Muchos comentan que el plebiscito no logrará nada, que los ‘americanos’ nunca querrán resolver lo que tenemos, otros viven en ‘lilipoon’ y sueñan con un ‘ELA Soberano

Emarielys Marrero, Colaboradora

Los ilustres representantes del PPD y su Junta de Gobierno presentaron hace semanas su genial estrategia ante el plebiscito de status que se realizará en noviembre.

La mayoría de los periodistas, candidatos, políticos en turno y el sector del Pueblo que entiende la jerga de la cláusula territorial y lo que implica se mostraron sorprendidos, de acuerdo y otros simplemente se colocaron gríngolas para seguir en piloto automático las directrices.

Muchos comentan que el plebiscito no logrará nada, que los ‘americanos’ nunca querrán resolver lo que tenemos, otros viven en ‘lilipoon’ y sueñan con un ‘ELA Soberano’, que está tan lejos de la realidad como pensar que con la Estadidad llegaría la nieve. ¿Sabe qué es lo más penoso de toda la situación? ¿Sabe realmente lo que es una cláusula territorial? ¿Tiene usted idea de lo que significa un plebiscito?

El ELA es Peor de lo Peor

Seguramente, a ojo cerra’o, contestaron en su interior que ‘sí’, que sabe de todo porque escucha las emisoras AM, porque lo vio en una red social o porque sus candidatos lo han explicado siempre.

¡SIEMPRE! Esa es la palabra clave para su mayor entendimiento. Desde el 1952, mediante acuerdo con el Gobierno de EE.UU. y algunos líderes políticos del territorio, surgió el ELA, bajo el que se determina que somos un territorio del Gobierno de Estados Unidos de América. Que tenemos una Constitución, que tenemos ciudadanía, que tenemos una bandera, que tenemos una Miss Universo, que tenemos un Equipo Nacional de Baloncesto, que Cotto peleará con Mayweather… Esas son algunas de las ideas que pensara automáticamente. ¡Ah… y como olvidar que recibimos fondos federales, cupones, FEMA y migajas! Y todos como focas aplaudimos y damos gracias a lo divino de tener un pesito con la imagen de un presidente desconocido por muchos. Sin embargo, la realidad de lo que implica una cláusula territorial es mucho más sencilla de lo que mencioné. Simplemente no podemos elegir al máximo jefe, simplemente no tenemos representación en el Congreso, simplemente carecemos de autonomía para negociar internacionalmente, simplemente somos ese rincón donde colocan lo que sobra, o lo que está ‘demás’.

Pero a pocos se les ocurre la brillante opción de que podemos mejorar, porque estamos tan colonizados, amedrentados y dominados que no creemos en la capacidad del Pueblo. Por lo que nunca he entendido como aquellos que defienden una cláusula territorial, son llamados patriotas y se sienten más ‘puertorriqueños’ que los independentistas y estadistas que desean resolver lo que tenemos. A pesar que es un discurso trillado, tengo la responsabilidad apremiante de repetirlo a la saciedad porque aún no concibo como es que los líderes del PPD insisten en utilizar el asunto del status como trampolín para seguir brincando en lo que está roto; seguir atándose a lo imaginario.

Luego de ver las opiniones del Senador y candidato a la Gobernación por el PPD, durante las vistas públicas del status, de escuchar su retórica sin fundamento, de presenciar su falta de conocimiento histórico y político de lo que es el Estado Libre Asociado de Puerto Rico, de su ya famosa inconsistencia en el diálogo cotidiano, no me asombra en lo absoluto que su estrategia sea: “El ‘sí’ derrota a Fortuño y es también un voto de rechazo a este plebiscito como proceso amañado y antidemocrático”.

Sin embargo, lo que sí me asombra es como este ‘líder’ y sus secuaces tengan la osadía de establecer esa idea absurda y esa ‘gran’ estrategia como su plan, pero mas allá me asombra que existan quienes crean en la legitimidad de su respuesta. Y no me refiero a que la decisión de elegir ‘sí’ esté incorrecta, porque para efectos, tenemos un proceso democrático, y era de esperarse que los defensores del ELA eligieran esa opción porque en blanco y negro no tienen otra, eso está formidable y se lo respeto. Lo que no me hacen ningún tipo de sentido es le estrategia política y su ‘GRAN PLAN’ de esconder las cosas, de tapar lo que es obvio, de engañar, del miedo, del tal vez. Porque señores, es tan sencillo colocarse en un podio ante un público y decir: “Vamos a votar por el ‘sí’ porque creemos en el sistema del ELA y punto”. Pero es más efectivo controlar al Pueblo como borrego y llevarlos al plan maquiavélico de “votemos contra Fortuño”.

¿Acaso no se han enterado que el Pueblo sabe leer y escribir? ¿No se han enterado que el día de las elecciones tendremos varias papeletas y que la del gobernador y el status son papeletas separadas? ¿A caso no se han enterado que es lógico que el PPD elija el ‘sí’ porque creen en el estado territorial actual?

No sé en qué capitulo de su viaje al Medio Oriente, Europa o Suramérica se estacionó el candidato del PPD, pero lo que sí sé, es que al menos hablar con la verdad es el deber más importante de un líder ante sus seguidores. Y mi crítica no es a los compatriotas que crean en el ELA como opción, porque en un Pueblo hay diversidad de opiniones y eso me parece fantástico. Mi crítica es a los ‘lideres políticos’ que insisten en tergiversar la realidad y mezclar los asuntos apremiantes de un Pueblo con los asuntos apremiantes de su campaña. Decir que el plebiscito no funcionará es formar parte de la mentalidad derrotista y es prácticamente echarse tierra en los ojos. Mi abuela siempre me dice que no hay peor gestión que la que no se hace; entonces ¿cuál es el miedo de los candidatos? El que el Pueblo se unifique y le coloque punto final a los asuntos reales; o que se les acabe la línea del status como discurso trillado cada cuatrienio que prometen un cambio.

Es momento de que el Pueblo deje a un lado la indecisión, la falta de claridad, el miedo a lo inminente, porque cada día que pasa en un sistema territorial es como una capa de brea que inmoviliza el quehacer del Pueblo. Es momento que escuchemos algo más de parte de los supuestos líderes, que no sea: ‘Castiguemos’, ‘Votemos en contra de…’, ‘El otro fue peor’.

Le invito al líder del PPD, que hable con la verdad y no utilice la ya gastada demagogia política, las respuestas dubitativas y el miedo a la definición del territorio y esperemos que no se le ocurra un “tal vez” a mediados de campaña, como una posible opción de lo inevitable, porque no tendremos una reforma bajo un ELA ilusorio como el que nos quieren presentar.

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¿Cómo sustituir el FDIC y la Reserva Federal en el ELA Soberano?