Bancarrota – por el Padre Wilfredo Peña Moredo – El IVA y Mucho Más

02/25/2015 | Filed under: Campaña | Posted by: Francisco

Bancarrota

El seguir construyendo inmensos centros comerciales y lujosos condominios no trae un impacto en nuestra economía sino que es otra manera de gastar

shutterstock_211364203 EL VOCERO / Archivo
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Por Wilfredo Peña Moredo – hace 43 minutos 4:00 am
La palabra ‘bancarrota’ se define en el diccionario de la Real Academia Española como (del italiano bancarotta) – desastre, hundimiento, descredito de un sistema o doctrina.

Una vez más nuestros idioma castellano da en el clavo. Puerto Rico se dirige a la bancarrota, pero ¿cuál es la razón? ¿A qué se debe el descalabro en que nos encontramos? ¿Tiene remedio esta situación?

Sin entrar en el ámbito económico, per se, que aparece a diario en la prensa. Pienso para mis adentros que el descalabro del país es el producto de la suma de muchos poquitos. Personas muy preparadas y documentadas están de acuerdo que la situación en que no encontramos no es por reacción espontanea sino que es el resultado de erróneas decisiones que en vez de encararse se han dejado para “mañana” o para “el que venga detrás.” La más básica económica casera nos dice que

No se puede gastar más de lo que se recibe,

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Lo que se pide prestado tarde o temprano hay que pagarlo.
Esto, por no decir lo que sabiamente dice nuestro jibaro “hay que taparse hasta donde nos de la sabana.”

El seguir construyendo inmensos centros comerciales y lujosos condominios no trae un impacto en nuestra economía sino que es otra manera de gastar. Algunos dirán que es poner a correr el dinero pero no nos damos cuenta de que lo que se vende no se produce en Puerto Rico y por lo tanto no ayuda el desarrollo del país

Pienso que hay que desarrollar una cultura de ahorro e inversión. El ahorro no es tacañería sino la disciplina de saber que si no se puede, no se puede. Esto se aprende desde niño cuando nos enseñan que todo lo que quiero y deseo no lo puede obtener cuando lo quiero. Que las cosas hay que sabérselas ganar y que hay un tiempo para todo. No hay ninguna razón para que la buena ropa de un hermano o primo no me la pueda poner yo. Que lo que a mí ya no me es útil pero está en buenas condiciones puede servirle a otro.

Es entender que el dinero tiene un sentido social y que si se tiene corazón cristiano y sentido de prójimo no se pueden cerrar los ojos amontonando fortuna para gastos extravagantes cuando hay personas de buena voluntad que donan su tiempo, talento y dinero para sostener entidades sin fines de lucro que ayudan a los que de otro modo no tendrían para comer vivir. La economía puede estar muy mal pero pienso que el mal es más profundo cuando se niega la responsabilidad de todos y esperamos soluciones mágicas que nos lleguen de un Reino Mágico.

El señor Arzobispo, Roberto O. González Nieves escribe en su reciento carta pastoral con fecha del 6 de enero del 2015 titulada “La vida buena del Evangelio.” “Cuando decimos que nos damos la buena vida, nos referimos a un talante superficial y material, ligado al egoísmo, al consumismo y al exceso. La vida buena, en cambio, aspira a la modestia, al equilibrio entre los material y lo espiritual, coloca el acento en la calidad de las relaciones humanas y no en las cosas.” (La vida buena del Evangelio #50) Es decir no es lo mismo “la buena vida que al vida buena”. La primera nos lleva al descalabro y a la bancarrota la segunda nos puede sacar del abismo y proponer soluciones adecuadas, serias y formales. Hay mucha gente buen en nuestro pueblo. Personas que a pesar de la situación reinante siguen trabajando con tesón y criando sus familias en valores y principios cristianos y altruistas. Yo voy a ellos porque creo que el futuro y el desenlace final de esta situación en que nos encontramos radica en ayudarles para que encuentren respiro y no se les agobie de tal manera que pierden los deseos de seguir adelante.

El acierto o desacierto en tenerles en cuenta y ayudarles a forjar un futuro mejor para ellos y los suyos será la diferencia en caer en la “bancarrota” o alejarnos de ella.

AGaPito No Lo Sabe: Desmanteló al Gobierno y lo Llenó de Jefes Batateros q No Trabajan Ni Dejan Trabajar
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