La Hipocresía del Partido Popular y el Ocaso de la Colonia

07/10/2012 | Filed under: Colonia,Estadidad,Status | Posted by: Francisco

NR – Los Voluntarios Pro-Americanos se han tomado la iniciativa de defender su Ciudadania Americana, la Estadidad y al PNP, en forma desinteresada, espontánea y muy bien documentados.

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La Hipocresía del Partido Popular y el Ocaso de la Colonia

Publicado por G. Melendez el julio 5, 2012 a las 11:24am1 Comentario 2 Le gusta

La semana pasada escuche uno de los comentarios mas “impactantes, brillantes y coherentes” en la historia del análisis político de Puerto Rico. El Senador Juan Eugenio Hernández Mayoral, mejor conocido por “El Tigre”, opinó sobre la falta de necesidad de nuestro pueblo en términos de tener representación en la democracia de los Estados Unidos. La Corte Suprema acababa de validar la constitucionalidad de la iniciativa de salud conocida como Obamacare, y este ícono del quehacer político de nuestra isla indicó que el hecho de que Puerto Rico fuera a recibir mas fondos federales bajo este nuevo programa era muestra de que no necesitamos tener representación en el congreso federal. ¿Hará falta analizar la profundidad de la aberración que esta opinión representa en términos de capacidad intelectual, dignidad, y honestidad? Lamentablemente, si.

En términos de respuesta inmediata, y casi como un reflejo, uno lo que piensa es… ¿Qué carajo le pasa a este tipo? Pero, en beneficio de la civilidad y el decoro, en un ambiente social que carece de ambas cosas, esa línea de análisis la voy a dejar para cuando esté compartiendo unos refrigerios con mis amistades más cercanas.

Continuando con lo patético de esta situación, el ilustre Senador andaba concediendo entrevistas y empujando a la creciente comunidad puertorriqueña de la Florida central para que se insertaran en el proceso democrático. Le cacareaba a periódicos del continente sobre la influencia estratégica boricua a la hora de elegir al Presidente. ¡Que mal, Señor Senador! ¡Que mal por usted y su prestigiosa estirpe!

Para el liderato del Partido Popular Democrático, es muy importante que los boricuas del continente participen de las bondades de una democracia representativa, pero no acá. No en el rancho que quieren administrar. Para ellos no es importante que acá en la isla tengamos el derecho a votar por la persona que va a enviar a morir a nuestros hijos y nietos a algún campo de guerra al otro lado del Globo. Para ellos no es importante que a la hora de decidir cuantos fondos federales se envían a nuestra isla, los senadores y el representante de Wyoming puedan votar, y el representante nuestro en el Congreso tenga que andar mendigando como un cabildero glorificado…con el falso nombre de “Congressman from Puerto Rico”.

El pecado imperdonable del liderato del Partido Popular, y especialmente los remanentes de la élite criolla que bebió del “Grial del Caudillo”, estriba en su falta de empatía ante los contrastes. Si analizamos su situación de vida, llegaremos a la conclusión de que ya viven la estadidad. Todos ellos tienen contactos, influencias y ventajas a nivel personal que compensan la falta de democracia del resto de nosotros. Les encanta regodearse con congresistas puertorriqueños que representan otros lugares, pero no quieren un congresista del distrito de Arecibo, Ponce, Mayagüez o San Juan. No entienden, o mejor dicho, no les importa que para la gran mayoría de los puertorriqueños, el voto es el único acceso, la única voz y la única influencia. Doña Yaya, del barrio Cantito de Manatí no puede llamar a un amigo que estudió con ella en Boston o en Washington y ahora trabaja en Casa Blanca. Ella no puede llamar a una “sister” sorora que ahora trabaja en un “Law Firm en DC”.

Y créanme, yo entiendo que el liderato estadista también está lleno de personas que también tienen esas ventajas individuales. Esa realidad es exactamente lo que demuestra como cierta mi humilde opinión Es más, Ferré, Romero, Rosselló y Fortuño…TODOS pertenecieron o pertenecen a ese segmento social; pero aun así dieron, y dan la lucha por la igualdad del resto de los habitantes del territorio. Mientras el liderato PNP entiende que el colectivo social tiene que insertarse en el proceso democrático, el del PPD no solo no le importa, sino que lucha a capa y espada para que jamás logremos participar de la democracia.

Esa es nuestra realidad actual, mis queridos compatriotas. Esos son los obstáculos que tiene que salvar el movimiento anti-colonia y estadista de esta bendita tierra. La demagogia como herramienta cotidiana para mantener el inmovilismo y el control de la chequera de la colonia. A veces resulta abrumante, siempre es cuesta arriba, pero nos tocó vivir aquí…y ahora. No podemos quitarnos.

Los que creemos en que los puertorriqueños tenemos el derecho, y la obligación de ponernos de pie de manera colectiva, debemos seguir luchando sin tregua alguna. Estamos del lado correcto de la historia, y se respiran aires de cambios. En términos de tener combustible para alimentar nuestras esperanzas, solo basta comparar los estilos de Fortuño y Pierluisi con los estilos de sus contrincantes. Ese es el presente del movimiento estadista; Hombres que se niegan a meterse al fango del cual los halan constantemente, y siguen concentrados en enderezar lo que la maldita colonia ha torcido por décadas. Del futuro, ni hablar. Contamos con jóvenes como Ricardo Rosselló, por nombrar uno, quien le está entregando su energía, intelecto y juventud a Puerto Rico, por ideales nobles y urgentes. Del otro lado…El Tigre.

Cada uno de nosotros tiene que hacer lo propio. Debatir, motivar, corregir…andar. Andar sin tregua y sin descanso. Andar con la esperanza de que nuestro querido Puerto Rico se encuentra en el umbral de una nueva era. Andar hacia un futuro mejor y más digno. NO a la colonia. Estadidad como única opción descolonizadora. Luis Fortuño 4 años más Gobernador. Pedro Pierluisi Comisionado Residente. Inclusive, para el 2016…bueno, hablamos de eso después.

¡Estamos del lado correcto de la Historia!