“Esto de denominar a la Ciudad Capital como Ciudad Patria es inconsistente con la poca importancia que Doña Carmen le brinda a nuestra cultura”, señaló Arango.

Según un comunicado enviado por el senador, en el pasado presupuesto municipal, aproximadamente el 80% del presupuesto del Departamento de Arte y Cultura del municipio fue designado para el pago de nómina, administración general y contratos por servicios. Este presupuesto solo asigna una cantidad mínima para el desarrollo de eventos culturales y el desarrollo de los talentos artísticos de la población, a juicio del pre-candidato a la alcaldía municipal.

“Es en la asignación presupuestaria que se hace obvio el menosprecio a nuestro desarrollo cultural, ese es el doble discurso. La Alcaldesa durante la campaña del 2012 prometió un plan llamado “Renacer Cultural” y lo que hace en la práctica es una “demolición cultural” al proveerle tan pocos recursos al ámbito cultural”, sentenció Arango.

Hace dos años, la actual alcaldesa se comprometió con implantar un programa que incluía la creación de una “Comisión para el Fomento de la Cultura”, un programa educativo para el desarrollo cultural y el establecimiento de un gestor cultural para impulsar proyectos artísticos entre otros. Arango aseguró que la conclusión obvia para explicar este incumplimiento es “la falta de compromiso o la falta de capacidad aunque ambas son igualmente dañinas”.

Otro de los compromisos que hizo la entonces candidata a la alcaldía de San Juan fue el adquirir el Hotel Normandie para convertirlo en lo que llamó un “excelente centro de intercambio cultural” y lo rehabilitaría para hacer un mercado de artesanía. Arango se manifestó preocupado ante esta promesa y manifestó que “la Alcaldesa está obligada ante los sanjuaneros a explicar cuál es el costo de esta idea, de donde provendrán los fondos, quienes estarán envueltos en esta transacción y que fin público persigue. Los sanjuaneros queremos saber qué áreas de servicios municipales se afectarán con la adquisición del Normandie”.

Arango propuso el obligar mediante ordenanza que al menos el 50% de los fondos en el área de la cultura estén destinados al desarrollo directo de eventos culturales y que estos fondos sean visto como una inversión. Arango manifestó que esta inversión tiene dos dimensiones principales, “la primera, el promover una mejor calidad de vida de la ciudadanía y de las futuras generaciones en la Ciudad Capital, y la segunda, promover el desarrollo económico mediante la promoción de esta industria para la cual contamos con tanto talento”