El secretario del Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), Rubén Hernández Gregorat, inspeccionó hoy los trabajos de instalación de vigas de acero del proyecto del Metro urbano.

Hernández Gregorat realizó la inspección en compañía de un grupo de ingenieros de la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT).

Durante la visita constató los avances de las obras que se construyen con una inversión de más de $90 millones y que estarán listas para el tercer trimestre de este año.

La instalación de las vigas de acero comenzó durante la mañana y se extendió hasta horas de la tarde.

Las vigas se colocaron en dos columnas: una ubicada cerca de la marginal Norte de la autopista José de Diego o PR-22, y la otra en la rampa de la salida hacia la PR-5.

La estructura instalada, que es parte del puente, servirá para la construcción de las losas de hormigón que serán parte del carril del Metro urbano.

“Como parte de la preparación de estos trabajos el pasado miércoles, 21 de marzo, se cerró un carril de la PR-5 en dirección a Bayamón y la salida 10 de la PR-22”, dijo el titular de Obras Públicas.

El funcionario informó que los conductores que transitan por esta vía podrán usar como ruta alterna las carreteras PR-167 (Río Hondo), PR-177 o PR-165. Asimismo, indicó que el área está debidamente rotulada y se han tomado las medidas de seguridad para dirigir el tránsito.

Con respecto al proyecto, Hernández Gregorat expresó que “el Metro urbano es un sistema de transporte colectivo que conectará a los residentes de Toa Baja y pueblos limítrofes con la Estación Bayamón del Tren Urbano, un recorrido que tomará aproximadamente 20 minutos”.

Según el secretario, “hoy día ese viaje en automóvil puede tomar hasta una hora y media durante las horas de mayor tránsito.

“Sin duda los conductores verán un ahorro significativo en tiempo”, resaltó, y añadió que el Metro urbano aliviará la congestión vehicular en la autopista PR-22, por la cual transitan diariamente sobre 130,000 vehículos.

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