Puerto Rico ha experimentado períodos de actividad económica y crecimientos significativos en los pasados tres años. En este contexto, la continuidad de los planes y estrategias de desarrollo económico encaminadas, se vuelven esencial para el bienestar y la prosperidad de la Isla a largo plazo.

Es importante destacar que Puerto Rico tiene una economía diversificada que abarca sectores como la manufactura, el turismo, la agricultura, las ventas al detal, la exportación y los servicios, incluyendo los financieros, entre otros. Sin embargo, para mantener un crecimiento económico sostenible, es crucial para la continuidad en la inversión en estos sectores, la certeza de que los planes no se alteren con los cambios de administración. De hecho, el enemigo más grande de la inversión es la incertidumbre.

Un ejemplo es el sector manufacturero farmacéutico de Puerto Rico. Durante los pasados 60 años, la Isla ha sido el centro de producción para estas empresas. El aumento de la inversión ha dependido en gran parte de que no cambiemos las reglas cada cuatro años, porque las veces que lo hemos hecho, hemos visto reducciones significativas en las expansiones y la inversión.

Para mantener la competitividad, la inversión y el crecimiento económico, es esencial que Puerto Rico mantenga la continuidad en sus planes y estrategias. El desarrollo económico no es un plan cada cuatro años.

Otro aspecto crucial es la educación y el desarrollo de las habilidades de la fuerza laboral. La continuidad en la inversión de la educación es fundamental para asegurar que la fuerza trabajadora de Puerto Rico esté preparada para los desafíos económicos y tecnológicos del siglo XXI. Esto implica la mejoría constante de los sistemas educativos y la capacitación continua para los trabajadores. Una fuerza laboral educada y capacitada es un activo valioso que atraerá a empresas y fomentará el crecimiento económico a largo plazo.

El turismo también desempeña un papel crucial en la economía de Puerto Rico. La Isla es conocida por su belleza natural, cultura vibrante y rica historia. La continuidad en el desarrollo del turismo implica la preservación de los recursos naturales y culturales, así como la inversión en infraestructura y promoción. El turismo sostenible puede generar ingresos y empleos de manera constante, beneficiando a las comunidades locales y la economía en general.

La infraestructura es otro componente esencial para el desarrollo económico continuo de Puerto Rico. Carreteras, puertos, aeropuertos y redes de energía confiables son fundamentales para la competitividad y la resiliencia de la Isla. La continuidad en la inversión de la infraestructura no solo mejora la calidad de vida de los residentes, sino también atrae inversiones y apoya el crecimiento económico a largo plazo.

Estos pasados tres años Puerto Rico ha experimentado avances significativos en múltiples áreas de la economía como desempleo, participación laboral, manufactura y turismo. En fin, Puerto Rico está listo para embarcarse en un proyecto de desarrollo económico y prosperidad.

Existe un plan a mediano y largo plazo que está funcionando y su éxito depende de la continuidad de los esfuerzos en esa dirección. El plan es claro, la visión y liderato del ejecutivo son evidente. No permitamos que la falta de continuidad detenga el desarrollo económico.