Metropistas ya anunció a la ACT su intención de aumentar la tarifa en algunas plazas de la PR-22 y la PR-5
El costo de algunas plazas de peajes que administra Metropistas subirá a partir de enero del próximo año reveló ayer el director de la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT), Javier Ramos Hernández.
“Ellos aumentaron los peajes de la PR-22 y la PR-5 en enero de 2014 y sí tienen interés de aumentarlos nuevamente el 1 de enero de 2015, según nos notificaron. Ellos tienen que informarnos que están invocando los incisos del contrato (de concesión), que tienen que ver con aumentos de tarifas para que puedan entrar en vigor en enero próximo. Esos aumentos están establecidos en el contrato”, dijo el funcionario.
La cuantía del aumento es calculada por Metropistas y aún no ha sido notificada, agregó Ramos Hernández.
La gerente de relaciones públicas y comunicaciones para Metropistas, Muriel Lázaro, no brindó esa información.
“Eso no está determinado. Es algo que está ahí, (pero) tenemos que reunirnos con ellos (Carreteras)”, dijo en reiteradas ocasiones y sin dar más detalles ante las preguntas de este diario.
La carta que envió Metropistas a la ACT y que fue provista a El Nuevo Día por esa corporación confirma que se disponen a poner en vigor un aumento a tono con lo que establece el contrato firmado bajo la administración de Luis Fortuño.
Ese contrato estipuló que en los primeros dos años no podían haber alzas en las tarifas. Pero posteriormente pueden haber aumentos anuales rigiéndose por la tasa establecida del índice de precios del consumidor de Estados Unidos más 1.5%.
Metropistas pagó en ese entonces $1,136 millones por la transacción que tiene una vigencia de 40 años.
“Por la presente le notificamos de un cambio en el cobro de peaje”, indica la carta de dos páginas dirigida a Ramos Hernández el 29 de septiembre y firmada por el director general de Metropistas, Gonzalo Alcalde.
Además, la misiva establece que el alza ya es una decisión tomada y para ello la empresa está notificando a la ACT con 90 días de antelación como establece el contrato entre Metropistas y el gobierno de Puerto Rico.
Se asoman más. Este aumento en los peajes de la PR-22 y la PR-5 sería el segundo desde que en septiembre de 2011 Metropistas asumió su administración mediante una alianza público privada.
En enero del 2014 entró en vigor el primer aumento, que fue de entre 10 a 40 centavos en las tarifas de los peajes de la PR-22 y la PR-5 dependiendo de la cantidad de ejes del auto.
La PR-22 tiene siete plazas de peaje, mientras que la PR-5 sólo tiene una.
Este segundo aumento toma mayor relevancia en la medida que el gobierno no descarta otras alianzas público privadas o privatizaciones para el país aunque no se han precisado, confirmó Ramos Hernández.
“Son alternativas que se evalúan y se tienen sobre la mesa, pero no hay nada concreto todavía”, agregó el funcionario.
La economista Martha Quiñones aseguró que el nuevo incremento en en los peajes afectará directamente a la clase trabajadora.
“Lógicamente, para la clase trabajadora es un costo adicional en su proceso de ir a trabajar y recordando que los que trabajan en el área metropolitana son gente que diariamente viaja a Bayamón, San Juan o Guaynabo para trabajar. No son de ahí. Por lo tanto, les añade costos adicionales en el proceso de ir a trabajar”, sostuvo.
“Y a la mayoría de los trabajadores no les pagan millaje”, agregó.
Recordó que el alza se une al golpe al bolsillo que será el impuesto al petróleo y sus derivados, que es discutido por la Legislatura del país.
Ese arbitrio supone un aumento de 15 centavos a lo que ya se paga en la actualidad por el galón de gasolina.
El también economista Elías Gutiérrez dijo que le corresponde a cada usuario de los peajes hacer el análisis para determinar si puede o no absorber el incremento.
Dentro de ese análisis, Quiñones no descartó que haya trabajadores que consideren dejar el país ante el alto costo de vida.
“El que está por contrato, que sabe que ese empleo tiene que terminar o el que no tiene un empleo fijo, debe determinar si es rentable o no asumir ese costo (del alza). La gente va a determinar si se queda aquí o se va”, destacó.
Por qué algunas plazas. Ramos Hernández explicó que el aumento en el costo de peaje no aplicará a todas las plazas de la PR-22 y de la PR-5 porque en algunos de estos el alza que hubo en enero del 2014 fue mayor al índice de precios del consumidor de Estados Unidos más 1.5%.
“Ellos cuando computaron hicieron un redondeo. (Eso quiere decir) que puede que en algunos peajes no aumenten el 1 de enero”, afirmó.
Gutiérrez dijo que Metropistas optó por usar el índice de precios del consumidor de Estados Unidos porque “cuando eso se negoció, el índice de precios Puerto Rico estaba tan desacreditado que hubo que recurrir a uno con credibilidad”.
Precisó que el índice de Puerto Rico confrontaba problemas metodológicos, cambios de año y de base que no hacían la medición de forma satisfactoria.
“Si usaran ahora el de Puerto Rico, sería favorable para el acuerdo (con Metropistas). El de Puerto Rico estaría creciendo menos que el que están usando de Estados Unidos”, dijo.
El secretario de la Gobernación, Víctor Suárez, reconoció que le corresponde a Metropistas hacer el cómputo para fijar el alza. Pero la ACT debe evaluar que el cálculo sea el correcto.
“Ya la ACT le requirió las proyecciones para cada una de las plazas de peajes. Le corresponde evaluar y tener conocimiento de cuáles pueden tener revisión y cuáles se mantendrán igual. Saber si se han cumplido todos los términos, de acuerdo al índice de precios del consumidor”, precisó Suárez.
Investigarán el cálculo. El presidente de la Comisión Conjunta para las Alianzas Público Privadas, Jesús Santa, adelantó que igual que lo hizo el año pasado, investigará si el cálculo de Metropistas, que dio paso al alza en tarifas, es correcto.
“Ellos no se equivocaron en el cálculo (del aumento puesto e vigor en enero del 2014). Lo que yo critico es el contrato. El contrato tal y como se hizo beneficia grandemente a Metropistas en los aumentos establecidos y en el de los próximos años. No proveyó ningún mecanismo para que el consumidor se defienda”, sentenció el legislador.
“Yo lo encuentro muy oneroso para el pueblo de Puerto Rico”, añadió.
El contrato con Metropistas no ofrece mecanismo de impugnación. Solo el 50% de lo recaudado en el carril dinámico de Arecibo a Buchanan es para la ACT y el resto del dinero recaudado es para Metropistas.
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