En una medida que podría provocar una futura intervención de los Estados Unidos a Venezuela, el presidente Barack Obama, emitió hoy un decreto que declara a este país como una amenaza real para la seguridad nacional.
De acuerdo con la agencia Reuters, el gobierno estadounidense impuso sanciones a siete personas y expresó su preocupación por el tratamiento que el presidente Nicolás Maduro da en Caracas a sus opositores políticos.
“Funcionarios de Venezuela que ahora y antes han violado los derechos humanos de ciudadanos venezolanos y se han involucrado en actos de corrupción, no serán bienvenidos acá, y ahora tenemos herramientas para bloquear sus activos y el uso que hacen del sistema financiero de Estados Unidos”, dijo en una declaración el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.
“Estamos profundamente preocupados por los esfuerzos del Gobierno venezolano para aumentar la intimidación sobre los adversarios políticos. Los problemas de Venezuela no pueden resolverse criminalizando a los disidentes”, agregó.
Latente el fantasma del ‘Cartel de los Soles’
Las sanciones de Obama coinciden con la investigación que lleva a cabo la Fiscalía Federal del Distrito Sur de Nueva York en contra del presidente de la Asamblea Naciona, Diosdado Cabello y otros altos políticos venezolanos por su alegada vinculación al narcotráfico internacional, el cual tiene entre sus mercados preferidos a Puerto Rico.
William Brownfield, secretario de Estado adjunto de Estados Unidos para la división de Narcóticos y Seguridad Internacional, expresó al diario ABC de España que las alegaciones de sus investigaciones son “consistentes” con el análisis que se lleva a cabo en Washington sobre el ‘Cartel de los Soles’ y su fuerte arraigo en los mercados de Suramérica y el Caribe.
“Desde hace más de diez años, ha habido pruebas de que ciertos individuos dentro del Gobierno de Venezuela han sido corrompidos o penetrados por organizaciones narcotraficantes”, agregó Brownfield.
El ‘Cartel de los Soles’ domina ampliamente el tráfico de drogas a través de todo el Caribe, teniendo como ‘homes’, la isla de Santa Cruz, Vieques, Culebra y Puerto Rico. De hecho, entre los natrcotraficantes ya se habla de Vieques como la ‘tierra de la libertad’, dado el caso que luego de la salida de la Marina de los Estados Unidos en el 2000, autoridades federales y estatales parecieron haber abandonado su vigilancia, tanto en el interior como en sus costas. Esto convirtió a Vieques en puente directo con el tráfico de drogas y armas con la vecina Santa Cruz.
Rafy Rivera, EL VOCERO
Subdirector de EL VOCERO, graduado de de la Escuela de Comunicaciones de la UPR; tiene sobre 20 años de experiencia en la cobertura de noticias.
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