que lo que dicen no es correcto, tienen la esperanza de que alguien se trague el cuento de lo que expresan en mensajes ‘cool’ para las gradas. En esta ocasión me refiero al mensaje del gobernador Alejandro García Padilla, pero no me limito a él. Igual fue Luis Fortuño, Aníbal Acevedo Vilá, Sila Calderón y siga para atrás.

El pasado año, entrevistaba al exdirector de campaña del Partido Popular Democrático, Irving Faccio, y al del Partido Nuevo Progresista, Ángel Cintrón. Este último hablaba que el desempleo había bajado, el costo de la electricidad había disminuido, que estaban abriendo nuevas empresas, que la criminalidad bajaba y que habían salvado el Sistema de Retiro. Cintrón hacía sus expresiones en el cuarto año de administración de Fortuño. En el caso de García Padilla, dice casi exactamente lo mismo, lo único que sus ‘logros’ los consiguió en seis meses.

Luego de la dudosa exposición de Cintrón, Faccio bajó con su ‘derechazo’ y noqueó a Cintrón. Preguntó: “¿usted paga más luz hoy o menos?”, “¿se siente más seguro hoy?”, “¿usted entiende que hay más empleo en Puerto Rico o no?”. Como dicen: “le mató el pollo en la mano”.

¿Qué dijo el gobernador García Padilla? “El desempleo ha bajado casi 2%”; “El crimen comienza a bajar”; “Hay nuevos hoteles en construcción, más cruceros y líneas aéreas”; “Descartamos medidas como un aumento de 300% en peajes”; “El aumento del precio del agua… Identificamos mecanismos para reducir su impacto”; “Notarás una reducción de 17% del precio de la luz”; “No hay un solo impuesto que vaya contra la clase media trabajadora o contra la clase pobre puertorriqueña”; entre otras cosas. Tomó prestadas las preguntas de Faccio: ¿usted paga más luz hoy o menos?, ¿se siente más seguro hoy con todos los asesinatos que tenemos?, ¿hay más empleo en Puerto Rico?

En el caso de desempleo no ha habido empleos nuevos. Lo que hay son compromisos de empresas para emplear y ya indicaron que con los nuevos impuestos, tendrán que despedir. Sobre la construcción de hoteles y llegadas de líneas aéreas, comenzaron el cuatrienio pasado. Sobre los peajes, descartaron aumentos de 300%, pero buscan aumentar plazas de peaje. ¿Que en el aumento de agua lograron ‘bajar su impacto’? Este es el viejo truco de tener que aumentar $100, y dicen $500 para luego bajar a $100 y decir que hubo reducción. Con lo de la luz, en mi caso, bajó la factura porque bajé el consumo.

Las malas noticias: “eso es por culpa de la pasada Administración”. Las ‘buenas noticias’: “es por nuestro trabajo”. ¡Así cualquiera gobierna!

Finalmente, el mismo día que el País estaba agobiado con el aumento en la gasolina, de la propia boca del Gobernador salió la siguiente expresión: “no hay un solo impuesto que vaya contra la clase media trabajadora o contra la clase pobre puertorriqueña”. ¿Y ese aumento en la gasolina contra quién es? ¿Quién lo va a pagar?

La sonrisa media ‘pasmá’ del Gobernador durante el mensaje me lo decía todo: a él mismo le costaba creer lo que decía. No obstante, tuvo sus cinco minutos del ‘break de la esperanza’ del desaparecido programa ‘Dame un Break’. Lo que viene no es fácil. Prepárese