Agustín Santiago / EL VOCERO

El saliente director del Negociado Federal de Investigaciones (FBI), Carlos Cases, aseguró que las pesquisas por corrupción, particularmente, la vinculada a la del caso contra el empresario y amigo del gobernador, Anaudi Hernández Pérez, continuarán su curso y llegarán hasta donde la evidencia los lleve.

“Lo que puedo decir es que la investigación continúa, la fiscal Rosa Emilia Rodríguez fue enfática en la conferencia de prensa (para anunciar el arresto de Hernández Pérez y otras nueve personas) y nosotros en el FBI como ente investigador en ese caso, es que vamos a ir donde quiera que la evidencia nos lleve y vamos a trabajar las fases que sean necesarias y corroborar toda la información que tenemos y la que vaya surgiendo. Se van trabajando fases”, afirmó Cases a la prensa asignada al Tribunal Federal tras ser cuestionado sobre el caso contra Hernández Pérez.

“Me preocupa grandemente la corrupción, esta es la única oficina que tiene tres escuadras de corrupción: la legislativa y gubernamental, la judicial y la policiaca. Las tres escuadras están bien activas con múltiples investigaciones…la corrupción es sistemática, endémica y llegó el momento de que socialmente fue hasta aceptable cierto grado de corrupción. No es hasta que empezamos a destapar este tipo de corrupción, creamos consciencia. La gente en la calle están indignados. Hay personas que no tienen el dinero para poner comida sobre la mesa y vemos personas inescrupulosas con contratos con el gobierno que ni siquiera dan el servicio lo dan adecuadamente”, agregó el funcionario en su oficina, en la cual se notaban algunas paredes sin cuadros, en señal de mudanza.

Cases rechazó que fueran políticas sus expresiones durante la rueda de prensa en la que instó al gobernador Alejandro García Padilla a leer la acusación contra Hernández Pérez, meditar sobre las misma y limpiar la casa de los “parásitos y garrapatas políticas”.

“No veo por qué hubo gente que le pareció como un acto político. Número uno, no soy político, ni pienso ser político. No me interesa la política…le urgí al gobernador y a todos los políticos que leyeran los pliegos acusatorios con detenimiento y tomaran cartas en el asunto para limpiar al gobierno de inversionistas políticos. En ese sentido fui claro que no es momento para que los partidos opositores celebraran o se regocijaran y que podía estar buen rato recordándole los casos de corrupción gubernamental en los últimos 20 años en Puerto Rico. Con eso quise dar un mensaje de que los dos partidos que se comparten el poder político cada cuatro u ocho años, trabajen con el problema de la corrupción”, acotó.

“El llamamiento que hice fue que los tres partidos inscritos en Puerto Rico se deben unir en esfuerzos para combatir la corrupción gubernamental, que de nuevo, viven del inversionísmo político. Estas personas donan en tiempos de campaña para pasar factura cuando los candidatos asumen el poder…es mi estilo, no voy a cambiar por nadie”, añadió.

El funcionario se radicará en Washington durante la primera semana de enero, para desempeñarse como subdirector de la división de Operaciones Internacionales y como parte de su trabajo, dirigirá sobre 63 oficinas de la agencia en diferentes países.

Explicó que tendrá a su cargo investigaciones a nivel internacional, mayormente relacionadas a crímenes cibernéticos, terrorismo y seguridad nacional.

Su sucesor será Douglas A. Leff, quien actualmente dirige la oficina del FBI en Nueva York. Cases destacó que la carrera de Leff se desarrolló mayormente en la Ciudad de los Rascacielos y que es especialista en investigaciones criminales de cuello blanco y lavado de dinero.

“En ese sentido me llena de satisfacción que el programa de investigación de corrupción va a continuar”, mantuvo.

Afirmó que Leff, está al tanto de las tres escuadras de corrupción en la Isla. “Al nuevo director no le chocó (creación de las tres escuadras de corrupción). Viene de Nueva York donde hay mucha corrupción. Le interesó muchísimo…cuando llegue, va a tener conocimiento de la oficina”, señaló Cases.

Comentó que se comunica a diario con su sucesor por texto y correo electrónico sobre las investigaciones que quedan pendientes.

“La oficina queda en buenas manos. Aquí hay un excelente equipo de trabajo, de profesionales, de personal de apoyo, de investigadores que no solo incluye el FBI, sino agencias estatales y municipales. Son capacitados y tengo la confianza de que van a continuar con el trabajo”, expresó.

Aseguró que va a extrañar “todo” sobre Puerto Rico. “Todo. Soy de aquí como el coquí, a pesar de que algunos dicen que no”, apuntó el funcionario quien lleva 24 años en la agencia.
En cuanto a sus logros durante los dos años que estuvo a cargo de la oficina en la Isla, mencionó la radicación de cargos criminales contra Miguel Díaz Rivera, mejor conocido como “Bolo”, y  otras nueve personas por el asesinato del teniente del Centro de Detención Metropolitano de Guaynabo (MDC, pos sus siglas en inglés), Osvaldo Albarati, ocurrido el 26 de febrero del 2013.

Asimismo, destacó el caso contra Carlos Juan Cruz Rivera, mejor conocido como “Cano Llorens”  y el “Violador de Santurce”, quien fue encontrado culpable de tres cargos por el uso de arma de fuego durante la comisión de los “carjackings”.

“Se logró hacer justicia. Este individuo violó un sinnúmero de mujeres, fue encontrado culpable y está cumpliendo. Este caso tuvo un impacto positivo en la comunidad porque sacamos de circulación a un violador de mujeres. Estos casos me llenan más de satisfacción que los casos en donde arrestamos a 150 personas porque son casos de delitos que tienen un impacto en la sociedad”, expresó.

Destacó además la extradición -en septiembre pasado- de Aurea Vázquez Rijos, acusada por el asesinato por encargo de su esposo el comerciante canadiense Adam Anhang. “Ha sido un evento de alto impacto porque el mensaje que se quiere llevar es que no importa donde te vayas a esconder, escapando de acusaciones federales, los vamos a encontrar y los vamos a llevar ante la justicia”, apuntó.