Durante varias décadas, a partir de 1950, este pueblo vivió el espejismo de una colonia en supuesto desarrollo a base de las asignaciones federales extraordinarias después de la Segunda Guerra Mundial. Esa fue la época en que la prioridad en Washington DC era generosamente distribuir dinero en el mundo para frenar el avance soviético-comunista durante la Guerra Fría que para entonces surgía.
En medio de ese espejismo financiado con fondos federales a través de obras, exenciones contributivas corporativas, la PRERA, préstamos y aparente progreso estaban Muñoz Marín, el Partido Popular y la entonces recién nacida Constitución del ELA. Se confundió al pueblo porque se les hizo creer que ese espejismo de progreso en la Isla era producto de causas y líderes isleños, lo cual no era cierto. Se les hizo creer al pueblo que ese espejismo podría ser permanente, lo cual tampoco es cierto.
Mucha gente les creyó. EL PPD ganó elecciones a su antojo. Esos triunfos sucesivos fueron fortaleciendo al PPD a base del patronazgo partidista, el acceso a las fuentes de poder, a los puestos públicos y todo lo demás. Poco después, la colonia también comenzó a tomar dinero prestado para aparentar el estilo de vida de un estado de la Unión.
Las circunstancias mundiales cambiaron dramáticamente. El comunismo murió. Washington DC acabó el festín de fondos y exenciones contributivas federales. La amenaza comunista ya no existe. El mundo y las economías comenzaron a globalizarse, a hacer cambios y ajustes para amoldarse a la nueva realidad económica pero Puerto Rico seguía estancado en el espejismo colonial desde 1898 y creyendo que la renovada quimera colonial de los ’50 era para toda la vida.
Puerto Rico, como colonia, tuvo una supuesta ventaja competitiva en comparación con los países latinoamericanos. La isla tuvo alguna exclusividad en el libre acceso y mercado de los Estados Unidos –sin pagar impuestos federales por nuestros productos-. Eso, también cambió. Los Estados Unidos comenzaron a otorgar tratados de aperturas comerciales, primero a Canadá y México, y recientemente a los países de América Latina. La pérdida de esa ventaja en esta colonia americana la obliga a competir con países donde la mano de obra es tan diestra como la nuestra, pero más barata. Ahora hay que competir con países que, incluso, tienen la ventaja de ser productores de materias primas importantísimas. A los estados de la Unión esos tratados los han beneficiado, pero a Puerto Rico como colonia, no.
Sí, el mundo ha cambiado y la parálisis centenaria de Puerto Rico frente a esos cambios nos está llevando de frente al precipicio. Aun así, aquí hay gente que la colonia les conviene más por sus propios intereses particulares, algunos de índole de poder político y otros por conveniencias empresariales. Mientras tanto, Puerto Rico quiebra, los puertorriqueños pierden sus casas, sus negocios, sus trabajos, sus ahorros y hasta el sueño.
El espejismo colonial se desvanece. Estamos frente a la cruda realidad de que la colonia que sufrimos hace 116 años, de los cuales 62 han sido bajo la etiqueta del ELA, ya no sirve, no funciona y no tiene solución dentro sí misma. Algunos líderes del PPD comienzan a denunciar el fracaso del ELA. Otros, sin pudor alguno, hablan de la transformación del ELA. Increíble pero cierto.
Don Rafael Hernández Colón y ‘otros’ en el PPD creen que van a seguir haciendo aguaje con el tema del estatus. Recuerdan ustedes… el ‘Pronunciamiento de Aguas Buenas’, ‘La Nueva Tesis’, el famoso comentario de RHC sobre el “déficit de democracia en el ELA”, la guerra con “las plumitas liberales”, el ‘ELA Autónomo’, el ‘ELA mejorado’ y hasta el ‘ELA Soberano del 2008’… Todas son pamplinas, planteadas a través de los años, para distraer y no hacer nada. Ahora vienen con otro invento para intentar perpetuar la colonia. Todo esto me recuerda aquella memorable expresión de Carlos Romero Barceló… “Ay deja eso Rafael”
¿Cuánto más tiene que sufrir este pueblo las consecuencias nefastas del colonialismo? ¿Cuántas mentiras o miedos infundados debe escuchar este pueblo del liderato popular que nunca hará nada? Sobre el tema de estatus en el PPD parece que el Plan A es… agáchese y el Plan B… use camuflaje. Estos personajes pueden estar hablando, sin parar, durante cien años del tema del estatus político y nunca plantearán una sola idea concreta o viable para salir de esta crisis. Su único discurso es el espejismo e intentar tronchar con miedos y mentiras el camino a la igualdad política y económica de la estadidad. Si el ELA fuera tan bueno, tendríamos 37 colonias y no 50 estados.
Esos 37 estados que una vez fueron colonias de los Estados Unidos se percataron de esa realidad hace muchos años. Lucharon la estadidad y todos la lograron. Hoy, todos están mejor que Puerto Rico y ninguno, nunca, celebró la colonia o el fracaso como lo harán mañana el ELA y RHC.
You must be logged in to post a comment Login