El gobierno de Puerto Rico estableció por primera vez unas metas específicas para disminuir la cantidad de accidentes fatales y graves en las carreteras del País, lo que le ganó que el Federal Highway Administration le asignara este miércoles $32 millones para el arreglo de carreteras.

La información se dio a conocer durante la presentación del primer Plan Estratégico de Seguridad Vial de Puerto Rico, realizada en el teatro del Colegio de Ingenieros y Agrimensores de Puerto Rico, en Hato Rey. La misma estuvo a cargo del secretario del Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), Miguel Torres.

Según planteó, la meta del plan es reducir los accidentes en las carreteras en los próximos cinco años, mejorar la respuesta de Emergencias Médicas para evitar muertes, promover mayor educación al pueblo y mejorar ciertos aspectos de seguridad en las vías del País, como por ejemplo la rotulación.

“En cinco años queremos lograr lo que no hemos hecho en 30 años de reducir a 300 las muertes en las carreteras”, sentenció el funcionario durante la presentación.

El plan presentado no incluye medidas claras de lo que se hará para reducir las fatalidades y mejorar la seguridad en las carreteras. Habla de aspectos genéricos como “desarrollar”, “mejorar”, “reducir” o “promover”, pero no detalla los pasos en concreto que se darán para lograr la métrica esperada en cada uno de los renglones.

Estos son tener una base de datos de tránsito actualizada, reducir el tiempo de la respuesta de Emergencias Médicas, promover el uso del cinturón o asiento protector para proteger a los ocupantes, evitar fatalidades de conductores ebrios, lidiar con los conductores agresivos, evitar la mortandad entre jóvenes conductores por el uso de alcohol, medidas para proteger a los ciclistas y peatones en las carreteras, evitar que los conductores se salgan de los carriles disponibles al tránsito, así como mejorar la seguridad en intersecciones peligrosas.

Tras insistírsele en detalles, el subsecretario de Salud, Gredubel Durán, mencionó que la meta para mejorar el tiempo de respuesta es de solo un minuto.

“Actualmente, está en 12 minutos el promedio y el plan estratégico establece que se reducirá a 11 minutos”, sostuvo.

¿Un minuto es suficiente?, se le cuestionó.

“Un minuto para salvar vidas sí hace la diferencia”, respondió.

Durán dijo que reubicarán oficinas de Emergencias Médicas para lograr que entre una y otra haya una distancia de 20 minutos. Además, mejorarán la educación de los paramédicos y el equipo para lograr cumplir con la meta impuesta.

La Autoridad de Carreteras, entretanto, estará a cargo de mejorar las condiciones de las carreteras para evitar accidentes. Su director, Javier Ramos, comentó que enfocarán los recursos disponibles, que en esencia son los $32 millones otorgados por el Federal Highway Administration, para promover la rotulación y equipo para proteger de impactos en la avenida Román Baldorioty de Castro, la carretera PR-2 en el área de la Cuesta de Guajataca, así como en las plazas de Peaje de toda la Isla. También construirán una rotonda en la PR-1, en Cayey.

Ramos dijo a este diario que espera que para diciembre se hayan subastado todas estas obras.

“Tenemos que hacer más con los recursos que tengamos para hacer viable la reducción de las fatalidades en las carreteras”, afirmó, por su parte, el secretario del DTOP.

Otros aspectos que Torres también reconoció que tienen que lidiar es con la pobre iluminación, causada por el robo de cablería de cobre, y el monitoreo de las intersecciones.

Por otro lado, el secretario mencionó que muchas de las medidas para reducir los accidentes están en manos de la Legislatura. Entre estas, mencionó la disminución de .08% a .05% en la cantidad de alcohol permitido para conducir.

Asimismo, comentó que “es altamente probable que nos movamos a políticas públicas donde, si un joven menor de 21 años tiene un incidente mientras guía borracho o mientras textea, tenga alguna limitación o suspensión temporera de su licencia, siempre y cuando no tengan fatalidades”.

Por otro lado, la Comisión de Seguridad en el Tránsito, mediante educación y asignaciones de fondos a entidades, así como la Policía de Puerto Rico, en las medidas preventivas, juegan también un rol importante en este plan, según comentó Torres.