WASHINGTON–  El liderato del Congreso prevé aprobar esta semana la reautorización por cinco años de las asignaciones de transporte, que le han garantizado a Puerto Rico alrededor de $130 millones anuales.

Desde 1987, la medida ha tenido que depender de asignaciones temporales como la vigente, que expira al terminar esta semana.

El costo del proyecto ha sido calculado en $300,000 millones.

En vez de aumentar el impuesto a la gasolina, que es de 18.4 centavos por galón, el proyecto depende de iniciativas a corto plazo, como la venta de 66 millones de barriles de petróleo de la reserva estratégica estadounidense y  el uso de agencias privadas para recaudar ciertos impuestos.

La medida fue negociada por los senadores James Inhofe, republicano que preside el Comité de Ambiente y Obras Públicas del Senado, y Barbara Boxer, portavoz demócrata en esa comisión senatorial, y los congresistas Bill Shuster, republicano que dirige el Comité de Transportación e Infraestructura de la Cámara baja, y Peter De Fazio, portavoz de la minoría en el comité cameral.