Una isla al revés

11 de mayo de 2015   Twitter: @Solus_Lupus_PR

Hay veces en las que hay que salirse de la toxicidad de la política y movernos a temas en los cuales hay unos factores sociales que en algunas instancias, se pudiesen interconectar con situaciones políticas. Claro que sacar el factor político de los asuntos sociales resulta casi fútil de origen, ya que como hierba mala, a menos que se saque de raíz, la misma volverá a aparecer donde y cuando menos se desea. Pero aún asi los temas de indole social por interconectados con el asunto político esten, merecen ser analizados.

Ahora bien mis queridos lectores, se que deben estar preguntándo la razón del título de esta columna. Pues bien, el título se debe a que en Puerto Rico, las cosas buenas se llaman malas y las malas se llaman buenas. Por alguna razón, a veces fomentada por los medios de comunicación o por los intereses económicos de grupos mediáticos o de prensa, se pretende fomentar o provocar que se cree una opinión pública que los favorezca a ellos o a sus propios intereses; en la mayoría de las ocasiones, en contra del mejor interés del pueblo. Es por eso que aunque esos medios o grupos con sus millones fomenten un disloque de lo que debería ser y no es; me veo en la obligación de denunciar lo que entiendo es un absurdo y que nada bueno le va a traer a Puerto Rico, ni a nosotros como sociedad.

Como les indiqué, Puerto Rico es una isla en la cual a los buenos se nos acusa o persigue; pero a los malos se les enaltece y se elevan a niveles de héroes. Por ejemplo, hace unos años atrás, el Dr. Vargas Vidot se le expuso ante la opinión pública denunciando malsanamente que alegadamente ejercía como médico sin serlo. Jamás el Dr. Vargas Vidot ha ejercido como médico, pero alguien y algunos medios de prensa sacaron la supuesta noticia con el único fin de hacerle daño a alguien que a mi entender, debería considerarsele para la santidad, no por una labor religiosa, sino por su trabajo social y de salud pública para los deambulantes y los drogadictos. Sin embargo tenemos por otro lado el caso de Oscar López, cofundador del grupo terrorista llamado Frente Armado de Liberación Nacional (FALN), el cual para lograr la independencia de Puerto Rico, tomaron el camino de los ataques dinamiteros y asesinatos de civiles, para de esa forma alcanzar la independencia por medio de crear odio hacia los puertorriqueños en los Estados Unidos. Pues aquí tenemos al liderato imdependentista y del PPD, además del emporio del Grupo Ferré Rangel buscando la excarcelación del mismo e incluso han llegado al ridículo de que Carmen Yulín quiere ponerle el nombre de Oscar López a una plaza de San Juan, y el rector de la UPR de Cayey quiere que lo liberen para que Oscar López ofrezca una charla a los estudiantes y docentes de la UPR. Incluso hay quienes lo tratan como un héroe por hacer lo que hizo por sus creencias pro independencia. Igual pasó con Lolita Lebrón, terrorista que cumplió cárcel por el atentado a tiros en el Congreso y que cuando ella murió, en el sepelio, la prensa colonial de Puerto Rico, casi la puso a nivel de la princesa Diana, diciendo lo noble de su lucha. ¿De cuándo acá los criminales son héroes?

Pero saliéndonos un poco de la política; y como ya ven no es fácil hacerlo; tomemos el caso de los recientes sucesos de los “hit and run” que han ocurrido desde hace unos meses. Las personas golpean y matan a peatones o ciclistas, se van a la huida, y luego de un par de días,  van al cuartel y salen por la puerta ancha sin ser arrestados. Ahora bien, la semana pasada un conductor golpeo a alguien en la 65 de Infantería y se quedó a responder por lo que había sucedido, y cuando llegó la policía y frente a los reporteros que allí estaban, fue esposado y llevado al cuartel como el peor de los delincuentes. ¿Notan algo raro aquí? A los que huyen y no toman su responsabilidad, se les permite ir voluntariamente y no se les arresta, pero un ciudadano responsable decide hacer lo correcto, y se le trata como al peor criminal e incluso se le humilla frente a las cámaras de la prensa.

Pero tomemos otro caso, los acusados por la masacre del Barrio Pájaros, fueron encontrados inocentes en los tribunales locales, y saliendo del tribunal son arrestados por los federales, en donde ellos mismos se declararon culpables. Sin embargo tenemos el caso del niño sobreviviente de la masacre de Guaynabo, en la cual dos maleantes (uno de ellos sobrino de la abogada Mayra López Mulero) asesinan a sangre fría al padre, madre, abuela, hermano de la víctima, lo estrangulan y al darlo por muerto lo tiran por un puente a 50 pies de profundidad, y en el juicio, la abogada Mayra López Mulero que defiende a su sobrino, ella maltrata a la víctima sobreviviente haciéndola ver como que miente, ridiculizándolo, minimizándolo y victimizándolo nuevamente. ¿Es justo que la víctima sea tratada como criminal por una abogada sin escrúpulos que solo se dedica a sacar a criminales de alto perfil del narcotrafico para satisfacer sus fetiches de poseer carros lujosos de cientos de miles de dolares como colección?

Pero también tenemos el caso en la cual (volviendo lamentablemente a la política), el gobierno de turno quiere implementar una educación de perspectiva de genero, en donde a nuestros hijos desde el grado Kinder, se les quiere enseñar que tener otras preferencias sexuales es lo normal. A este esfuerzo se ha unido la prensa colonial y el Grupo Ferré Rangel, llamando a los religiosos o a todos los que estamos en contra de ese esfuerzo del gobierno, como que somos fundamentalistas, e incluso comparando a los grupos en contra, con ISIS, Estado Islámico al que se le atribuyen asesinatos en Medio Oriente por sus creencias fanáticas. Así comparó a los grupos religiosos el senador Miguel Pereira e incluso periodistas del Grupo Ferré Rangel y del desaparecido noticiero televisivo Las Noticias Univisión.

También tenemos el caso del proyecto para legalizar el suicidio asistido, de autoría del representante Ángel Matos. O el proyecto que pretende legalizar la marihuana de autoría de Miguel Pereira, y que incluso llegó a decir que la prostitución debería ser también legalizada. ¿Sabrá él que la prostitución es una clase de trata humana? Con relación a la marihuana, recientemente un grupo de manifestantes a favor de la legalización de la misma, hicieron una actividad frente al Capitolio en la cual, y frente a la Policía de Puerto Rico fumaron marihuana en claro reto a la ley, y los policías nada hicieron, porque recibieron ordenes de senadores y representantes para que no les hicieran nada y no fueran arrestados. O el caso de los “artistas” que en clara violación a la ley y en exposiciones desonestas, se desnudaron en el Viejo San Juan y solo se les amonestó, pero no se les arrestó. O tomemos el caso de los que corren “Four Tracks”, los cuales en violación a la ley, corren por carreteras y expresos, y el Superintendente de la Policía ha dado instrucciones a los policías para que no sean arrestados.

Ahora querido lector, ponganse a pensar. ¿No cree usted que en esta isla a lo bueno se le dice malo, se le ataca o persigue, y a lo malo se le dice bueno, se fomenta e incluso se eleva a niveles de actos heroicos? Dejo en sus mentes esto para que analicen lo que escribo, y lleguen a sus propias conclusiones. Ahora la pregunta fundamental para todos como sociedad es: ¿seguiremos dejando que eso suceda? ¿Podremos hacer algo al respecto? ¿Esta es la isla que le queremos dejar a nuestros hijos y nietos? Conteste usted la pregunta.

Twitter: @Solus_Lupus_PR