Clark Martínez saltó a la palestra pública por celebrar su fiesta de jubilación de la AEE en un costoso restaurante en Condado junto a suplidores de combustible y otros empleados de la corporación pública.
Sin embargo, fuentes de EL VOCERO aseguran que entre algunos empleados de la AEE, los laboratorios y los suplidores, Clark Martínez es muy conocido, al punto que se ganó el apodo de “El Emperador”.
Clark Martínez protagonizó múltiples señalamientos sobre deficiencias en la Oficina de Combustibles en por lo menos dos informes del Contralor, analizados por este rotativo, que datan de 2002 y 2012.
Otro dato curioso es que administración tras administración, los directores ejecutivos, incluyendo al actual director Juan Alicea Flores—durante un periodo interino—estuvieron al mando de la corporación pública sin tomar acción aparente sobre los señalamientos del Contralor relacionados a la compra de combustibles. Alicea fue director interino desde el 16 de octubre de 2008 hasta el 12 de enero de 2009.
En 2002, la Oficina del Contralor señaló la ausencia de contratos e irregularidades en los pagos efectuados a los laboratorios privados a cargo de analizar el combustible. La Oficina de Combustibles tiene a su cargo la solicitud de servicios de laboratorios privados, según el informe.
Además, el informe del Contralor dejó al descubierto que no existía evidencia de que los servicios de los laboratorios fueron prestados en el 69 por ciento de las facturas.
Asimismo, los auditores del contralor identificaron que desde 1998 al 2000, la AEE pagó a los laboratorios privados $1.7 millones por servicios facturados, pero nunca retuvo el 7 por ciento de contribuciones sobre ingreso, lo que “privó al Departamento de Hacienda de recibir $121 mil por las retenciones correspondientes”.
El entonces director ejecutivo, Héctor Rosario, indicó al Contralor que “se están tomando medidas para corregir las deficiencias”. Sin embargo, posterior a este informe, Clark Martínez continuó en su cargo.
Contralor alertó sobre esquema
En 2012, otro Informe del Contralor, detectó problemas en los Certificados de Calidad del combustible entregados por los suplidores a la AEE.
En enero de 2009, un laboratorio privado emitió un Certificado de Calidad del combustible que la AEE había recibido tres meses antes, aunque se supone que la corporación pública no acepte el combustible sin este certificado.
“Esto puede dar margen para que se adquieran combustibles que no cumplan con las especificaciones de calidad requeridas por la AEE, lo cual tendría un efecto adverso a los intereses de la misma, al ambiente, a la salud del Pueblo y a la imposición de multas por parte de la EPA. Además, puede ocasionar que se incurra en desembolsos indebidos al pagarse por un combustible de inferior calidad al precio del combustible requerido”, reza el Informe del Contralor de 2012.
Otras de las irregularidades señaladas bajo la ejecutoria de Clark Martínez, según el Contralor, es que pasaban entre 36 a 55 días para que se notificara el recibo de combustible a la central generatriz, a pesar de que se supone que se informara inmediatamente.
Al mismo tiempo, el informe del Contralor detalla que la Oficina de Combustibles de la AEE, no exigía que el suplidor especificara “elementos tomados en consideración para establecer el costo por barril de los combustibles”.
También, Clark Martínez, aprobó trámites de pago de $9 millones y $125 mil a suplidores, a pesar que solo el director ejecutivo puede aprobar este tipo de trámite cuando la factura sobrepasa los mil dólares, de acuerdo al Contralor. En el momento de los hechos, Alicea Flores y posteriormente Miguel Cordero fungieron como directores ejecutivos.
¿Quién ocupará la silla de Clark Martínez?
Con la jubilación del administrador de la Oficina de Combustibles, William Clark Martínez, todo apunta a que el ingeniero gerencial principal, Edwin Rodríguez, ocupará su silla. Sin embargo, una fuente de EL VOCERO aseguró que se barajean fichas desde La Fortaleza porque, supuestamente, Rodríguez está identificado con el Partido Nuevo Progresista (PNP).
Rodríguez es un empleado con mucha experiencia en el área de compra de combustible, pero también es conocido como “El Mago” dentro de la AEE, porque “ha seguido de cerca el trabajo de Clark Martínez”, aseguraron las fuentes de este rotativo.
Otra fuente aseguró que Rodríguez fue uno de los funcionarios que junto a Clark Martínez objetó el informe de Auditoría Interna de la AEE de 2010, que señalaba irregularidades en el análisis de calidad de combustible, y que nunca fue presentado a la Junta de Gobierno al ser sustituido por otro informe redactado por ellos mismos.
“Es una persona muy experimentada y se supone que le siga por experiencia a Clark, pero conoce todo el esquema y sería perpetuar el problema”, sostuvo una de las fuentes que pidió mantenerse en anonimato.
La fuente sostuvo que será muy difícil erradicar el problema de falta de control en el análisis de calidad y volumen de los combustibles, hasta tanto no se equipe a la AEE de un laboratorio bien capacitado y se prescinda de laboratorios independientes, o al menos se contraten laboratorios acreditados.
En septiembre de 2002, el Departamento de Justicia federal acusó a Richard Kaminski, presidente del laboratorio Caleb Brett, y logró su convicción por obstruir la justicia al mentir ante investigadores federales sobre su rol en la alteración de resultados de laboratorio relacionados a combustibles derivados del petróleo.
Según el Departamento de Justicia federal, Kaminski mintió al negar que pidió a sus empleados cambiar los números de los resultados de las pruebas analíticas “para hacer a los clientes de Caleb Brett felices”. Kaminski fue sentenciado a 11 meses de prisión. Asimismo, el gerente de operaciones y el gerente del laboratorio se declararon culpables.
El fraude Caleb Brett llegó hasta Puerto Rico desde 1988 hasta 1997, cuando Kaminski obligó a sus empleados a alterar los resultados del combustible #6 para beneficiar a su cliente, la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).
Tal y como adelantó EL VOCERO el lunes, previó a la convicción de los empleados de Caleb Brett, la Oficina del Contralor de Puerto Rico, había reportado en mayo de 2002, que la Corte Federal de Apelaciones del Primer Circuito de Boston emitió un fallo a favor de una empleada del laboratorio por despido injustificado. La empleada radicó la demanda en 1999.
En el proceso judicial se estableció que el laboratorio había requerido, incluyendo a esta empleada, la alteración de resultados de hasta 600 pruebas químicas incluyendo las de la AEE.
No obstante, pese a esta información, en junio de 2001, los funcionarios de la AEE, aceptaron ante el Contralor que no habían realizado gestiones para obtener copia de los documentos y la evidencia sometida en la demanda “que permitiera a la corporación evaluar la misma y tomar las acciones pertinentes para proteger adecuadamente los intereses de la AEE y del Pueblo de Puerto Rico”.
Durante el periodo auditado por el Contralor, el administrador de la Oficina de Combustibles era William Clark y los directores ejecutivos de la AEE fueron Miguel Cordero y Héctor Rosario.
EL VOCERO / Archivo
La AEE tiene varias fuentes importantes de costos, el combustible, la compra de energía, el servicio de la deuda y los gastos de compensación. La compra de combustible ascendió a $2.9 billones ($0.16 por Kvh de las ventas), la compra de energía a $684.1 millones ($0.038 por Kvh), los intereses a $382.6 millones ($0.021 por Kvh) y la nómina total fue $365.0 millones ($0.02 por Kvh) a junio 30 de 2012. Los gastos de combustible reflejan una política energética equivocada de la AEE desde los inicios de la crisis energética en los años setenta. La compra de combustible es el resultado de legislación federal que obligo a la AEE a comprar energía a terceros y de paso romper el monopolio en la producción de energía eléctrica. El servicio de la deuda refleja los beneficios de ser una corporación del estado que puede ir al mercado exento de deuda municipal de los Estados Unidos. Los gastos de nómina solo reflejan una parte de los costos de compensación que la gerencia ha regalado a los empleados a cambio de compartir los beneficios.
En adición a la nómina que asciende en promedio a $43,119, los empleados reciben otros beneficios en la AEE. Las aportaciones al plan de pensiones son en promedio de $12,935 anuales, el plan médico ($1,000 mensuales), vacaciones regulares (30 días), vacaciones por enfermedad (19 días), días de fiesta (23 días) y bono de navidad (un mes de sueldo o $3,593) incrementan la compensación anual promedio a $70,607. Cuando multiplicamos esta cantidad por los 8,465 empleados en la AEE el costo de mano de obra asciende a $597.7 millones. Esto representa $0.325 de costo promedio por Kvh vendido.
Sin embargo, los costos de mano de obra no terminan aquí. El valor presente de los pagos futuros al plan de pensiones asciende a $1.6 billones. El valor presente de los pagos a los retirados en adición a la pensión en el 2010 eran $600 millones. El déficit actuarial del plan de pensiones de la AEE era $1.7 billones a junio 30 de 2012.
La AEE tiene estimado vender 18,199 kvh en el 2014, de los cuales 14,590 kvh son de su producción (el 80.2 por ciento) y 7,708 son comprados (el 1
9.8 por ciento). En total la AEE tiene 8,465 empleados de los cuales 5,440 están empleados en la generación, transmisión y distribución, 1,571 están empleados en servicio al cliente y el remanente 1,454 están asignados a servicios administrativos. En la UITICE hay 839 empleados, en la UTIER hay 4,717 empleados, en la UEPI hay 360 empleados y en la UPAEE hay otros 6 empleados para un total de 5,922. Hay 2, 543 empleados no organizados o el 30 por ciento.
Este escenario plantea serios problemas para la AEE. Tiene que cambiar su estructura para reducir los costos de producción, bajar los precios de la electricidad para aumentar la demanda y no tiene el capital ni la capacidad de tomar prestado. Tiene deudas por $2.3 billones y pagos comprometidos por $1.6 billones con el plan de pensiones para un total $3.9 billones. La solución a estos problemas no está en la AEE, la AEE es el problema. Es necesario que el Gobierno Central tome control de la AEE y reduzca los gastos operacionales e invierta en transformar las plantas de producción de energía eléctrica a gas natural.
La Cámara de Comercio, la Asociación de Productores de Energía Renovable, el Centro Unido de Detallistas, la Asociación de Constructores, la Asociación de Restaurantes de Puerto Rico, la Asociación de Productos de Puerto Rico y la Asociación de Industriales siguen de cerca el curso de la Reforma Energética.Agustín Santiago/EL VOCERO
La Reforma Energética que se ha presentado como la panacea para resolver gran parte de los problemas económicos que enfrenta el país no servirá de nada a menos que el propio Gobierno la haga cumplir y se garantice una fiscalización verdadera a la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).
Representantes de diversos sectores empresariales del país coincidieron en que este proyecto, el cual espera por la firma del gobernador, Alejandro García Padilla, es un paso en la dirección correcta, siempre que no corra el mismo destino que otros tantos proyectos que, luego de aprobados, nunca fueron implementados.
El presidente de la Cámara de Comercio, Jorge M. Cañellas, sugirió que se cree una comisión fiscalizadora compuesta principalmente por representantes del sector comercial que se encarguen de fiscalizar a la Comisión de Energía, ente que a su vez tiene la responsabilidad de fiscalizar a la AEE.
Cabe señalar que el proyecto aprobado por la Legislatura crea cuatro nuevas entidades, incluyendo al menos dos dedicadas a la fiscalización. Cañellas dijo que el grupo que propone podría crearse por orden ejecutiva.
“Tiene que haber un comité evaluador de la empresa privada y puede ser creado por orden ejecutiva”, dijo Cañellas.
El proyecto de reforma energética fue aprobado el jueves en el Senado luego de un intenso proceso de negociación con la Cámara, donde realizaron varias enmiendas. Entre otras cosas, aumentaron a tres años el tiempo que tiene la AEE para cumplir el cometido de producir energía más barata y limpia y establece un marco legal para la entrada de compañías privadas al proceso de vender energía. Le da a la AEE 60 días a partir del 1 de julio para presentar el plan a la Comisión de Energía.
El director de la Asociación de Productores de Energía Renovable, Julián Herencia, dijo que el proyecto crea un marco legal que haría posible reducir el costo de la luz, siempre que se siga el plan y se haga cumplir a la AEE con su propuesta de reducir el costo de la luz para 2015.
“Este proyecto es el andamiaje, pero si funciona o no va a depender de que se nombren esos comisionados, que se fiscalice y que se aseguren de que el plan de la AEE es ejecutable”, dijo Herencia.
Los portavoces de este sector comercial dijeron estar complacidos con los cambios al proyecto, aunque manifestaron que hubieran preferido que se le dieran dos años, en vez de tres, a la AEE para cumplir su cometido de producir luz más barata.
Enid Monge, presidenta del Centro Unido de Detallistas, expresó que aun con el año adicional otorgado a la AEE “lo importante es que lo hagan”.
“Nos preocupa que haya fiscalización para que se logre ese cometido”, dijo Monge.
Por su parte, la presidenta de la Asociación de Industriales de Puerto Rico, Waleska Rivera, dijo que solicitaron una reunión a la AEE para discutir el plan presentado para reducir el costo de la luz. Esta reunión no se ha concretado. Insistió en que para la AEE sería más efectivo conseguir el aval de los industriales y el sector comercial.
“Esto es algo que le afecta a todos los sectores. En el grado en que no seamos más competitivos, no vamos a poder atender los otros problemas del país”, dijo Rivera. “Si hay transparencia, habrá rendimiento de cuentas”.
Presidente del Senado, Eduardo Bhatia,EL VOCERO / Archivo
El líder senatorial reaccionó de esta manera, tras la investigación periodística revelada ayer por EL VOCERO, que apunta a que existe un esquema altamente sofisticado que manipula los resultados de las pruebas de porcentaje de azufre en el combustible.
“Por la magnitud del dinero envuelto, podemos estar hablando de un fraude millonario”, sentenció Bhatia en entrevista con este rotativo.
El presidente de la Cámara alta, reveló que al trabajar el proyecto de reforma energética, recibió información similar a la publicada por este rotativo.
“Alguna de la información que publicó EL VOCERO hoy (ayer) nos había llegado a nosotros, menor a la que ustedes tenían, pero una vez terminado el proyecto de reforma energética, tenemos ya hasta declaraciones juradas que se pueden utilizar como punto de partida como actos que no son cónsonos con el mejor uso de fondos públicos por parte de la corporación pública”, sostuvo.
“Lo que ustedes imprimieron hoy (ayer) en EL VOCERO es información bien sólida y reveladora de varias formas distintas de utilizar la compra de combustible para hacer actos fraudulentos. Si uno piensa la magnitud de la compra, que es sobre $2 mil millones al año, hay tantos y tantos espacios para cometer fraude que por eso que queremos meternos en investigar este asunto”, destacó.
Tal y como había adelantado, desde que impulsó el proyecto de reforma energética, el presidente del Senado consiguió que el cuerpo aprobara una resolución para investigar el proceso de compra de combustible en la AEE y sus finanzas.
“Hay información pública, y sin embargo cayó en oídos sordos y no se conoce de acciones correctivas que hayan sido tomadas por parte de la Autoridad para atender señalamientos del Contralor de Puerto Rico”, agregó el funcionario.
El portavoz de la mayoría del Partido Popular Democrático (PPD), Aníbal José Torres, presidirá la comisión especial que investigará el tema y contará con representación de la minoría del Partido Nuevo Progresista (PNP) y el Partido Independentista Puertorriqueño (PIP).
Bhatia adelantó que se citarán a figuras del ámbito público y privado que participan en el proceso de compra y análisis de combustible.
“El Senado tiene amplios poderes y como parte de los proyectos que se le reconocieron al Senado como parte de la investigación del Cerro Maravilla en la década de los 80, hay mucha jurisprudencia que básicamente le da al Senado un poder enorme de investigar y dar el poder de que un investigar presente ‘subpoenas’ y vaya al tribunal para conseguir documentos”, concluyó Bhatia.
Suena López Cintrón
El presidente del Senado, Eduardo Bhatia, no adelantó quién será designado como investigador de la comisión especial, pero una fuente de este rotativo aseguró que pudiera considerarse al exfiscal especial independiente, César López Cintrón.
López Cintrón logró, entre otros casos, la convicción del secretario de Educación, Víctor Fajardo.
Entre los deberes y responsabilidades de la comisión especial estará examinar en detalle cómo la AEE maneja la compra de petróleo. Además, examinará cómo se validan las especificaciones de petróleo en cuanto a cantidad, temperatura y precio, la forma en que se mide la cantidad de petróleo que se adquiere, y el rol de los funcionarios o empleados que realizan esta tarea. Al mismo tiempo, determinará quiénes han sido, por un período de quince 15 años, los suplidores de petróleo de la AEE y sus ‘brokers’ o intermediarios.
Se intentó obtener una reacción del secretario de Justicia, César Miranda, sobre la investigación periodística publicada por EL VOCERO, pero el funcionario indicó que por ahora no haría comentarios.
EL VOCERO/Agustín Santiago
Al mismo tiempo, la firma auditora identificó deficiencias que impiden que el Laboratorio de Control de Combustible de la AEE sea acreditado por este ente.
Ante el alegado esquema en el que algunos suplidores de combustible, laboratorios y empleados de la AEE, burlan los procesos de compra y análisis de combustible, los hallazgos de la firma acreditadora independiente son relevantes. Tal y como publicó ayer EL VOCERO, fuentes alegan que se hace pasar combustible derivado del petróleo con un porcentaje de azufre más alto, es decir, combustible más barato, como combustible con porcentaje de azufre menor que en el mercado es más costoso.
Documentos en poder de este rotativo, revelaron que la firma acreditadora de laboratorios ANSI-ASQ National Accreditation Board/ ACLASS, identificó procedimientos cuestionables en los tres laboratorios privados vinculados al análisis del porcentaje de azufre en el combustible que queman las plantas generatrices de la AEE.
La Auditoría Externa de esta firma acreditadora estadounidense, coincide con varios de los hallazgos del borrador de la Auditoría Interna de la AEE, preparado en septiembre del 2010, en el que se detalla que en mayo de ese año se recibió una barcaza de combustible con más porcentaje de azufre del permitido por ley. Fuentes de EL VOCERO aseguraron que el borrador del informe de Auditoría Interna nunca fue presentado ante la Junta de Gobierno de la AEE, luego que varios funcionarios, entre estos William Clark Martínez y el ingeniero gerencial principal, Edwin Rodríguez, objetaran el documento, y lo sustituyeran por otro redactado por ellos.
El borrador de Auditoría Interna de la AEE reveló que “la aceptación de unos resultados de análisis de combustible y el rechazo de otros, sin la debida justificación técnica expone a la Autoridad al riesgo de recibir cargamentos fuera de especificaciones”, es decir con más porcentaje de azufre que el aceptado.
La Auditoría Interna señala además que “la Oficina de Combustibles resolvió la controversia entre resultados discrepantes de análisis de laboratorios utilizando una cláusula del contrato con el suplidor”. Según el documento, la cláusula no contiene ningún criterio técnico para atender discrepancias entre análisis de laboratorio, “ni protege adecuadamente los intereses de la Autoridad”.
¿Qué dice la Auditoría Externa?
Según una minuta de reunión de marzo de 2012, la AEE contrató a la acreditadora ANSI-ASQ National Accreditation Board/ ACLASS para que, bajo un acuerdo de confidencialidad, auditara a los laboratorios contratados y al laboratorio de la propia corporación pública.
De acuerdo a la minuta, si la auditoría encontraba que el Laboratorio de la AEE estaba apto, la corporación pública “perseguiría una acreditación para así dejar de usar a los laboratorios contratados en algún futuro”.
“Se explicó que deseamos acreditar al LCC (Laboratorio de la AEE) para así eliminar a los laboratorios privados por un tiempo e inmediatamente revisar nuestros contratos de compra de combustible para requerirles una acreditación. Si desean trabajar nuevamente en la AEE, tendrán que ellos acreditarse. Esta acción minimizan nuestros riesgos…y establece una protección ante acciones legales”, indica el documento suscrito por el Departamento de Confiabilidad y Calidad.
Sin embargo, una fuente indicó que, al día de hoy, la AEE continúa contratando laboratorios privados para hacer sus análisis.
La agencia acreditadora ANSI-ASQ National Accreditation Board/ ACLASS identificó varios hallazgos catalogados como de “no conformidad”, que dificultaría otorgar la acreditación tanto al Laboratorio de la AEE como a los laboratorios independientes.
Documentos en poder este rotativo, señalan 27 hallazgos de no conformidad para obtener la acreditación en el Laboratorio de la AEE, 11 en el laboratorio Saybolt, 22 en el laboratorio Altol Chemical, y 10 en el laboratorio Inspectorate.
Entre algunos de los hallazgos, se encontró que el Laboratorio de la AEE no tiene un manual de calidad, no hay competencia en el personal técnico, y no conoce el grado de incertidumbre de las pruebas. Este laboratorio realiza las pruebas de azufre en los tanques de la AEE.
Además, según los documentos de “no conformidad” el laboratorio Seylbolt subcontrata en algunas ocasiones otros laboratorios no acreditados.
Mientras, la Auditoría Externa encontró que el laboratorio Altol Chemical no mantiene en sus records internos auditorias de las pruebas relacionadas con combustible, la calibración de la prueba de azufre no está actualizada, y no tiene un programa de control de calidad establecido para las pruebas en el laboratorio.
En tanto, la Auditoría Externa señaló que el laboratorio Inspectorate no tenía un procedimiento para determinar la incertidumbre en sus métodos. Una fuente experta en el tema, explicó que la incertidumbre es importante “para asegurar que las muestras reflejan cumplimiento con lo establecido”.
EL VOCERO intentó obtener una reacción del director ejecutivo de la AEE, Juan Alicea Flores, pero el funcionario comunicó, mediante su oficial de prensa, que atendería a este rotativo en algún momento de esta semana.
Mientras, el gerente general de Seybolt, Víctor Torres, rechazó en declaraciones escritas la participación de su laboratorio en cualquier esquema irregular en el análisis de combustible de la AEE.
A preguntas de EL VOCERO, sobre la existencia de una Auditoría Externa por la acreditadora ANSI-ASQ National Accreditation Board/ ACLASS, Torres se limitó a contestar que “ellos vinieron a auditar a la Autoridad, no a los laboratorios independientes”.
Mientras, describió su relación con el ahora jubilado administrador de la Oficina de Compra de Combustible, William Clark, como una “de negocios, muy normal igual que los otros laboratorios”.
EL VOCERO se comunicó con el gerente general de Inspectorate en Puerto Rico, Rudy Gordian, pero este refirió las preguntas a las oficinas corporativas. No se ha obtenido una reacción de Inspectorate en Houston. Mientras, Altol Chemical no devolvió nuestras llamadas.
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U.S. Bureau of Labor Statistics
The Bureau of Labor Statistics is the principal fact-finding agency for the Federal Government in the broad field of labor economics and statistics.
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The Daily Positive
A few years ago I witnessed a man take a terrible fall on his bike. His seat stem broke in…Continue Reading
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Reflexiones @MasQuePalabras
«Mi abuelo siempre dijo que el mejor regalo era la salud. ¿Y sabes qué? Yo les digo que el mejor regalo es un abuelo.»
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