Fortuño no pasa juicio sobre AGP

Exgobernador aborda el tema de la Ley 7, su futuro político, el estatus, la energía verde y la criminalidad durante entrevista transmitida por Univisión

El exgobernador de Puerto Rico, Luis Fortuño, reconoció que los despidos en el Gobierno le costaron la reelección a un segundo término y que no volvería a aspirar, al tiempo que evitó pasar juicio sobre las ejecutorias de su sucesor al mando del País, Alejandro García Padilla.

“Hubiese preferido que no se despidiera a nadie pero nos encontrábamos en una situación que nadie sabía lo mal que estaba. Estaba tan quebrado Puerto Rico que yo no tenía dinero para pagar la primera nómina. Tuve que ir a Nueva York, reunirme con las casa acreditadoras y tomar prestado para poder pagar la nómina”, afirmó sobre la decisión de despedir lo que calculó como 12,500 empleados públicos bajo la Ley 7 de estabilización fiscal.

En una entrevista con el periodista Jorge Ramos, el exmandatario reiteró que no está arrepentido de la decisión. “No me puedo arrepentir de haber hecho lo correcto como administrador, como político fue terrible”, admitió.

Sin embargo, aseguró que sus días como gobernador no volverán a repetirse, pues no tiene la intención de aspirar en el futuro.

“Soy joven pero puedo hacer muchas otras cosas. Acá tengo un compromiso con la reforma migratoria”, mencionó al afirmar que hay que dar paso a “sangre nueva”.

Sobre García Padilla, se limitó a comentar que tiene sus opiniones, pero “he sido muy respetuoso…en no ocupar su espacio”.

Al ser abordado sobre el asunto del estatus, el republicano puntualizó que “quiero
todos los derechos y responsabilidades de ciudadnos americanos hipamos y puertorriqueño”. Defendió los resultados del pasado plebiscito e indicó que el proyecto del comisionado residente Pedro Pierluisi es el que más coaspiciadores tiene en la legislatura federal. Este proyecto daría paso a un referéndum sí o no sobre los resultados del 6 de noviembre, donde prevaleció la estadidad.

De otra parte, Fortuño indicó que las alianzas con el gobierno federal, así como el apoyo de Janet Napolitano y Rosa Emilia Rodríguez fueron vitales para disminuir la criminalidad relacionada con el trasiego de drogas desde el 2012.

También explicó la importancia de que Puerto Rico se mueve hacia la energía verde y a menor dependencia del petróleo. Defendió el gasoducto, que según dijo “afectaría mucho menos que oleoductos y plantas de petróleos”.