El gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla, en su segunda visita a Washington en pocos días para buscar la ayuda del Congreso de Estados Unidos (EEUU) que frene la crisis fiscal que sufre la Isla, aseguró que en su administración “se acabo el ‘cash’, ya no hay más gimnasia fiscal que podamos hacer”.

García Padilla ofreció una conferencia de prensa en la capital estadounidense en la que insistió en que “la crisis de Puerto Rico es real”.

La deuda pública total de Puerto Rico se sitúa actualmente en $69,900 millones y ha aumentado a una tasa compuesta de crecimiento anual de 7% desde el año 2000.

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Además, el PIB de la Isla creció a una tasa nominal de 3.6% durante el mismo período.

Como resultado, la deuda pública como porcentaje del PIB aumentó de 58% en 2000 al 100% en 2015.

Al respecto, el mandatario opinó que la crisis es una realidad y “nadie puede con seriedad argumentar lo contrario. Hemos hecho todo lo posible por mantener el país a flote y no cerrar el Gobierno”.

Agregó que “tomamos de unos bolsillos para depositar en otros, aguantamos los reintegros, Puerto Rico ha reducido en 24 por ciento su gasto… pero ya se acabo el ‘cash’, ya no hay más gimnasia fiscal que podamos hacer”.

Para el primer ejecutivo, “si el Congreso no actúa ahora, la crisis fiscal se convertirá en una crisis humanitaria, que estará en manos de congresistas y senadores (de EEUU). Es más económico ahora para el Congreso, después será más caro”.

García Padilla advirtió que el 1 de enero es posible que Puerto Rico no pueda hacer los pagos programados a los bonitas, por lo que insistió en que “necesitamos los mecanismos para sentarnos con los acreedores y ver cómo podemos pagar. Hemos logrado pagar con gimnasia fiscal, pero no tenemos más magia”.

Asimismo, reiteró que “si tengo que escoger entre los bonistas y los puertorriqueños, le voy a pagar a los puertorriqueños”.

En relación a estas expresiones, muchos empleados públicos aún no reciben el bono de Navidad que corresponde legalmente y parte de la población no ha obtenido el reintegro que emite el Departamento de Hacienda, que ha manejado esos fondos para mantener el Gobierno funcionando.

Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes de Puerto Rico, Jaime Perelló, quien acompañó al mandatario en la conferencia de prensa, aseguró que en la Isla “hemos aprobado toda la legislación que como país podemos aprobar. Ahora necesitamos la acción del Congreso de EEUU para que tengamos las mismas herramientas que el resto de EEUU y podamos salir adelante, es un asunto de justicia”.

Según Perelló Borrás, “llegó el día final. Puerto Rico se queda sin dinero no solo para pagar la deuda, sino para los servicios básicos”.

García Padilla ha solicitado al Congreso de EEUU el acceso a un marco legal para reestructurar nuestros pasivos, un trato justo en los fondos de Medicare y Medicaid, las reformas que estimulen la participación de la fuerza laboral y la creación de empleo, medidas fiscales que atraen inversiones para Puerto Rico y una exención a la Ley Jones, como la que beneficia a las Islas Vírgenes de Estados Unidos.