capitolio

Antes del huracán María, el Estado Libre Asociado de Puerto Rico (ELA) estaba prácticamente destruido. Luego de varias derrotas en los tribunales federales y la legislación e implementación de la ley Promesa, el ELA estaba básicamente enterrado, muerto y desmembrado.

Los populares, aun con un partido invadido por independentistas llamados “soberanistas”, no tenía para dónde ir; incluso hoy muchos piensan que están sin ideología, sin los poderes absolutos del ELA, sin esa “autonomía” ficticia, sin un norte, sin rumbo de qué ofrecer para las elecciones de 2020.

Ahora bien, en los pasados meses los populares se han unido; se han unido para “reparar” el ELA, para transformarlo, para ROBUSTECERLO aunque sea con más mentiras, más engaños y más trucos de propaganda.

Peor aun, “estadistas” electos en todas las esferas le han seguido el camino a los populares haciéndoles coro al aprobar proyectos que le dan vida a excepciones que NINGÚN estado de la nación norteamericana tiene.

Comenzamos en la administración del exgobernador Luis Fortuño con las leyes 20-22 para convertirnos en un paraíso fiscal; o sea, queremos ser el estado 51 de la nación americana, queremos que nos den más fondos federales, fondos provenientes de los que pagan impuestos en los Estados Unidos para pagar Mi Salud, y nosotros aquí les decimos “vengan para acá y evadan las contribuciones de quien nosotros queremos que nos manden más dinero”.

Las leyes 20-22 como las 936 son posibles única y exclusivamente con el ELA, aun bajo la ley Promesa. Eso sin contar con los impuestos a las compañías “foráneas” y la ley 154 que nos dio casi 2 billones de dólares anuales (con B de Bruto, Burro y mal administrador) para gastar y fortalecer al ELA.

Luego vino Alejandro García Padilla y nos declaró en QUIEBRA. Si algún gobernador le ha dado una estocada casi mortal a la ESTADIDAD ha sido Alejandro García Padilla con el ME VALE y con el NO PUEDO PAGAR.

Hoy Puerto Rico lleva casi 40 meses sin pagar la deuda y tiene más de 9 billones de dólares en el banco, sí con B de Bruto, Burro y mal administrador. ¿Y qué con el que NO PUEDO PAGAR?

Alejandro no solo atrasó la estadidad, sino que también se llevó por el medio al ELA, lo hirió mortalmente; algunos pensamos hasta hace pocos meses que lo había matado.

Pero hay animales que resucitan, que se reinventan, hasta que se puedan convertir en útiles para una causa especifica: el evitar a toda costa la estadidad.

Después de Alejandro vino esta administración y Donald Trump.

Con ello vino la reforma contributiva federal y la pedidera de excepciones TIPO ELA. En esta tanto populares como “estadistas” se unieron para ir al Congreso a pedir un nuevo ELA con impuestos que beneficien a unos pocos.

El senador Orrin Hatch dijo: “Puerto Rico vino a pedir algo que no tiene NINGÚN ESTADO”. Y allí estábamos nosotros en primera fila pidiendo una vez más ser diferentes a los estados. Lo interesante de todo esto es que no es un gobierno popular quien estaba al mando.

Y luego vino el huracán María y la movilización para que nos quiten la ley de cabotaje.

La ley de cabotaje es una ley proteccionista, parecida a cuando Rafael Hernández Colón compró las Navieras y las protegió contra la competencia, lo cual las llevó a la quiebra.

Si queremos ser estado, el estado 51, eso viene con la ley de cabotaje, eso viene con la marina mercante de los Estados Unidos.

La lucha contra la ley de cabotaje es lo mismo que Paz para Vieques, es lo mismo que el Me Vale, es una cuestión completamente ideológica que nos separa más de los Estados Unidos, que nos haría más “independientes”.

Y como es de costumbre, recientemente fueron allá con los gobernadores del sur a pedir OTRAAA excepción para Puerto Rico con la ley de cabotaje. Allá fueron populares y estadistas a pedir más poderes para el ELA, poderes que lo resucitan.

Volvemos a lo mismo, pedimos más excepciones que lo que pedimos por la ESTADIDAD; pedimos más por ser diferentes que por ser IGUALES.

Dentro de todo esto los demócratas en el Congreso liderados por Nancy Pelosi expresaron lo siguiente: “Desde el punto de vista del Congreso no creemos que haya sido una limitación, al momento de obtener fondos para mitigar los desastres naturales de 2017, la falta de representación con voto de los delegados de Puerto Rico e Islas Vírgenes”.

También para seguir resucitando al ELA se habla del voto presidencial, tanto por el PPD como por los demócratas.

Como podemos ver, con los demócratas no necesitamos representación en el Congreso de los Estados Unidos, al igual que necesitamos ser diferentes con la ley de cabotaje, los impuestos federales y coger el Frankenstein que tenemos y resucitarlo.

A los cobardes, a los ELA-estadistas, acaben y déjennos votar Estadidad Sí o No. Juzgue usted.

Locations