Si usted es fanático de las encuestas, analice esta.

Por más de dos semanas, tanto líderes del Partido Popular, como la campaña de nuestro contrincante primarista han estado enfocados en una sola cosa, atacar a Pedro Pierluisi.

Las razones son obvias.

Por un lado, al liderato del Partido Popular le aterra la figura de Pierluisi porque ya les ganó una vez cuando sacó más votos que el propio Gobernador. Y saben que el Pierluisi de 2016 es de alguna manera diferente al Pierluisi de 2012. Tiene más experiencia; ha tenido que manejar asuntos complejos; ha logrado cosas tangibles para su pueblo en las áreas de salud y seguridad, por ejemplo; y ha estado de frente defendiendo a Puerto Rico en el Congreso en el peor momento económico y fiscal posible.

Por otro, está la campaña del contrincante, que cada día que pasa se pone más estridente, no de la boca de él, sino de su gente, sobretodo de sus promotores en la radio dizque no paga.

Hemos visto cómo han desempolvado figuras para hacer campaña por él y para hablar por él, olvidando que las campañas no se hacen con facsímiles razonables. La única manera de conocer bien a un candidato es exponerlo, sin miedo, cuando no se tiene.
Han activado los micrófonos para pretender vender a un Pierluisi que no es. A alguien que cambia de opinión o que vende a Puerto Rico. El nivel de odio que venden esos promotores debe ser visto como lo que es, debe ser la mejor encuesta. Están desesperados.

Agarrar un micrófono y decir falsedades, como que Pierluisi está a favor de bajar el salario mínimo federal a los jóvenes, reducir las pensiones y despedir empleados públicos, es una gran muestra de desesperación. Es una falsedad de las peores, porque se dice a sabiendas de que es falso. Siembran miedo, porque son incapaces de sembrar esperanza.

Hablan desde las gradas sin dar un tajo. Y no me refiero a quienes con argumentos razonables se oponen a la Junta de Supervisión Fiscal. Esos tienen mi respeto. Me refiero a quienes se oponen sólo porque Pierluisi la respaldó y porque políticamente les resulta el camino más “jugable”. También olvidan que la junta inicial era un clave a Puerto Rico y que la versión aprobada es una muchísimo más sensata porque Pierluisi trabajó para ello.

Esa gente no quiere que usted sepa que la Junta no puede ordenar ni decidir cuántos empleados tendrá el Gobierno ni qué servicios ofrecerán, o el nivel del salario mínimo federal. Todo eso lo seguirán decidiendo los líderes electos de Puerto Rico. También obvian que esa junta le da a Puerto Rico una herramienta para reestructurar su deuda, una pieza indispensable para ganar credibilidad en los mercados financieros, sí, porque la credibilidad se perdió.

La nueva es que un estadista no puede aceptar la junta. Discrepo. Que los estadolibristas tradicionales estén en contra de la Junta, se entiende. Al fin y al cabo derrumba su teoría de la existencia de un pacto bilateral. Pero que un estadista no comprenda que la junta desvistió y le dio otro golpe al ELA, es un acto de mezquindad primarista.

A las muestras de desesperación que ya les he señalado, súmele el llamado de Acevedo Vilá a votar en contra de Pierluisi. ¿Quién diría que el ex gobernador popular terminaría técnicamente pidiendo un voto por el hijo de uno de sus más acérrimos enemigos políticos? Insisto, el PPD teme que gane Pierluisi porque sabe que ante él, no ganan.

Por último, le dejo la más evidente muestra. Yo creo que entre populares y contrincantes se han ido al registro demográfico, cogidos de la mano, para buscar cualquiera de los apellidos de Pierluisi y buscarle hasta la hora de nacimiento y el signo zodiacal, para luego hacer conferencias de prensa de supuestos esquemas. Es una lástima que los familiares de los políticos, sea quien sea, y del partido que sea, sean expuestos a intentos de difamación y enlodamiento de reputaciones.

Yo sé que nuestro pueblo sabe más que eso, y que ve en estas artimañas de último minuto, un letrero gigante que dice: “DE-SES-PE-RA-DOS”.  #YoDigoQueSí

---

Para más información de la campaña de Pedro Pierluisi, acceda a http://pedropierluisi.com/