La presentación que hiciera el gobierno local sobre los “acuerdos” firmados con el gobierno de la República Dominicana podrían provocar conflictos entre el hermano país con nuestra nación, Estados Unidos, por -aparentemente- no estar dentro del marco jurídico establecido, advirtió la representante Jenniffer González Colón.
“Más allá del juego a ser república con el espectáculo que hiciera el gobernador el pasado martes con la visita a la isla del presidente de República Dominica, los ‘acuerdos’ anunciados con tanta fanfarria podrían no poder llevarse a cabo o representar inconvenientes diplomáticos”, expresó la portavoz del Partido Nuevo Progresista (PNP) en la Cámara de Representantes.
La legisladora explicó que los actos se llevaron a cabo “como si se tratase de homólogos, pero el gobernador de Puerto Rico no es un jefe de Estado, carece de poder para firmar tales ‘acuerdos’, que le hubiesen competido al presidente de los Estados Unidos y no a él como gobernador de un territorio”.
Medios locales han reseñado que todo apunta a que las iniciativas de colaboración no contaron con la aprobación o discusión del Departamento de Estado a nivel federal.
Según la política, este señalamiento pudiera sostenerse. Las distintas administraciones en el Departamento de Estado federal han aplicado criterios o estándares diferentes para aprobar los acuerdos de cooperación técnica que el gobierno de Puerto Rico ha suscrito con gobiernos extranjeros a través de los años.
“Ejemplo de ello es que bajo la administración de Hillary Clinton, el criterio o estándar del Departamento de Estado federal era estricto. El gobierno de Puerto Rico no podía suscribir con un gobierno extranjero ningún documento que se denominara ‘acuerdo’; se le debía llamar ‘memorándum de entendimiento’”, recordó González Colón.
Añadió que “tampoco se podía hacer referencia a los firmantes como ‘partes’; se les debía llamar ‘participantes’. Si tales criterios continúan, se evidencia que los mismos no fueron ni tan siquiera discutidos con el Departamento de Estado federal, encargado de las relaciones diplomáticas”.
La legisladora recordó que el documento firmado por el entonces presidente dominicano Leonel Fernández y el gobernador Luis Fortuño, en junio de 2009, contenía además la firma del jefe de la delegación de la embajada estadounidense en la República Dominicana, como demostración inequívoca del endoso y aceptación del Departamento de Estado federal.
“No criticamos el estrechar lazos de colaboración o entendimiento con otras jurisdicciones que resulten en beneficio para la isla, pero sí el que se quiera hacer fuera del marco jurídico establecido, y jugar a la república. Al no contar con la aprobación o consentimiento de aquellas agencias pertinentes, nuestra credibilidad como gobierno puede estar en entredicho, al poner en juego nuestra palabra proyectando desconocimiento de nuestras propias leyes o desgobierno”, advirtió González Colón.
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