Receta para la hecatombe: Trump allá y Yulin acá. Por José M. Saldaña expresidente de la UPR.

5 de abril 2019

Receta para la hecatombe: Trump allá y Yulin acá.

Por José M. Saldaña expresidente de la UPR.

Los regímenes coloniales que por 526 años hemos sufrido han tenido un gran impacto nocivo sobre nuestra autoestima individual y colectiva. Han servido para crear entre grandes sectores de nuestra población una condición de estado de inercia y complacencia con lo que se tiene -por más mediocre o indigno que este sea- que ha evitado a esos sectores moverse individualmente y – peor aún- colectivamente hacia superarnos en distintos aspectos de nuestras vidas. Desde1901, el Congreso determinó que, para fines de la Cláusula de Uniformidad de la Constitución, Puerto Rico no era parte de los Estados Unidos. “Pertenecíamos a, pero no éramos parte de”. Definiendo asi a Puerto Rico como un territorio no incorporado y por lo tanto que la Constitución y Carta de Derechos de Estados Unidos no se aplicabaníntegramente a la isla. Asi se nos impuso un estatus discriminatorio de inferioridad política (colonia)que hasta el día de hoy muchos disfrutan y pretenden continuar.

Ese actual estatus colonial permite que un presidente con características de niño malcriado, voluntarioso y narcisista como Trump discrimine contra nosotros, nos insulte y nos trate de forma inferior a los demás estados. Este trato en gran medida en represalia y en venganza por el ataque político de la politiquera alcaldesa de San Juan, Yulin a Trump en los medios noticiosos nacionales. Esta notoria alcaldesa independentista que le dijo a los populares que el que crea en la unión permanente que se vaya al PNP, aprovechando la crisis causada por la devastación de María y con el solo propósito de adelantar su agenda política independentista, provocó la ira y reacción de niño vengativo del presidente Trump en el peor momento para Puerto Rico.  Con ese innecesario ataque Yulin logró que un belicoso Trump la emprendiera contra la isla señalando que mientras aquí hubiera políticos ineptos y corruptos como ella no habría estadidad para Puerto Rico. Esa precisamente fue la intención de la alcaldesa con su ataque: obstruir la estadidad. Ante esta situación, el gobernador Ricardo Rosselló actuando como racional hombre maduro de estado, tuvo que reunirse con Trump y conversar con él de manera diplomática para lograr la ayuda necesaria del gobierno federal y evitar daños mayores.

 A pesar de esta desgraciada provocación de la alcaldesa Cruz, la Comisionada Residente Jennifer González logró traer la Puerto Rico al presidente Trump, al vicepresidente Pence, a los miembros del liderato de ambos cuerpos legislativos federales y a un gran número de funcionarios del más alto nivel del poder ejecutivo para que observaran de primera mano el daño y la devastación causada por María y se comprometieran a ayudar con los recursos necesarios. A pesar de todos los esfuerzos llevados a cabo por Rosselló y González, la ayuda a la que como ciudadanos americanos tenemos derecho, ha venido llegando a la isla muy lentamente.

Ahora un Trump vengativo, usando datos y cifras equivocadas ha manifestado la intención de no dar más ayuda a la isla ya que según él se le ha otorgado demasiado dinero en comparación con los estados de Florida y Texas. Insiste Trump en que tras el huracán María a la isla se le han otorgado $91,000 millones. Eso no es cierto. La realidad es que de los fondos prometidos solamente han llegado alrededor de $11,000 millones. Para reafirmar la diferencia en el trato, el gobernador Ricardo Rosselló señaló que a 18 meses del paso del huracán Katrina por Luisiana, bajo la administración del presidente George W. Bush ya ese estado tenía 2,400 obras permanente mientras que la isla solo tiene 46.

De acuerdo con el Washington Post del antepasado lunes, el presidente Trump solo aceptó que se le enviasen a isla $600 millones en asistencia alimentaria que están pendientes en el Congreso -cosa que acaba de rechazar el senado federal en votación cerrada-y fondos para rehacer la red eléctrica de la isla ya que según él se ha estado haciendo mal uso de los fondos.

El gobernado Rosselló reaccionó de inmediato a las declaraciones de Trump tildando sus comentarios como indignos, irresponsables e injustificados. Le reclamó que deje los insultos y caracterizaciones erróneas degradantes ya que no somos sus adversarios políticos sino sus ciudadanos. Luego de esas declaraciones el gobernador partió para Washington DC para disipar las dudas y resolver esta maligna percepción y decisión.

Son muy meritorias tanto las declaraciones del gobernador -demostrando indignación y valentía-como sus gestiones en su visita a Washington DC. Pero independientemente de todo lo anterior hay una realidad que la tenemos que resolver los puertorriqueños ya. No podemos seguir procrastinando. Puerto Rico no aguanta más esta maligna condición de un estatus colonial humillante, indigno y discriminatorio que hemos tenido que soportar. Ya el ELA actual dio lo que iba a dar… colapsó. Todos los informes presidenciales, el congreso y la judicatura federal han dicho categóricamente -tanto en inglés como en español- que el ELA Mejorado que tratan algunos populares de vendernos es inconstitucional. No es viable. ¿De qué otra manera habrá que decírselo a los populares? La única opción verdadera que tenemos los que atesoramos la ciudadanía americana y creemos en la unión permanente para obtener el respeto, la igualdad en el trato y el progreso es la estadidad. Es lo que nos permitirá votar por el presidente, elegir dos senadores y cinco representantes al congreso que defenderían nuestros derechos.

En una columna el pasado lunes 1ro de abril en un medio noticioso – que aparentemente ha decidido hacerle la campaña a la alcaldesa y al PPD- Yulin nos endilgó una columna que es un refrito del discurso que pronunciara en el Jardín Botánico de Caguas para comunicar su intención de optar por la candidatura a la gobernación. En esa columna volvió a recurrir a la letanía sentimental de su supuesto origen humilde y de cómo sus bisabuelos y abuelos eran explotadospara enriquecer a los terratenientes. Nos endilgó además una parrafada llena de eufemismos, del lenguaje típico y engañoso del nuevo socialismo /comunismo conteniendo una sarta de promesas sobre la educación y servicios de salud gratis- ¿y los chavos dónde están?, la protección de nuestros recursos naturales, la igualdad de todos los seres, el respeto a la diversidad, la perspectiva de género todo esto como primer paso hacia una sociedad igualitaria con menos violencia. Esta populista, socialista la nueva Alicia en el País de las Maravillas nos quiere vender la república socialista por la cocina mediante una Asamblea Constitucional amañada. Mientras tanto continúa en una guerra de twitters con el presidente Trump quien ya ha dejado claro su odio visceral hacia la alcaldesa.

Imaginemos por un minuto el macabro escenario de lo que pasaría si nuestro pueblo cometiera el monstruoso y garrafal error de elegir a Yulin gobernadora y Trump fuera reelecto presidente de la nación. Pensarlo nada más tiene que estremecer al más indiferente. No hay opción…las próximas elecciones tienen que ser plebiscitarias. Hay que trabajar intensamente para evitar la posibilidad de que, por tratar de salir de esta trampa colonial, se escoja el suicidio colectivo.