Garantías no hay. Pese a los desesperados intentos por detener una degradación del crédito boricua a chatarra, el gobernador Alejandro García Padilla admitió que no hay acción alguna que pueda tomar que despeje ese panorama de la realidad puertorriqueña.

Casi sin pausa, García Padilla puede recitar cada una de las decisiones que ha tomado para detener esa tempestad económica que detendría gran parte de la actividad económica del País y afectaría la alcancía tanto de los ricos como de  los pobres. La privatización del aeropuerto, las reformas de retiro, los nuevos impuestos son tan solo algunos de los ejemplos.

Parecería que escoge entre males. La reforma del retiro de los maestros amenaza con terminar en una huelga que deje a los estudiantes de las escuelas públicas sin clases.

Se trata de un tema delicado, pero aseguró que, aunque la reforma ya es ley, está dispuesto a considerar enmiendas. En un Uno a Uno con El Nuevo Día, García Padilla habló sobre los principales temas espinosos de su mandato.

Supongo que de los maestros no recibió muchos regalos en la Navidad.

Pues mira sí. No sé si regalos, pero algunos han hecho expresiones de reproche y otros han hecho expresiones de agradecimiento. Los que han tenido la oportunidad de ver el proyecto me han dicho que lo que necesita es explicarse.

¿Acaso el problema no fue que no se dio tiempo a que nadie lo leyera, lo entendiera y lo discutiera?

Lo que pasa es que este proceso comenzó en octubre, cuando comenzamos a reunirnos con el liderato magisterial.

¿Y por qué entonces lo apresurado del proceso de aprobación?

Mientras más años pasaran menos se podía ofrecer de beneficios porque, por ejemplo, en el 2014 el retiro de los maestros hubiese caído a tener 13 centavos por cada dólar que debe. En el 2013 habían 17 centavos por dólar y eso nos permitía ofrecer más cosas.

Ya lleva un año en La Fortaleza y ha tenido múltiples controversias. ¿Cómo usted ve el año?

Los problemas están bien definidos y las soluciones también. En menos de un año mi gobierno salvó los tres sistemas de retiro principales del País. Eso es algo que ningún otro gobierno había hecho y son cosas que por décadas se decía que había que hacer, pero nadie las hacía. Nosotros en 11 meses las hicimos. Yo me siento bien orgulloso de eso.

Pero eso depende de cómo se mire el asunto, porque algunos piensan que destruyó los sistemas.

Los que atacan esto tienen agendas políticas.

¿Los líderes magisteriales tienen agendas políticas?

Algunos sí y otros no.

Hay una amenaza de huelga. ¿Se quedará sin escuelas públicas abiertas en enero?

Yo confío en que la razón va a prevalecer. A los maestros se les garantizó un retiro que no tenían antes, que es de $1,625 como mínimo. Es más de $200 por encima del ingreso per cápita de los puertorriqueños. Los nuevos maestros podrán cotizar Seguro Social y todos tendrán un plan médico con derecho a medicinas. Eso sin mencionar que los demás contribuyentes van a aportar alrededor de $400 millones para el retiro de ellos. Eso es una consideración que los maestros deben tener. El pueblo está contribuyendo a su retiro. La amenaza de cerrar las escuelas no es contra mí, es contra los niños y los padres que no tendrán dónde llevar sus niños. Esos son los mismos padres que con sus contribuciones están ayudándoles a pagar el retiro. Sería muy injusto con los niños y con los padres.

¿Ha contemplado negociar nuevas enmiendas?

No solo esa, sino todas las leyes pueden ser enmendadas y mejoradas. Ahora, eso también plantea un reclamo de que hay que pasar de la protesta a la propuesta. De las 10 propuestas que los maestros hicieron hubo ocho que aceptamos. Todas las propuestas que eran aplicables se aceptaron. Si traen una propuesta aplicable con gusto la evaluaremos.

¿Por qué firmó la ley de retiro de la judicatura cuando se levantaron dudas serias sobre la constitucionalidad de la medida?

Porque fueron sanadas las dudas. La constitución lo que dice es que la legislatura aprobará un sistema de retiro. No se está tocando el salario. Una cosa es la pensión y otra es el salario. Eso la constitución lo deslinda.

¿El problema es que para evitar la degradación hay que causarle molestias a la gente?

Eso implicaría que la gente prefiere a los gobiernos irresponsables que los gobiernos responsables y estoy convencido que el país quiere gobiernos responsables que lo saquen de los problemas.

¿Tras un año tan controversial acaso usted ha contemplado que sería sumamente difícil la reelección?

No. Cuando uno actúa con responsabilidad, eso es bueno electoralmente. Yo he tomado las decisiones correctas, responsables y valientes y los países buscan eso de su liderato.

Después de tanto sacrificio que se ha hecho para satisfacer las exigencias de las agencias acreditadoras, ¿qué garantías tiene el gobierno de que no se va a degradar el crédito?

Salvarle el retiro a los empleados públicos era un imperativo fiscal, pero también era un imperativo moral. Esto había que hacerlo aunque las casas acreditadoras no lo pidieran. No hacerlo garantizaba que nos degradaban.

Pero es claro que no hay garantías.

No hacerlo (los cambios) garantizaba que se nos degradara. Hacerlo contribuye a evitarlo, pero una garantía no hay.

Dada las complicaciones que ha habido para impulsar el desarrollo económico, que es una de las exigencias de las casas acreditadoras, ¿no sería inminente una degradación en algún momento del cuatrienio?

Sería partir de una conjetura.

Pero no lo estoy sacando del aire. No hay una tendencia clara de recuperación económica.

Puerto Rico está dando muestras de estar llegando a un punto de inflexión y todo tiende a indicar que esa nueva tendencia va a continuar. De hecho, el desempleo promedio de este año está por debajo al del año pasado con una tasa de participación más alta… El año pasado fue eleccionario y los gobiernos usualmente aumentan artificialmente la actividad económica en esos años y a pesar de eso tenemos menos desempleo y más participación. No hemos cantado victoria, pero si vemos que la ruta ha cambiado hacia lo positivo.

¿Cuándo esperan ir al mercado de bonos?

Tan pronto sea posible.

Ustedes en el presupuesto tenían una necesidad de como $850 millones para pagar el gobierno.

Nosotros no tenemos un problema de liquidez para pagar el resto del año.

Pero esa necesidad de $850 millones viene del mismo presupuesto que tiene un déficit a financiar de esa suma.

Cuando llego al gobierno, el déficit es de $2,200 millones. Se reduce a $820 millones, pero ya está en menos, porque los recaudos han sido superiores a lo proyectado y el gasto ha sido menor, se redujo el déficit. Ir a los mercados para no afectar la liquidez del banco es otra cosa.

Estoy hablando de las Obligaciones Generales y los préstamos que se aprobaron con el presupuesto para financiar la deficiencia.

Vamos a ir tan pronto sea posible. Hay una deuda que tenemos que pagar a corto plazo y ahora nosotros no tenemos una crisis de liquidez. Con los ajustes que hemos hecho tenemos liquidez hasta más tarde de junio 30. Salir corriendo al mercado no es lo que necesitamos.

¿Por qué la urgencia y la insistencia de abrir las condiciones de Puerto Rico en el mercado si todo está bien? ¿No fue para eso que envió los proyectos de ley de índole económico a la Sesión Extraordinaria de este mes?

Una cosa es liquidez, otra la deuda a corto plazo, poder emitir deuda para obra pública y desarrollar la economía. Es deuda de la buena con fuente de repago. Con una emisión se atiende más de un asunto. Yo espero que se aprueben esas medidas en enero.

¿El gobierno se quedará sin dinero en el primer o segundo trimestre del 2014?

Lo que ha informado el Banco Gubernamental de Fomento es que no tienen problema de liquidez.

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