¡Qué barbaridad! ¡Quieren enseñarles inglés a los pobres!

¡Qué barbaridad! ¡Quieren enseñarles inglés a los pobres! Hay que hacer todo lo posible por impedirlo. Comencemos diciendo que no hay maestros, que hay otros problemas que atender, que si no hay tiza, que si hay charcos de agua en la escuela, que si hay una mosca, cualquier problema es más importante y apremiante que aprender inglés. Pero, un momento; hagámoslo rápido pues esta es la época que nuestros hijos llegan de sus universidades en Estados Unidos. Si los pobres aprenden inglés, votarían por la Estadidad, hay que sacrificarlos a ellos para impedir que llegue la Estadidad, en la guerra todo está permitido, siempre y cuando permitan a mis hijos estudiar en Inglaterra o Boston.

Así estamos. Líderes coloniales quieren impedir las escuelas bilingües por razones politiqueras. La realidad es que si el 100% de los puertorriqueños hablara inglés, eso no es suficiente para que nos den la Estadidad. Pero negarles aprender inglés a los pobres por cuestiones politiqueras es imperdonable. Es lo mismo que impedirle a los pobres aprender a escribir. Lo próximo será prohibir a los pobres acceso a Internet, televisión y computadoras, pues podrían en estos medios aprender el idioma del Diablo.

Hoy en día, si usted no domina el inglés, se le hará difícil conseguir puestos bien renumerados o progresar en su trabajo.

En los bancos, farmacéuticas, casas de distribución, agencias de publicidad, si no habla inglés, no lo reclutan. La mayoría de las transacciones comerciales se hacen en inglés.

Cuando alguien se exprese en contra de las escuelas bilingües, pregúntele si él y sus hijos hablan inglés y dónde lo aprendieron. ¡Qué bueno tener el privilegio de aprender inglés en una escuela privada, pero que mezquino negárselo a los pobres!

La escuela bilingüe no es asunto de status, es eliminar la barrera de discrimen racial que tenemos en la cual los pudientes tienen a sus hijos en colegios privados, que enseñan inglés, pero se le quiere negar a los pobres la enseñanza del inglés. Si el inglés es tan malo, que sus detractores se comprometan a enviar sus hijos a las escuelas públicas que no enseñan inglés, y que luego estudien en universidades locales.

Conozco a jóvenes con mucho potencial producto de las escuelas públicas que no dominan el inglés. Los comparo con aquellos jóvenes agraciados que fueron a escuelas bilingües, y la competencia entre ellos jamás será nivelada. El que domina el inglés le lleva una ventaja enorme al que no. Esto todos lo sabemos, lo triste es que este discrimen contra la gente humilde es ‘aceptable’; es más, la clase intelectual tiene mil justificaciones para estar en contra del bilingüismo.

Repito, el que se crea que tan solo con escuelas bilingües trae la Estadidad está soñando con pájaros preñados, pero el que se opone para mantener la colonia le ha hecho un daño irreparable a cientos de miles de jóvenes. Es tiempo de acabar con este discrimen racial, no se le puede temer a un pueblo que se educa.