El pasado 13 de octubre del 2015 en www.doctorshoper.com acudimos a cubrir la vista pública que estaba llevando a cabo la Comisión de Agricultura que preside el Senador Ramón Ruiz Nieves relacionada con la Resolución del
Senado 1228, cuyo propósito es realizar una investigación sobre la implantación y desarrollo de la siembra de caña en Puerto Rico.
En dicha vista depusieron Hacienda, Agricultura, Fomento Industrial, Banco de Desarrollo Económico de Puerto Rico y el Ingeniero Químico/Mecánico, Olmar López.
En síntesis las ponencias de Agricultura y Fomento Industrial se concentraron en lo obvio, de que el proyecto de la caña estaba encaminado correctamente y que para el 2017 estaría funcionando a su máxima capacidad. Que la inversión inicial de $9 millones provenientes de Rones de Puerto Rico ha sido fructífera. Algo a nuestro entender muy lejos de la realidad, ya que al presente todavía no sabe dónde van a construir; el ingenio no cuentan con el
dinero.
Hay que recordar que en enero 2014 se anunció el proyecto de la caña por parte del Gobernador y que se estaría construyendo un ingenio en Aguada para procesar la caña. Dichas facilidades tendrían un costo de $50 millones y que las mismas serian operadas por la empresa perteneciente a los Vicinis, oriundos de la Republica Dominicana.
El problema ahora es que el Gobierno tiene que invertir unos $60 millones que no tiene y que está buscando que se los presten para entregárselo a los Vicinis para que construyan el ingenio, generando ganancias los Vicinis del saque. Para luego de que se construya el mismo se les entregue para que lo administren y poder seguir chupando.
Pero el que hizo una zafra con el proyecto de la caña con su ponencia fue el ingeniero Olmar López. En su ponencia el Ing. López, con más de 40 años de experiencia en proyectos de producción de alcohol en el
Caribe, Centro y Sur América, y que operó una finca de 1,800 cuerdas de caña hasta 1990; comienza exponiendo las razones técnicas de por qué el proyecto de la caña está estancado. A su entender, no tiene un horizonte de poder ser
factible de la manera que está siendo ejecutado.
Entre los señalamientos están los siguientes:
1. Traer expertos de Centroamérica, República Dominicana y Colombia que desconocen de nuestros suelos, variedades, regulaciones ambientales, y leyes laborales vigentes, entre otras.
2. Importar a Puerto Rico variedades de caña de la Florida y sembrarlas en el Valle de Coloso para darse cuenta o
convencerse que las variedades de la Florida y Luisiana no son tropicales, sino, semi-tropicales, y que madura muy temprano. Y peor, no resisten herbicidas; pero en Puerto Rico tenemos “yerbajos” naturales que tenemos que controlar dentro de la siembra de la caña.
3. Han intentado traer por la cocina un operador agrícola de la República Dominicana que intenta desarrollar el
proyecto como un productor único, en otras palabras un monopolio.
4. Desconocimiento de los permisos ambientales vigentes de la EPA/JCA para operar un ingenio/central o destilería.
5. El costo de $2.80 el galón prueba de ron, que equivale entre un 45% y 50% más caro que importarlo de Guatemala o Brasil. Según datos disponibles en Aduana Federal o el Departamento de Comercio de Estados. Unidos, Bacardi está importando el 50% de esa producción con precios menores de $1.80 galón prueba, lo procesan y lo etiquetan como Ron de Puerto Rico y recibe $4.83 por galón prueba; o sea, sí importa 10 millones de galones prueba; recibe $43.3 millones sin generar un empleo ni actividad económica.
6. PRIDCO y Rones de Puerto Rico han ignorado a los productores de rones artesanales y pequeños en el desarrollo del proyecto.
Como parte de su ponencia el Ing. López hace las siguientes recomendaciones:
1. Reducir la magnitud del proyecto, a uno de 250,000 toneladas de caña al año (como Fase 1) y moler 250 días al año. Eso equivale a 10 mil cuerdas y no a las 20 mil que necesitan con la propuesta vigente.
2. Instalar molino/caldera/generación de electricidad en una central o ingenio cerrado; (como Mercedita); al lado de la Destilería Serrallés.
3. Reactivar permisos ambientales y otros en Central Mercedita y Coloso.
4. Al ser un proyecto de capacidad muy manejable; se reduce la inversión de capital a menos de $25 a $30 millones
versus $60 millones en la actualidad.
5. Establecer mediante legislación que los 14 centavos por libra de azúcar que se importa actualmente vigente y
cobrados por Hacienda, se utilice para el desarrollo de la industria como fue su razón de ser.
6. Establecer por legislación que como requisito para que los productores de ron cualifiquen para el 46% del cover over según la ley actual; el productor de ron tiene que fermentar y/o destilar en Puerto Rico sea con melaza, jugo de caña (local) o cualquiera mezcla de productos de caña de azúcar o “high wine”, para poder ser elegible al “cover over”, similar a los que le exigen las compañías de Ron en las Islas Vírgenes.
Como han podido ver, los cuestionamientos sobre la viabilidad del proyecto de la caña son preocupantes. El problema es que si no hacemos nada, el Gobierno de Puerto Rico está expuesto a perder alrededor de $400 millones en ingresos al fisco por concepto del “cover over”. (Cover Over es el nombre de los que se conoce a la partida que el Gobierno Federal nos devuelve por concepto del arbitrio del ron).
También es preocupante que con la apertura de Cuba, la empresa que lleva en el presente la bandera del ron de Puerto Rico a nivel mundial, Bacardi, regrese a sus raíces en Santiago de Cuba y pida que se elimine el “cover over”, ya que se convertirían en competidores nuestros.
En www.doctorshoper.com queremos reconocer el interés genuino que tiene el Senador Ramon Ruiz Nieves para que el proyecto de la caña camine. Lo que él no controla es la toma de decisiones por parte de unos burócratas que pretenden sembrar caña desde un escritorio en Hato Rey para favorecer a sus panas “ganadores”.
Hay que preguntarse por qué el Gobierno de Puerto Rico, que está según ellos mismos quebrado, tenga que buscarle a los Vicinis $60 millones para la construcción del ingenio. Los Vicinis son una de las familias más acaudaladas de América Latina con un capital BILLONARIO.
Si el proyecto fuera tan bueno y viable usted no cree que los mismos Vicinis estarían invirtiendo su propio dinero. Esa es la pregunta.
Por otro lado en www.doctorshoper.com entendemos que es un descaro que nosotros los consumidores estemos pagando desde 2002 un impuesto de 14 centavos en cada libra de azúcar que consumimos para mantener una industria de la caña inexistente. En este momento una libra de azúcar en Estados Unidos cuesta alrededor de 35 centavos y cuando se le añade los 14 centavos viene a costar 49 centavos libra. Esto equivale a una taza contributiva de un 40% para poder endulzarnos la vida. Un impuesto agrio para pagar por una industria amarga que ya murió.
Para esta y otras informaciones sintonicen nuestro programa Hablando en Plata de lunes a viernes a las 2 de la tarde por la Cadena del Consumidor, WUPR 1530AM, WEXS 610AM, WKUM 1470AM, WMDD 1480AM y WALO
1240AM.
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