El 53% de la población en Puerto Rico entiende que tiene la habilidad y el conocimiento necesario para emprender, pero sólo el 28.3% considera que existen buenas oportunidades para hacerlo. Esta proporción es reducida, en América Latina y el Caribe y en América del Norte más de la mitad de la población indica que hay buenas oportunidades para emprender. Sin embargo, el 13.1% de los encuestados en Puerto Rico expresó que tiene intención de emprender en los próximos tres años.

La carga de los impuestos, la reglamentación, la educación para el emprendimiento en la escuela y la disponibilidad de financiamiento son los factores que má preocupan a los emprendedores.

El perfil de las empresas en Puerto Rico es el de entidades con escaso uso de nuevas tecnologías, con una expectativa modesta de creación de
empleos y con cierto acceso a los mercados de exportación.

Los datos son parte del Global Entrepreneurship Monitor (GEM), el estudio más importante a nivel mundial sobre actividad emprendedora. Es la primera vez que se realiza el estudio de forma completa para Puerto Rico. El informe se presenta una gran cantidad de datos que permiten analizar la actividad emprendedora de Puerto Rico en el 2013 y hacer comparaciones con otras regiones geográficas.

Emprender sólo es considerado como una buena selección de carrera profesional por el 17.9% de los encuestados, el porcentaje más bajo de todos los países
participantes en GEM 2013. No obstante, el 50.1% opina que el empresario exitoso goza de prestigio en la sociedad puertorriqueña.

GEM presta particular atención a la actividad emprendedora temprana, que incluye tanto a emprendedores nacientes (aquellos que han realizado alguna gestión para crear una empresa o que tienen una empresa nueva que todavía no paga salarios) como a emprendedores nuevos, definidos como los que tienen empresas con menos de tres años y medio de vida. El 6.6% de la población encuestada en Puerto Rico cualifican como emprendedores nacientes, y el 1.8% tienen una actividad emprendedora nueva. En conjunto, componen una tasa de actividad emprendedora temprana (TEA, por sus siglas en inglés) del 8.3%.

Esta tasa es relativamente baja en el contexto internacional, y sitúa a Puerto Rico en la posición número 15 de los 16 países americanos que participan en GEM 2013. Según el estudio, “lo más preocupante es que la relación entre la proporción de población con actividad emprendedora naciente y la actividad emprendedora nueva es muy dispar, mucho más que en otros países, lo que significa que el número de empresas que se consolidan a partir de los emprendimientos nacientes es muy reducido”.

El 42.9% de los encuestados con actividades emprendedoras tempranas dicen haber iniciado esta actividad para aprovechar una buena oportunidad que
identificaron. El 21.5% la comenzaron por necesidad. Las actividades emprendedoras tempranas son más frecuentes entre los hombres (11%) que entre las
mujeres (6%). Por otro lado, los emprendedores en Puerto Rico se concentran en los grupos de edad por debajo de 45 años, siendo el grupo de 35 a 44 años el que más proporción de emprendedores tiene (12.3%).

Por su parte, la actividad emprendedora consolidada, que se refiere a las iniciativas empresariales que llevan más de tres años y medio, es también reducida en Puerto Rico. El 2.0% de los encuestados indicaron ser dueños de una empresa con al menos esa trayectoria de tiempo, frente al 7.7% en América Latina y el Caribe y el 8.0% en América del Norte. Además, el 1.8% de los encuestados en Puerto Rico indicaron que habían cerrado su empresa en los doce meses previos a la encuesta, en la mayoría de los casos por razones personales o porque el negocio no era rentable.

Como tema especial GEM incluyó en la encuesta preguntas sobre la actividad emprendedora y el bienestar, en términos de la satisfacción
de la población con su vida y empleo. Y aquí sí, Puerto Rico ofreció las respuestas más altas entre todos los países participantes. En una escala de 1 a 5, siendo 5 el máximo, la población encuestada en Puerto Rico puntuó en promedio 4.21 su contestación a la pregunta “Estoy satisfecho con mi vida”. Tanto en Puerto Rico como a nivel internacional los dueños de negocios consolidados dicen estar más satisfechos con su vida que los que tienen actividades emprendedoras tempranas, y sobre todo que la población empleada en general.