Una residencia de Torrimar fue anoche escenario, no sólo de una ruidosa actividad política en honor de Alejandro García Padilla en su ruta a las elecciones del año próximo, sino que sirvió de marco para que el candidato del Partido Popular a la gobernación lanzara su candidatura para  los comicios del 2016, para quedarse en La Fortaleza por un segundo término.

Según un vecino que prefirió mantenerse en el anonimato, el sosiego nocturno de ese exclusivo sector de Guaynabo comenzó a romperse al filo de las siete de la noche, con el murmullo creciente de las conversaciones de decenas de personas que se dieron cita en la residencia cercana a la Parroquia San Juan Evangelista para aclamar a su líder, quien fue presentado estruendosamente a través de potentes altoparlantes como “el próximo gobernador de Puerto Rico”.

Pasadas las 8:30 p.pm., García Padilla tomó la palabra y, luego de agradecer “a todas esas personas” que estaban ahí “porque quieren un cambio en Puerto Rico”, inició un discurso de unos treinta minutos en el que mencionó que  su hija “cumplirá diez años el próximo año, en el año de las elecciones”.

“Justamente cuando ella cumpla 18 años  -agregó-, yo estaré comenzando mi segundo término como gobernador de Puerto Rico y ella estará solicitando ingreso en la Universidad de Puerto Rico…”

El discurso de García Padilla siguió –comentó el vecino en tono molesto- “el camino trillado de la demagogia”, con frecuentes interrupciones por “los aplausos y vítores” de los invitados a la festiva actividad, cuyo fragor –calificado como “alteración a la paz” por el testigo- se prolongó hasta cerca de la medianoche.

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