Estadidad Sí – Thomas Rivera Schatz – Presidente del Senado

10/27/2019 | Filed under: Campaña | Posted by: Francisco

Estadidad Sí

Thomas Rivera Schatz >Presidente del Senado
25/10/2019

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El Directorio del PNP aprobó una resolución de la compañera Jenniffer González para realizar un plebiscito “Estadidad Sí o No” el mismo día de las próximas elecciones generales.

Distinto a lo publicado en algunos medios noticiosos, ese plebiscito no requiere aprobación del Congreso federal. Desde 2014, el Congreso aprobó la ley 113-76, conocida como “Consolidated Appropriations Act” autorizando este plebiscito y hasta la aportación de $2.5 millones de fondos federales para contribuir a su realización. Este será el primer plebiscito de estatus político de nuestra historia con aval congresional y con fondos federales.

Esa ley que continúa vigente fue la respuesta del gobierno federal a los resultados del plebiscito de 2012 en que el 54% de nuestros electores rechazó de manera específica el actual estatus colonial y territorial. Puerto Rico sabe que el ELA fracasó y no es alternativa de futuro ni progreso. A su vez, el 61% de los electores votó por la estadidad como la solución final y permanente para la descolonización. En el plebiscito de 2017, nuestro pueblo reiteró ese reclamo por la estadidad.

En el plebiscito de 2012, la estadidad compitió en la papeleta con otras fórmulas de estatus político. Los opositores de la estadidad, a falta de votos para ganar, han procurado fabricar interpretaciones para bloquear la expresión democrática de la mayoría de los puertorriqueños que votaron. Eso incidió en la aprobación de la ley en el Congreso en 2014.

Nuestra comisionada residente está comprometida con gestionar en el Congreso y en el Departamento de Justicia federal que ese plebiscito se realice conforme a esa ley federal de 2014; y que se desembolsen los fondos federales autorizados por esta. Además, está comprometida en que los resultados de ese plebiscito con auspicio federal se hagan valer mediante legislación del Congreso que admita a Puerto Rico como el nuevo estado de la Unión.

La legislación para instrumentar este plebiscito deberá presentarse y aprobarse en la Asamblea Legislativa de Puerto Rico. Así lo reconoció el Congreso cuando aprobó la ley de 2014. Además, cuando el Congreso aprobó la ley Promesa en 2016, en su Sección 402 reiteró lo siguiente: “Sección 402. Derecho de Puerto Rico a determinar su futuro estatus político: “Nada en esta Ley será interpretado para restringir el derecho de Puerto Rico a determinar su futuro estatus político, incluyendo la realización del plebiscito según lo autorizado por la Ley Pública 113-76, 2014”.

En el “Report of the Committee on Appropriations” de la Cámara federal, correspondiente a esa ley federal de 2014, se delinearon las condiciones para la utilización de esos fondos federales. La Asamblea Legislativa de Puerto Rico aprobará la ley de plebiscito. Por su parte, el secretario de Justicia federal canalizaría los $2.5 millones a través de la Comisión Estatal de Elecciones una vez evalúe y certifique que el contenido de la papeleta a presentarse a los electores en esa consulta “no es incompatible con la Constitución, las leyes y las políticas de los Estados Unidos”. Nuestro gobierno no caerá en el juego de las dilaciones. Nuestro gobierno actuará aunque otros se crucen de brazos o se hagan los desentendidos.

La estadidad es el reclamo vigente del pueblo de Puerto Rico desde 2012. La papeleta de este plebiscito debe contener ese reclamo escogiendo entre Estadidad Sí o No. Esto facilitaría el trámite del proyecto que presentaremos; pues sería la misma papeleta que el Congreso y la Casa Blanca aceptaron para otorgar la estadidad a Hawaii, Alaska y muchos otros antiguos territorios coloniales de Estados Unidos que hoy son estados.

La colonia, la independencia y la libre asociación no tienen apoyo electoral mayoritario a partir de 2012. En el plebiscito de 2017, sabiendo que no tienen votos para ganar en las urnas, se “juyeron”. Está demostrado que las peticiones de esos grupos son inaceptables para el Congreso federal. Su único propósito es presentar definiciones o indefiniciones absurdas de sus respectivas alternativas para provocar controversias aquí, en Washington DC y así entorpecer que Puerto Rico se exprese en las urnas. Los antecedentes confirman esa agenda de entorpecimiento. Los separatistas de la independencia y la libre asociación, por ejemplo, piden la república independiente con fondos federales, ciudadanía americana y otros guindalejos. Los colonialistas, por su parte, nunca se ponen de acuerdo, prometen redefinir el ELA y la nueva definición tampoco aparece.

El día de las próximas elecciones tendremos la gran oportunidad para sacar a Puerto Rico de la humillación, las desventajas, la desigualdad y de las penurias socioeconómicas del colonialismo. Con este plebiscito federal en las elecciones de 2020, tenemos la oportunidad de hablarle claro a Washington DC: Estadidad SÍ.