Puerto Rico: donde único se celebra que se venden bonos a precios de usura Jenniffer González censura altos intereses en la transacción
El Capitolio:
La portavoz de la Delegación del Partido Nuevo Progresista (PNP) en la Cámara de Representantes, Jenniffer González Colón, catalogó como vergonzosa la celebración por parte de la administración de García Padilla de la demanda que hubo por la emisión de bonos, al ser estos vendidos en un tasa de interés más alta que los bonos de países en quiebra como Grecia y corporaciones con peor clasificación crediticia que Puerto Rico.
“Claro que habrá inversionistas dispuestos a comprar estos bonos a precios de usura y con intereses tres veces más altos de lo que paga un bono a nivel óptimo. El Gobierno del PPD y AGP han estado celebrando el haber logrado una emisión que resulta ser de las más caras en nuestra historia. Hace menos de 2 años el interés era cerca del 5% y ahora es más del 8%”, opinó la expresidenta cameral.
Acerca del perfil de los compradores de estos bonos, la Portavoz los identificó como inversionistas NO tradicionales que el Gobierno pone en ventaja frente a inversionistas tradicionales, que son mucho más exigentes.
“Al haberles otorgado el derecho a demandar en la corte del estado de Nueva York, esta administración coloca a los nuevos inversionistas en una mejor posición que a inversionistas anteriores, una acción poco justa y que crea suspicacia entre los inversionistas que han apoyado a Puerto Rico por décadas”, argumentó la representante.
González Colón alertó sobre el doble discurso de García Padilla, uno para los bonistas y otro para el pueblo. Con los bonistas se compromete a recortar $1,500 millones en el gasto público, incluyendo la revisión de la fórmula de la Universidad de Puerto Rico, “aunque no quieran aceptarlo la suspensión de convenios colectivos y planifican en cuartos oscuros el despido o reducción de horario de trabajo de empleados públicos. Otro golpe al bolsillo de los servidores públicos sumado a los $2 mil millones en impuestos, aumento en el costo de servicios y recortes en beneficios de jubilación. Sin embargo, los presidentes de los cuerpos legislativos dicen que son solo propuestas. ¿A quién debemos creerle? ”.
Los $3,500 millones en bonos casi consume todo el margen prestatario, lo que limita el poder usar deuda en un futuro para invertir en infraestructura.
El desglose que hizo la Portavoz de la deuda es el siguiente:
1. $400 millones, se utilizarán para pagar intereses sobre los mismos bonos que se están emitiendo, por un periodo de casi 24 meses; o sea, que no lo pagan bajo su administración y lo dejan para que los empiece a pagar la próxima administración.
2. $900 millones los están usando para pagar préstamos a corto plazo que ellos han incurrido durante los pasados 12 meses y para pagar penalidades de terminación de swaps que fueron contratados entre el 2007 y 2008, y que hoy nos cuestan millones y millones de dólares.
3. Además, otorgaron un descuento en el precio de compra a los nuevos bonistas de $245 millones (esto es dinero que no recibimos hoy, pero que tenemos que pagar al cabo de la vida de los bonos, con intereses).
5. $55 millones son para el pago de gastos relacionados a la emisión
6. El resto del dinero, o unos $1,900 millones, según ellos, los están utilizando para refinanciar deuda.
La Vicepresidenta del PNP volvió a señalar que a estas alturas no han publicado la certificación del margen prestatario de Puerto Rico luego de esta emisión. Tampoco dudó en que García Padilla aumentará la deuda ya que su historial es claro. “Hablan de hacer otra emisión por $900 millones, pero no certifican si ya agotamos el margen prestatario sobre el límite constitucional para emitir deuda. El cálculo de este margen no puede incluir los recaudos no recurrentes producto de fondos federales, en los que se incluye la devolución a Puerto Rico por el arbitrio del ron, entre otros”.
Al 31 de diciembre de 2012, la deuda pública estaba rondando los $69,800 millones. Al 31 de diciembre de 2013, la deuda había aumentado, según datos ofrecidos por el propio Banco Gubernamental de Fomento, a $71,900 millones, para un incremento en 12 meses de $2,100 millones, aunque el Gobernador insiste en que no ha aumentado la deuda pública ni un centavo.
“Aunque continúen intentando echar la culpa hacia atrás, todos sabemos que la situación en que nos encontramos tiene mucho que ver con la forma en que este Gobernador ha tratado a los inversionistas y las casas acreditadoras, la improvisación en temas fiscales y de desarrollo económico y el aumento en el presupuesto actual, que ahora dicen estar reduciendo y adjudicándose un logro”, culminó González Colón.
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