El presidente del banco de mayor prestigio e importancia en Puerto Rico, el Banco Popular, fue entrevistado por el excelente periodista, Benjamín Torres Gotay. Dicha entrevista hizo la primera plana de El Nuevo Día este pasado domingo. Debería ser lectura obligada para todos los puertorriqueños.

Leer el artículo de Torres Gotay y sentir el dolor de Richard Carrión es algo que estremece los hornos profundos del corazón del pueblo que ama a Puerto Rico.

Nos dice Carrión cuando se le pregunta cómo se siente en cuanto a la Junta de Control Fiscal, » Abochornado porque tenemos que darnos cuenta de que, en gran parte, nos buscamos esto, haciendo las cosas mal hechas y prometiendo beneficios que se sabía no se iban a pagar, gastando más de lo que se ingresaba». Continúa diciendo Carrión, » Hay bochorno y vergüenza  de que hayamos permitido que se degenere hasta este punto. Nos han dicho legislativamente, jurídicamente y ejecutivamente que somos poco más que ganado de una finca. El que no sienta algo de esos dos sentimientos, yo creo que no es puertorriqueño».

«Hay momentos en que tienes que hacer las cosas por ti mismo y no depender de otros. Nosotros llevamos mucho tiempo de espectadores y no de protagonistas. Tenemos que ser protagonistas».

Torres Gotay le pregunta si nunca ha pensado en una carrera política y Carrión le contesta, » Sería un error horroroso de mi parte. Mucha gente me ha hablado. Pero es que no lo sabría hacer».

No sabría administrar el gobierno ?,le pregunta Torres Gotay a lo cual contesta Carrión, » Administrarlo si. No sabría el proceso de ser electo. No sabría manejarlo». Gotay termina preguntándole si es que no podría bailar en una tarima.

» Más que bailar en una tarima, es el otro bailao el que me molesta. El decir cosas que tú sabes que no son correctas, porque te dicen ‘si no dices esto no vas a ganar’. Eso yo no lo podría hacer porque tengo un espejo en casa y hay un señor al otro lado que me mira todas las mañanas y si le da coraje conmigo no puedo seguir».

Nuestro sistema político no es perfecto. Parte de su imperfección es que, como dijo Carrión, hay que hacer y decir cosas que están mal pero el astuto Nicolás Maquiavelo las justificó como el medio de lograr el fin que es ganar la elección. El problema es que en ese proceso perdemos personas con integridad y sobrada capacidad en el servicio a Puerto Rico.

Carrión tiene razón, nos debería dar bochorno, dolor, vergüenza de haber permitido caer donde hoy estamos. Personas como Carrión difícilmente podrían salir electas, porque son personas que no miente y no siguen las antiguas enseñanzas de Maquiavelo.

Señor Carrión si en algo le sirve de consuelo yo estoy convencido que hoy personas como José de Diego, Luis Muñoz Rivera y José Celso Barbosa tampoco serían electos porque al igual que usted sus valores y principios no le permitían mentir.