Agustín Santiago / EL VOCERO

Por:  Enrique Kike Cruz

Un exconocido, mentiroso de por sí, decía “miénteme, pero no me engañes”.

Hoy se supone que las mentiras y los engaños terminen en la Autoridad de Energía Eléctrica. Hoy también se supone que el director ejecutivo de la AEE renuncie ante una junta que ha sido cómplice y partícipe de todas las mentiras que le han dicho al pueblo.

No podemos tapar el cielo con la mano. La AEE, al igual que todas las instrumentalidades privadas y no privadas del gobierno, está completamente politizada. Hay quienes con el “ay bendito” del lamento borincano, nos achacan el demonizar a la AEE. Sin embargo, es la propia AEE la que se ha demonizado con mentiras, engaños y falsas promesas.

Juan Alicea, la junta y algunos gerenciales, han sido bien proactivos en destruir a la AEE. La razón principal de sus acciones ha sido la política. Muchas de sus decisiones han sido políticas; han sido grandes ingenieros, pero del desastre que hoy vivimos.

Pero eso termina, o se supone que termine hoy. El decir, escudados de “una fuente”, que se van porque “no estamos de acuerdo” con el plan de transformación Lisa Donahue, es otra mentira antes de salir por la puerta.

La verdad es que le han mentido a Donahue. La verdad es que Donahue sabe y tiene la prueba de que le han mentido. Que de frente le dicen que sí, o que no, o que no existe, luego ella por otro lado los descubre. En fin, la contrataron, se echaron que ellos eran los contratistas y ahora nueve meses más tarde, quieren mentir de nuevo diciendo que no están de acuerdo. Después que preñaron la novia salen corriendo cuando nació el bebé. Qué bárbaros…

La razón principal de la salida de todos es simple y sencillamente la PENSIÓN. No los culpo, pues ellos y otros que se han jubilado, lo han hecho porque quieren cobrar sus días por enfermedad, vacaciones acumuladas (nadie falta ni se enferma), y sobre todo, proteger la pensión y beneficios que se han ganado luego de más de 30 años en la AEE u otras dependencias.

Todos los que se han ido, saben que vienen cambios, cambios duros, pero necesarios. Cambios en donde el pueblo no va a seguir asumiendo lo que ya no puede pagar. Como me dijo el exgobernador Rafael Hernández Colon, “la AEE dejó de servirle al pueblo y se convirtió en un monstruo que solo se sirve a sí mismo”. Rafael, luego de su retiro, se dio cuenta del abuso de la fórmula de ajuste por combustible, de los convenios colectivos y de la INEPTITUD gerencial que hoy se reconoce con su salida.

Hoy comienza el principio de una transformación que será dura, dolorosa y que esperemos deje atrás todo lo malo que la política ha injertado en la AEE.

Juan Alicea tiene un expediente político muy activo en esa agencia, en adición a haber estado en la toma de decisiones muy malas para Puerto Rico. Por ejemplo, eliminó la planta desalinizadora de Palo Seco; dijo que iba a cobrar la luz en los residenciales; paralizó los proyectos de energía renovable y, por último, dijo que cumpliríamos con los MATS a tiempo. Puedo seguir, pero la lista es larga y lamentable.

Hay que ver si la junta lo premia con una pensión mejor a la que tenía, pues eso acordaron al traerlo del retiro. Pero esa misma junta también ha hecho cambios a pensiones que han establecido precedentes en esa área.

Y hablando de la junta, el representante del PPD, Luis Santini Gautier, sabe de electricidad lo que yo sé de hacer un flan. El partido lo tiene en todas las áreas que son interesantes, pues también está en la junta asesora de la presidenta de la Comisión Estatal de Elecciones en calidad de asesor para el escrutinio electrónico. Y de nuevo, sabe de escrutinio electrónico tanto o más de lo que yo sé de hacer flanes.

Pero así es el conocimiento de los miembros que el PPD pone en las juntas. Da pena, mucha pena ver a un monopolio que ha servido a un grupito exclusivo hacerse de millones y explotar a una Isla que cuenta con muy pocos recursos.
Yo espero que estos cambios, al igual que los que faltan por venir (como lo será la destitución de la junta) envíen un mensaje claro al pueblo y a sus acreedores de que esto es en serio. De que los cambios vienen a la AEE y de que mañana será mejor que hoy.