El gobernador Alejandro García Padilla tendrá que despedirse de sus expectativas de recaudar $1,200 millones adicionales con una reforma contributiva que ya se sabe no será aprobada como él quiere. La Cámara prepara un proyecto que dejará un recaudo adicional de apenas $500 millones.
De hecho, el único acuerdo entre los senadores rojos es que respaldan el sistema de un IVA, según el presidente de la Comisión de Hacienda en el Senado, José Nadal Power. Durante un caucus de delegación popular sobre el proyecto ayer en la tarde, no hubo acuerdos sobre ninguno de los otros aspectos controversiales de la medida.
Ni la Cámara ni el Senado pueden precisar aún de cuánto será la tasa –o las tasas- que impondrán al consumo y a los bienes. Lo que sí pueden decir es que no será el 16% a una base amplia de bienes y servicios, como quiere García Padilla.
El presidente de la Comisión cameral de Hacienda, Rafael Hernández Montañez, dijo que independientemente de la matemática que hagan para enmendar el proyecto del ejecutivo, la tasa no será de 16% y el recaudo no será de $1,200 millones. Su estimado es que llegará a los $500 millones adicionales a lo que se recauda hoy.
Entonces, se le preguntó si valdría la pena implementar todo un nuevo sistema contributivo -con los costos y ajustes que esto implica- para conseguir $500 millones.
“Es que esto no se puede ver solamente como más recaudo, tienes que verlo como un esfuerzo para simplificar el sistema y activar la economía”, dijo Hernández Montañez. “Va a haber un 100% de crédito para que no sea un gasto en el negocio. Se van a honrar las reducciones en las tasas contributivas a individuos y corporaciones y produces una actividad económica”.
Hernández Montañez aseguró que en las próximas semanas continuará el debate entre el Senado, la Cámara y La Fortaleza sobre cuál debe ser la tasa correcta para esta reforma.
Para Hernández Montañez, la reforma es viable con un compromiso de recortar el presupuesto del próximo año fiscal en por lo menos $300 millones, lo que contrasta con los mil millones que quiere recortar el presidente del Senado, Eduardo Bhatia. Cabe recordar que este presupuesto ya viene con $800 millones adicionales destinados sin remedio al pago de la deuda y para el Sistema de Retiro.
Hernández Montañez recordó que de la reforma ya se eliminó la posibilidad de cobrar un impuesto a la educación privada y a los servicios médicos. Esto fue un recorte de $400 millones en los recaudos que se proyectaban recibir. Reducir el presupuesto en $300 millones, dejaría una necesidad de recoger $500 millones en impuestos bajo la nueva reforma.
Esto dejaría al gobierno con un presupuesto de $9,900 millones.
Pero en el Senado, la matemática es distinta. El presidente del Senado, Eduardo Bhatia, no se ha atado a ningún número ni a ninguna propuesta que no sea la de recortar el gasto gubernamental. Su idea es que el Gobierno debe operar con mil millones menos y durante todo el proceso de vistas públicas, ha convocado a todos los deponentes a proponer estos recortes. Se lo propuso también al Ejecutivo, pero no le han contestado, según admitió esta semana.
Durante la sesión senatorial de ayer, Bhatia dejó saber que este continuará siendo su norte en la discusión de la nueva reforma contributiva,
“Tenemos que bajar el gasto del gobierno”, dijo. “Me están enviando mensajes de las agencias con el presupuesto, diciéndome que busque de dónde recortar. Pues sí”.
La propuesta de Bhatia es que se aumente el recaudo en el consumo, pero no sin una reducción significativa al presupuesto y una reestructuración de la deuda.
Reclamo para reestructurar la deuda
La discusión de la reforma contributiva ha acrecentado además un reclamo de que se reestructure la deuda que tiene el país y que para el próximo presupuesto significa una tajada de más de $600 millones.
En la Cámara, la aprobación de la reforma está sujeta –todavía de manera velada– a que se consideren unos proyectos radicados por los representantes populares Luis Vega Ramos, Luis Raúl Torres y Manuel Nata, para que se reestructure la deuda y se imponga una carga mayor a las grandes compañías que ganan millones aquí y los repatrian de inmediato.
En la sesión senatorial de ayer, Bhatia abogó por esta propuesta y pidió que se negocie por lo menos entre el 15% y el 20% de esta deuda “para posponer este pago”.
El senador popular Ramón Luis Nieves dijo ayer en la sesión senatorial que la reestructuración de la deuda es “el gran elefante blanco” en medio de la discusión de la reforma.
“Esta es la oportunidad para que entendamos que el Puerto Rico que creemos que vivimos ya no existe porque vivimos en un país que dejó de existir y es hora de que tengamos unas nuevas prioridades. Vamos a tener privatizaciones estratégicas de agencias y corporaciones porque no podemos pagar sus gastos”, dijo Nieves. “Las ataduras ideológicas deben ceder al pragmatismo de la crisis”.
“Un proyecto con muchas modificaciones”
El Senado todavía no ha terminado el proceso de vistas públicas sobre este proyecto. La semana que viene todavía hay vistas pendientes con los médicos.
Nadal Power dijo que lo que se decida respecto a la nueva reforma contributiva estará ligado al próximo presupuesto que comenzará a regir el 1 de julio.
“Hay información del presupuesto; la tenemos que tener desde ahora para poder tener una seguridad a la hora de aprobar algo que recaude un poco menos. Aunque a lo mejor no esté todavía en blanco y negro, es necesario saber los detalles del presupuesto desde ahora”, dijo Nadal Power.
Reiteró que el proyecto de reforma que aprobarán en el Senado será uno “con muchas modificaciones” y una tasa más reducida que 16%.
“Mientras más baja la tasa, mejor. Vamos a bajarla todo lo que podamos; obviamente, no se descartan tasas intermedias, pero aunque haya tasas intermedias, la máxima tiene que ser muy por debajo del 16%”, dijo Nadal Power.
¿Qué se va a aprobar?, se le preguntó.
“Se va a aprobar un proyecto con muchas modificaciones y muchas de esas modificaciones van a darse tomando en cuenta lo que se ha expresado en las vistas públicas, incluyendo lo que dijo la alcaldesa de San Juan. El alcalde de Carolina propuso unas alternativas. Yo entiendo que muchas de las preocupaciones que se han traído se pueden atender con enmiendas”, dijo Nadal Power. “Entiendo que el proyecto puede ajustarse a lo que muchos opositores han planteado”.
El proyecto ha tenido, desde el principio, detractores dentro de los partidos, opositores como el PNP y el PIP. El liderato de ambas colectividades acudió a las vistas en la Cámara para rechazar la medida junto al Partido del Pueblo Trabajador.
Pero la medida también tiene oposición dentro del oficialista PPD. Fue esta semana que los alcaldes de San Juan, Carmen Yulín Cruz; el de Carolina, José Aponte Dalmau; el de Caguas, William Miranda Torres; el de Juana Díaz, Ramón Hernández; y el de Isabela, Carlos Delgado, llegaron al Senado para solicitar que no se apruebe el proyecto y para argumentar que ni siquiera con enmiendas sería aceptable.
La senadora independentista, María de Lourdes Santiago, dijo ayer que luego de tantas vistas y tanto rechazo que se ha expresado en contra de esta medida, no puede adelantar cuál será la respuesta del Ejecutivo.
“Como estos procesos no son gobernados por la razón, es muy difícil anticipar lo que va a pasar. Por un lado, está la presión del Departamento de Hacienda y por el otro la percepción de los legisladores de mayoría del costo político que tendría aprobar esto”, indicó la senadora independentista.
Este proyecto ha provocado múltiples marchas al Capitolio, algunas convocadas por políticos, otras por instituciones privadas como los colegios y otras por grupos que se verán afectados, como los médicos. Por la Cámara y el Senado han pasado cientos de deponentes que, en su gran mayoría, auguran un triste panorama económico si se aprueba la nueva reforma. Incluso agencias como el Departamento de Justicia han advertido que el proyecto tiene elementos inconstitucionales, como es la prohibición de que el recibo detalle el pago del impuesto.
Esta semana comenzó frente al Capitolio un campamento levantado por organizaciones como la Unión de Trabajadores de la Industria Eléctrica y Riego (UTIER) y la Central Puertorriqueña de Trabajadores, que han adelantado que permanecerán en la Plaza de la Democracia, frente al Capitolio, hasta que se considere la medida.
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