esfumaron, los fondos públicos que se hicieron sal y Agua. AGP administró como Chavista, Igual a Maduro en Venezuela, con Iguales Resultados, AGP ha administrado unos $15 Billones de los que han sido discrecionales su uso en los pasados tres años. Regalos como el de Ricky Martin, inversiones alocadas como las de la caña y el arroz a $.20 la libra; sombramientos y ascensos a Batateros que no Trabajan y se dedican a perseguir y discriminar a los Pro-USA en los Departamentos y Agencias evitando que los que trabajabam ya no trabaja; malgastos y Corrupción Institucionalizada, Generalizada e Impune que ha sido la costumbre del PPD Sin Obras en el pasado Medio Siglo. Por eso AGP Ordenó No Cumplir con la Constitución, ni las Leyes, ni los Contratos; No Pagar a los Suplidores, Ni Reintegros ni los Bonos. Es que «El Me Vale» ha sido la prioridad del PPd llevando a la Quiebra al Gobierno y a Miles y a Miles de Familias Puertorriqueñas. AGP sólo Sabe Mirar para El lado, Echar Cul[as a Otros y Presentar Excusas. Por eso los pocos Miles de Anaudises están Contentos y los Millones de Puertorriqueños están Tristes.}
El gobernador Alejandro García Padilla, dejó claro ayer que el impago está a la vuelta de la esquina y será la única opción de Puerto Rico tras la determinación del Congreso de no tomar acción para ayudar a atender la crisis fiscal.
“La realidad es que no podemos pagar nuestra deuda. No podemos pagar nuestra deuda. Al principio de este mes anuncié que el Gobierno se verá obligado a un impago de la deuda”, sostuvo el primer mandatario. “Vamos a impagar, eso es un hecho”, sentenció.
García Padilla admitió que está decepcionado tras la determinación del Congreso de no darle paso a las legislaciones sobre Ley de Quiebras y Junta de Control Fiscal federal en el “ómnibus” presupuestario.
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“Estamos tratando de evitar el incumplimiento de 1 de enero, pero si me dieran a escoger siempre voy a elegir puertorriqueños. Voy a ser demandado. La economía irá a la parte inferior de nuevo. No hay dinero y no tengo una máquina de impresión”, reconoció.
Del mismo modo, el primer mandatario denunció que el problema no comenzó en la Isla, sino desde el Congreso, cuando decidieron excluir a Puerto Rico de la Ley de Quiebra federal, agregó que gran peso de la culpa también recae en los acreedores.
“En años recientes los problemas económicos de Puerto Rico han estado es los noticiarios y muchos han reseñado los problemas que nuestra gente enfrenta. Lo hemos dejado muy claro necesitamos ayuda. Planifiqué este viaje con optimismo, esperando que hasta hoy el Congreso nos de las herramientas que necesitamos”, detalló.
García Padilla sostuvo que el Gobierno ha tenido que, entre otras cosas, establecer medidas drásticas, pero confía en que se le brindará las herramientas necesarias al País para evitar un impago, el cual redundará en litigaciones costosas.
“Ayer (martes), el Congreso dejó pasar la oportunidad de extenderle a Puerto Rico una medida legal que nos hubiera ayudado. No estamos buscando un rescate, Puerto Rico no ha pedido un rescate, estamos pidiendo justicia. La justicia ha sido denegada”, denunció.
Además, sostuvo que la pregunta no es si Puerto Rico podrá cumplir con sus obligaciones económicas, sino cómo el Congreso ayudará al País a no incurrir en un impago.
“Será un proceso caótico o será un proceso ordenado. El Congreso proveerá un método legal para irnos a quiebra que no cuesta nada, o permitirá que los puertorriqueños paguen las consecuencias, y provocará que más personas abandonen la Isla, añadiendo aún más al por ciento de personas que se han ido”, dijo.
Del mismo modo, en su discurso admitió que ha solicitado al Congreso el acceso a un marco legal para reestructurar la deuda y un trato justo en los fondos de Medicare y Medicaid.
Las expresiones del gobernador surgieron durante un conversatorio organizado por The National Press Club en donde habló sobre el estado de la economía de la Isla. El mensaje fue el primer evento público al cual asistió el gobernador luego de anunciar que no buscará la reelección.
García Padilla explicó que ha estado negociando con los tenedores de deuda e instando al Congreso de Estados Unidos para que ayude a la Isla.
Para el gobernador esperar la asistencia del Congreso es la única opción viable, mientras tanto le parece que para muchos congresistas los puertorriqueños solo son buenos para enviar donaciones políticas.
Sobre las consecuencias de no recibir un rescate fiscal, el primer mandatario detalló que será demandado, el gobierno va a cerrar, ya que no tienen el dinero para ofrecer los servicios básicos. “Yo pedí las herramientas porque es un problema de Puerto Rico y queremos resolverlo, pero si no me dan las herramientas no podría hacer nada”.
Mientras, el congresista demócrata José Serrano celebró que se impidió establecer una Junta de Control Fiscal federal que absolviera los poderes del Gobierno de Puerto Rico y se mostró confiado en que la medida que tiene que presentarse para marzo próximo se incluyan otros beneficios para Puerto Rico.
“Pudimos impedir que llegara un Junta de Control que le quitara el poder a Puerto Rico. No sé si vendrá alguna clase de junta, pero no creo que vendrá una junta que le quite el poder a la Constitución puertorriqueña. Esto es una crisis que lleva años, y no se va a resolver en dos meses”, dijo el congresista en entrevista radial (NotiUno).
Serrano comentó que el hecho de que no se incluyera el Capítulo 9 de la Ley de Quiebras para Puerto Rico es otra victoria momentánea para los dueños de los fondos buitres y añadió que todavía los puertorriqueños pueden aguardar sus esperanzas en el Congreso.
Paola Arroyo Guzmán, EL VOCERO
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on de USA?
Poco tiempo para el “superbono”
Con el hundimiento de las mayor parte de las estrategias del gobierno para manejar la deuda de sobre $70,000 millones, está por verse si el salvavidas de un “superbono” que todavía busca el equipo económico del Estado Libre Asociado (ELA), cuenta con alguna posibilidad de mantenerse a flote.
De acuerdo con el análisis de economistas entrevistados, es evidente que en dos semanas para el vencimiento de $902.5 millones en principal e intereses, no estará encaminada ninguna negociación o acuerdo con acreedores para evitar el impago en alguno de los 18 emisores del ELA, amparada en la compleja estructura del “superbono”.
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Los economistas Vicente Feliciano y Antonio Fernós Sagebién, coincidieron por separado que si a la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) le ha tomado más de un año iniciar el proceso de acuerdos con acreedores y encaminar una negociación que todavía no se concreta, el poder alcanzar un resultado similar con el “superbono” es una tarea “titánica”.
“El superbono es una gran idea para que sea implantada por un tribunal dentro del programa del paquete de asistencia fiscal de Casablanca. Pero pensar que vamos a llegar a acuerdos con una gama de acreedores en las próximas dos semanas, a la luz de la negociación de la AEE, es poco probable”, sentenció Feliciano.
Explicó que un acuerdo con el superbono, el cual busca crear un solo instrumento donde cada uno de los acreedores de los emisores del gobierno pueda acceder al tomar diferentes niveles de recortes de deuda, plantea serios encontronazos entre bonistas. “Significa ponerse de acuerdo en cuánto voy a ceder en relación a los otros, y eso es casi la función de un tribunal de quiebras”, indicó Feliciano.
El economista mencionó que no se trata de un asunto de buena voluntad entre las partes, porque en casos como los acreedores de la Corporación del Fondo de Interés Apremiante (COFINA), ya han reiterado estar seguros de su fuente de repago y no ven un problema de liquidez. Al llegar un impago en bonos garantizados, entonces estos acreedores podrán reclamar en tribunales identificar los recursos para sus pagos y un juez determinará si incluso los recaudos de COFINA pueden estar disponibles para pagar bonos de las obligaciones generales (GO´s).
“Por más buena voluntad que se tenga es extremadamente complejo. Todo el mundo va a salir con el mismo bono en condiciones diferentes. No es una negociación entre Puerto Rico y un deudor como el caso de la AEE”, analizó Feliciano, y añadió que “hay unas probabilidades ínfimas” de evitar un impago y sus consecuencias con el “superbono” en el corto plazo.
Los vencimientos por $902.5 millones serán el próximo primero de enero y ayer en una exposición del gobernador Alejandro García Padilla en Washington, dijo que entre enero y mayo podría ocurrir un nuevo impago de la deuda pública.
Un día antes y en declaraciones escritas, la presidenta del Banco Gubernamental de Fomento (BGF), Melba Acosta Febo, indicó a EL VOCERO que esta semana siguen los trabajos para la negociación de la deuda con los acreedores, con reuniones en Nueva York “con nuestros consultores para continuar revisando la estructura del superbono”.
Al observar la situación, a la luz de la no aprobación de medidas contundentes en el Congreso estadounidense, el economista Fernós Sagebién, quien también es analista financiero de la firma REOF Capital, estimó que “estamos en la cuenta regresiva de un reloj que no sabemos cuánto nos queda, y estamos en un abismo que no sabemos cuán profundo es. Este es el principio del fin”.
No le ve muchas posibilidades al “superbono” como mecanismo en el corto plazo para evitar un impago en enero y advirtió que con el incumplimiento y los reclamos judiciales que surgirán de inmediato “hay unos retos constitucionales grandes si los bonistas reciben sus pagos antes que se cumplan las necesidades de índole social en Puerto Rico”.
“Aquí estamos navegando en aguas nunca antes navegadas y nadie sabe qué va a pasar. Nadie sabe dónde estamos parados y esto dejó de ser un tema económico financiero y ya es una crisis de índole política en términos de la relación entre dos naciones”, opinó el también profesor.
Fernós Sagebién dijo que en este momento “es más importante que la gente entienda la estructura de la deuda pública que dejarle saber cuáles son los esfuerzos, porque si no entiende el problemas es más difícil venderles las posibles soluciones. Esto es lo que tenemos por esperar tanto en una posición real de lo que debíamos estar haciendo”.
Abundó que “Puerto Rico se metió solo en este problema y tiene las herramientas para salir. Uno tiene que ser responsable y subir el nivel de la ejecución (de decisiones administrativas)”. También se cuestionó “dónde están los responsables y los miembros de las juntas de directores que aseguraron que habían fuentes de repago donde no lo había”. Mencionó que falla la credibilidad y prevalece la impunidad.
Carlos Antonio Otero, EL VOCERO
Periodista con 24 años de experiencia en la cobertura de temas económicos, política, tribunales y cultura en diferentes periódicos y revistas. Estudió periodismo en la Universidad del Sagrado Corazón e historia y cultura puertorriqueña en el Centro de Estudios Avanzados de Puerto Rico y El Caribe.
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