El Banco Gubernamental de Fomento deberá liquidar una millonaria obligación antes de concluir el año fiscal

Demasiadas cosas “en juego” actúan ante el próximo acercamiento del Estado Libre Asociado (ELA) al mercado municipal de Nueva York para mover sus bonos.

Siguen al pendiente el reembolso de unos $600 millones correspondientes a bonos de las obligaciones generales (GO, por sus siglas en inglés) y otros $175 millones de deuda garantizada de la Autoridad de Edificios Públicos (AEP).

En esto se han concentrado gran parte de los esfuerzos en el Banco Gubernamental de Fomento (BGF), que deberá liquidar la millonaria obligación antes de concluir este año fiscal el 30 de junio.

La liquidez no existe y la caja del estado, así como las arcas del BGF, aunque aparentemente comienzan a dar muestras de mejoría (según se ha informado en el caso de Hacienda), siguen estrechas de fondos. La manera de cumplir es regresar al mercado a vender deuda y levantar capital, han reconocido funcionarios del gobierno, como Javier Ferrer, presidente del BGF.

No obstante, tal y como se ha discutido ampliamente, las condiciones crediticias para el ELA se asemejan a una camisa de fuerza donde el nivel de intereses deberá dispararse hacia arriba, en consecuencia a las degradaciones a un paso del grado especulativo y las perspectivas negativas.

Ferrer ya ha dicho que un interés sobre el 6% pesa demasiado en la cartera del gobierno y no es viable. La realidad es que la deuda tiene que ser pagada como lo garantiza la Constitución del ELA, con su protección expresada a los bonistas sobre cualquier otra obligación del país.

De hecho, la publicación The Bond Buyer relata hoy en una de sus historias un análisis al respecto y coinciden en que la siguiente llegada de Puerto Rico al mercado de bonos le significará pagar un alto rendimiento y destaca que logarán éxito “si se muestra más progreso hacia la salud fiscal”.

Al igual que lo han reconocido en la última semana y media agencias como Standard & Poor’s y Fitch Ratings Service, que estimaron como progreso positivo la reciente reforma aprobada para aumentar los ingresos a los Sistemas de Retiro y reducir el déficit, los analistas consultados han comentado lo propio.

Los analistas consultados por The Bond Buyer indican que aun cuando se aprobó la reforma por el gobernador Alejandro García Padilla “el mercado secundario sigue pidiendo más rendimiento”, y esto representa negociar deuda a niveles “sustancialmente superiores” a lo que existe en el mercado. Estos mencionan que en los últimos meses ha incrementado el diferencial en los puntos básicos de los intereses, ante la preocupación de los bonistas.

Mientras tanto, le resta al gobierno, en el corto plazo, presentar otras medidas para sanear la salud fiscal y ofrecer altos rendimientos que propicien el interés adecuado para sus bonos bajo las condiciones actuales.