Casi todos se preguntan “¿qué traerá el año nuevo? ¿Nuevas esperanzas, progreso, mejor calidad de vida, mejores noticias? Ojalá, pero las ilusiones chocan con la realidad. Seguimos con el mismo desgobierno, los mismos personajes y la misma colonia. Hay que decir la verdad. Lamentablemente, tendremos más de lo mismo y hasta peor. Las heridas y golpes de esta colonia, lejos de curarse con el tiempo, se agravan.
Los personeros del régimen colonial están arropados por la desesperación. Ven sus encuestas y respiran en la calle que el pueblo rechaza abrumadoramente al desgobierno popular y a la colonia. Nada bueno pueden hacer en sus metas de reelección, por ello mienten y tratan de crear falsas imágenes de recuperación a la vista. Esa es su nueva faena para el 2015. Lo estamos viendo.
Utilizaron la actividad económica tradicional de las navidades para proyectar que todo estaba mejorando o en recuperación. Finalizadas las navidades volvemos a lo mismo. La colonia quebró porque no puede seguir aparentando el estilo de vida de un estado de la Unión, sin tener la igualdad de derechos y beneficios económicos que tienen los estados. Ese es el estilo de vida que quieren los Puertorriqueños para sus familias, pero en la colonia ya no es posible.
Desde finales del año pasado hemos visto cómo algunos economistas del régimen han salido a decir que la situación va a mejorar. Son los mismos economistas que utilizaba Acevedo Vilá en cada Navidad para anunciar que “ahora es que vamos”. Lo decían todos los años y el año siguiente era peor.
Pusieron a la Junta de Planificación a proyectar un supuesto ambiente de recuperación a pesar de que el Índice de Actividad Económica (IAE) está en terreno negativo desde que el PPD llegó al poder y sigue bajando. Turismo lanzó una costosa campaña publicitaria para decir que hay muchos turistas de cruceros en San Juan. Nada que no debía esperarse pues estamos en la temporada alta y fueron muchos los esfuerzos que hizo el PNP para remodelar el frente portuario, aumentar su capacidad y así poder lograr mayores promociones con las empresas de cruceros.
Anuncian con bombos y platillos que durante noviembre y diciembre de 2014 hubo menos quiebras radicadas que durante los mismos meses de 2013. No explican, sin embargo, que quienes único están acudiendo al tribunal a declarar quiebras son las empresas que cierran y adeudan grandes cantidades de dinero. La inmensa mayoría de los pequeños y medianos comerciantes que están cerrando sus negocios no entran en esas estadísticas porque no radican casos de quiebra, sencillamente cierran y despiden empleados. No pueden más con los altos costos operacionales y la crisis económica.
Hasta hablaron de una leve mejoría en los empleos, cuando en realidad sabemos que durante la época navideña se recluta empleados que son inmediatamente despedidos en enero o febrero. Lo que no pueden ocultar es que durante estos últimos dos años se han perdido casi 50,000 empleos; que la principal aspiración de la mayoría de los puertorriqueños es cómo logran salir de la colonia junto a sus familias para buscar la estadidad en Orlando, Florida y que ya se confirma que bajo este desgobierno esa emigración masiva es mucho mayor que antes. ¿Recuerdan el anuncio de televisión del PPD y su abuelita alegre porque con García Padilla en La Fortaleza sus hijos y nietos iban a regresar a Puerto Rico? Con la colonia y García Padilla… ¡hasta la abuelita se fue de Puerto Rico!
Lo que algunos medios no publicaron o lo hicieron con gran timidez es que las ventas navideñas fueron un fracaso. Más de 90,000 trabajadores no recibieron bono de navidad porque sus empresas alegaron mala situación económica. Por su parte, el gobierno redujo hasta el mínimo el bono a la mayoría de los empleados públicos.
La otrora poderosa Puerto Rican Cement anunció que durante 2014 había registrado las ventas más bajas de concreto desde 1959. Eso sí es noticia de primera plana, pero la ocultaron. Uno de los principales índices de nuestra actividad económica, la construcción, vende hoy menos cemento que hace 55 años. Nada se está construyendo y decenas de miles están sin trabajo.
El régimen colonial cada día impone más contribuciones, pero Hacienda recauda menos porque hay menos gente produciendo y menos gente en la Isla. El costo de vida es insostenible. La compra, la ropa, la transportación y todo lo demás suben mientras los salarios están estancados.
La AEE viene con un aumento tarifario. La crisis del Banco Gubernamental de Fomento se mantiene al acecho. Las corporaciones públicas no tienen con qué pagar sus préstamos ni dinero para ofrecer servicios. La tarjeta de salud también es otra crisis al acecho de 1.6 millones de puertorriqueños. El presupuesto continúa descuadrado y las finanzas públicas degradadas a chatarra. Hay 18,000 casos de ejecución de hipotecas porque la gente ni siquiera puede pagar el techo de sus hijos. La lista es demasiado larga.
Se anuncia una Reforma Contributiva como si fuese a aliviar la carga del pueblo. Falso. Un gobierno quebrado como este régimen colonial no le va a ahorrar un centavo en contribuciones a nadie. Lo que te bajen por un lado con esa supuesta reforma, te lo quitarán con creces por otro lado. Eso es lo que viene. De hecho, lo que hicieron fue legislar para arrebatarle a mucha gente, incluyendo a los envejecientes, beneficios contributivos que había legislado el PNP.
Hasta hablan de que la baja en el precio de los combustibles es un supuesto síntoma de recuperación o que incidirá en ello. El problema de esta colonia, sin embargo, es tan grave que por más que bajen el precio de la gasolina, la crisis colonial continuará; es mucho más grave y profunda que el precio de la gasolina o del combustible de la AEE.
Por lo menos dos periódicos se están prestando a esta faena del régimen colonial. Poco a poco tratarán de crear la falsa imagen de recuperación hasta que den al traste porque la realidad que vive la gente es otra. Se replegarán. Ningún medio de comunicación pued
e imponerle al pueblo imágenes falsas que chocan de frente con la realidad existencial de la gente. Esa alcahuetería propagandística les durará muy poco.
La estadidad debemos traerla a Puerto Rico y dejar de buscarla en otros estados. La necesitamos aquí para todos y todas los residentes de la isla. Solo tenemos que reclamarla con fuerza y lucharla para conseguirla como lo hicieron 37 territorios antes que nosotros.
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